Al ir ella en el asiento del copiloto y no en la parte trasera, han puesto una multa de 600 euros al prelado vasco.
Varios medios se hacían eco esta tarde de la multa con la que habían sancionado al obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla, por conducir un vehículo con una persona de copiloto, algo que estaría prohibido en el Estado de alarma decretado con motivo del coronavirus.
Según estas normas, el acompañante debería haberse sentado en la parte trasera del vehículo. Como consecuencia de esta infracción, han multado al prelado con 600 euros.
El propio Munilla ha manifestado que la persona que le acompañaba era «una inmigrante atrapada entre nosotros» que padece una infección bucal. El obispo de San Sebastián la estaba llevando a un dentista conocido que le iba a atender gratis.
«Ese «copiloto» era una inmigrante atrapada entre nosotros, quien padece una infección de boca, a la que yo conducía a un dentista conocido que se ha ofrecido a atenderla de gratis… Agradezco al dentista, pido perdón por el error de asiento, y perdono al filtrador de la noticia», dijo el obispo de San Sebastián en las redes sociales.
Ese "copiloto" era una inmigrante atrapada entre nosotros, quien padece una infección de boca, a la que yo conducía a un dentista conocido que se ha ofrecido a atenderla de gratis… Agradezco al dentista, pido perdón por el error de asiento, y perdono al filtrador de la noticia. pic.twitter.com/ynqsySqIXW
— Jose Ignacio Munilla (@ObispoMunilla) March 26, 2020