El juicio, que comenzó el pasado 18 de julio, se ha suspendido para permitir a las partes analizar nuevos documentos presentados como prueba. El Tribunal ha fijado los días 19, 21 y 22 de septiembre como fecha de las próximas audiencias, en las que se escuchará a los imputados y a los testigos.
Este jueves 7 de septiembre ha tenido lugar en el Tribunal del Estado de la Ciudad del Vaticano la segunda audiencia del juicio contra Giuseppe Profiti y Massimo Spina, imputados en el proceso por malversación de fondos de la Fundación Bambino Gesù.
Profiti, ex presidente de la citada fundación, y el ex tesorero Spina han sido acusados de haber utilizado ilegalmente fondos de la Fundación Bambino Gesù -que recoge donaciones para este hospital pediátrico dependiente de la Santa Sede- para la reforma del ático en el que vive el ex secretario de Estado del Vaticano Tarcisio Bertone.
Según las acusaciones, los dos ex directivos habrían utilizado 422.005 euros de la fundación para efectuar obras de reestructuración en el inmueble destinado a la residencia del cardenal Bertone, en beneficio del empresario italiano Gianantonio Bandera.
En la audiencia han estado presentes los testigos Gianantonio Bandera, Marco Bargellini, Paolo Mennini, Paolo Cipriani, ex gerente del IOR, y Massimo Tulli. No estaban, sin embargo, Tommaso Di Ruzza, director de la Autoridad de Información Financiera (AIF), y Mariella Enoc, presidenta del hospital infantil Bambino Gesù.
El juicio, que comenzó el pasado 18 de julio, se ha suspendido ahora para permitir a las partes analizar nuevos documentos presentados como prueba. En concreto, una memoria presentada por la presidenta del Bambino Gesù. El Tribunal ha fijado los días 19, 21 y 22 de septiembre como fecha de las próximas audiencias, en las que se escuchará a los imputados y a los testigos.
El ex secretario de Estado vaticano no ha sido imputado en este caso relacionado con los fondos utilizados para reformar el ático en el que reside, ni tampoco figura en la lista oficial de testigos. Según informó en su momento el portavoz oficial del Vaticano, Greg Burke, Bertone, por su condición de miembro del colegio cardenalicio, no puede ser investigado por la justicia ordinaria, sino sólo por el Tribunal Supremo especial del Vaticano.
Este proceso por malversación de fondos comenzó a raíz de una investigación publicada por el periodista italiano Emiliano Fittipaldi que informaba de que una parte de la reestructuración del ático en el que vive el cardenal Bertone fue pagada con 422.000 euros procedentes de los fondos de la Fundación Bambino Gesù.