El medio estadounidense recoge lo ya publicado por InfoVaticana sobre el fin de la comisión de nombramientos y apunta a un giro institucional del nuevo Papa
El prestigioso medio The Pillar ha dedicado uno de sus artículos principales de esta semana a la situación eclesial en España, centrando su análisis en los cambios que estaría introduciendo el Papa León XIV en el proceso de nombramientos episcopales.
El reportaje, firmado por Edgar Beltrán, confirma y amplía lo que InfoVaticana adelantó: que el Papa ha puesto fin a la comisión informal de nombramientos que funcionó durante el pontificado de Francisco, y que él mismo sufrió en carne propia cuando era cardenal. El objetivo ahora sería restaurar la institucionalidad del proceso, devolviendo el protagonismo a la nunciatura y al Dicasterio para los Obispos.
El fin de una etapa
Durante los últimos años del pontificado anterior, las ternas propuestas por el entonces nuncio Bernardito Auza —de perfil conservador— eran sistemáticamente modificadas o ignoradas en Roma. En su lugar, se impuso una comisión no oficial compuesta por varios obispos españoles afines a Francisco, con capacidad de veto efectivo sobre las candidaturas.
Esa dinámica quedó patente con el nombramiento de José Cobo como arzobispo de Madrid, una designación que no partió del nuncio sino de recomendaciones informales, como la del jesuita Elías Royón. Cobo pasó de párroco a cardenal en un tiempo récord, y simbolizó el ascenso del ala más progresista del episcopado español.
Junto a Cobo, otros nombres como el de José Antonio Satué, obispo de Teruel, ganaron relevancia bajo el amparo de figuras como el cardenal Omella, quien también formaba parte de la citada comisión de nombramientos.
Lo que León XIV quiere cambiar
The Pillar confirma ahora que León XIV ha decidido interrumpir al menos dos nombramientos en España, supuestamente pactados por Omella. Además, el Papa ha expresado su intención de devolver al nuncio y al Dicasterio su papel central, dejando atrás las redes informales de influencia.
La publicación subraya que el Papa no mantiene animadversión personal hacia Cobo, pero no confía en él como lo hacía Francisco. Tampoco cree que Omella —quien asegura seguir teniendo acceso privilegiado al Papa— conserve esa influencia.
Como muestra del cambio de dinámicas, The Pillar revela que Omella estaría promoviendo ahora a Satué para Málaga, una diócesis importante pero sin expectativa de capelo cardenalicio. Es un cambio respecto a la intención anterior de posicionarlo en Barcelona, sede que sí suele conllevar birreta roja.
También destaca que León XIV ha recibido al ex nuncio Auza el pasado 23 de mayo, mientras que no se ha reunido ni con Cobo, ni con Omella ni con Satué. Todo indica una voluntad clara de escuchar otras voces y reequilibrar el proceso.
¿Quién será el nuevo nuncio?
Uno de los puntos clave será el nombramiento del nuevo nuncio en España. Según The Pillar, su perfil será determinante para consolidar el giro institucional. Uno de los nombres que suenan es el del venezolano Edgar Peña Parra, actual sustituto en la Secretaría de Estado, cargo que suele cambiar tras la elección de un nuevo Papa.
Peña Parra podría ser trasladado a Madrid como solución diplomática a su delicada situación en Roma, y sería percibido por algunos obispos como más cercano a la línea de Auza. Además, habría tenido roces previos con Cobo, lo que lo convertiría en una figura de equilibrio ante su posible exceso de influencia.
España, prueba de fuego
El artículo concluye subrayando que España puede convertirse en una prueba de fuego para el nuevo pontificado. La complejidad del mapa episcopal y las redes de influencia establecidas durante la era Francisco hacen que cualquier intento de reforma requiera claridad, determinación y buenos nombramientos.
Con las sedes de Málaga y Barcelona aún vacantes, y a la espera del nuevo nuncio, los próximos meses pueden marcar un antes y un después. El enfoque institucional de León XIV —que InfoVaticana ha señalado desde el inicio— encuentra ahora eco internacional en este análisis de The Pillar.