La rodilla del Papa vuelve a dejar a Roma sin una celebración del Corpus, Misa y procesión, presidida por el Santo Padre.
“Debido a las limitaciones impuestas al Papa por la gonalgia y a las necesidades litúrgicas específicas de la celebración, no se celebrará la Santa Misa y Procesión con la Bendición Eucarística con motivo de la Fiesta del Corpus Domini”, reza el comunicado.
La misma rodilla ha dejado al Papa, como ya informábamos, sin poder viajar, como esperaba con ansia, al Congo y a Sudán del Sur en julio, pero para esta ausencia sí tenemos palabras del propio Francisco, que asegura: “Realmente siento un gran pesar por haber tenido que posponer este viaje, que me importa mucho”.
Por lo tanto, «no sólo la intención de proteger los resultados que está dando el tratamiento médico, sino también una celebración muy exigente, intervienen en la jornada del jueves 16 de junio», se lee en Vatican News.
Ya en los dos últimos años, debido al Covid 19, la Misa de la Solemnidad que recuerda la presencia real de Jesús en la Eucaristía se había celebrado con un número contingente de fieles en el Altar de la Cátedra de San Pedro y no en el escenario tradicional del atrio de San Juan de Letrán, con la procesión a Santa María la Mayor, o incluso en localidades suburbanas como ocurrió en 2018, con la celebración en Ostia, y en 2019, en el barrio romano de Casal Bertone.