El cardenal Koch reconoce que muchos obispos alemanes y suizos presionan para que se apruebe el sacerdocio femenino

Cardenal Koch

El cardenal Koch, presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos desde julio de 2010, ha concedido una entrevista al Tagespost en la que reconoce que Fiducia supplicans ha sido un «obstáculo» a la hora de mantener el diálogo interreligioso con otras confesiones cristianas.

Para el cardenal suizo, la guerra en Ucrania es un revés para la reputación de los cristianos en el mundo: la tragedia particular es que los cristianos están librando una guerra contra los cristianos, e incluso los ortodoxos se están matando entre sí».

El cardenal Kurt Koch lamenta que los cristianos estén haciendo la guerra contra otros cristianos. «Este es un mensaje extremadamente malo para todo el cristianismo», asegura.

El Prefecto del Dicasterio para la Unidad de los Cristianos considera necesarias las negociaciones entre Rusia y Ucrania si su objetivo es una paz justa. No basta, subraya el cardenal, conducir negociaciones simplemente para encontrar la paz en el sentido de silenciar las armas. Dado que ambas partes tienen ideas diferentes sobre la paz, debe quedar claro que las negociaciones deben girar en torno a una paz justa en Ucrania.

El problema de Fiducia supplicans

Sobre la cuestión del rechazo de la declaración Fiducia supplicans sobre la bendición de las parejas homosexuales por parte de las comunidades eclesiales orientales, Koch espera unas palabras aclaratorias del Prefecto del Dicasterio de la Fe, el cardenal Víctor Manuel Fernández.

El cardenal Koch asegura que pidió a Tucho Fernández que respondiera a las inquietudes de los cristianos orientales para tratar de apaciguar los ánimos.

El cardenal también ve desacuerdos en la Iglesia católica con respecto a la ordenación de las mujeres: También en la Iglesia católica hay ideas y demandas heterogéneas en este tema. Hay bastantes obispos en Alemania, Suiza y otros países que exigen decididamente la ordenación de mujeres y hacen depender de ello la futura viabilidad de la Iglesia católica.

Para él, sin embargo, es importante que todas las iglesias y comunidades eclesiásticas cristianas, especialmente en el Año Santo 2025, que es también la conmemoración de los 1.700 años del Credo de Nicea, mantengan la fe en Jesucristo