Ante una sale llena de periodistas de todos los medios, han comparecido el presidente de la firma Cremades& Calvo Sotelo, Javier Cremades y el presidente de la Conferencia Episcopal, Juan José Omella. Acompañando al cardenal Omella estaba también el portavoz y secretario general, Luis Argüello y el responsable de comunicación de la CEE, José Gabriel Vera.
En primer lugar, ha tomado la palabra el presidente de la firma del despacho, el abogado Javier Cremades, supernumerario del Opus Dei. Cremades ha catalogado esta rueda de prensa de «insólita» ante la excepcionalidad del hecho acontecido. Sus primeras palabras también han sido de agradecimiento para la CEE por su confianza depositada en ellos para llevar a cabo este trabajo. Cremades ha adelantado que cuenta con un equipo compuesto por 18 personas para llevar a cabo esta auditoría que quiere que sea «real y creíble».
Dentro de ese equipo destacan nombres como el de Santiago Calvo-Sotelo; el exmagistrado del Tribunal Supremo y del Constitucional, Vicente Conde; el exmagistrado y presidente de la sala segunda del Tribunal Supremo Juan Saavedra o la ex vicepresidenta del Tribunal Constitucional, Encarnación Roca. Además, contarán con el apoyo de abogados alemanes quienes vendrán una vez al mes a Madrid para tratar los temas que conciernen a la auditoría.
«Como presidente, este es el asunto más complejo que hemos afrontado hasta la fecha», asegura Cremades quien también ha reconocido que el encargo le llegó hace pocas semanas. Durante este periodo, han ido estudiando el modelo seguido por varios países como Francia o Alemania. Ha destacado, que el modelo «español» es un híbrido en comparación con el trabajo desarrollado por otros países. Este trabajo tendrá una duración de un año y han pedido «la ayuda e información de todos» para desarrollar de la mejor manera posible este cometido. Cremades ha insistido en que esta auditoria, no pretende ser una alternativa a lo que quieran hacer los poderes públicos, sino más bien algo complementario.
Apertura de un buzón de denuncias
La firma de abogados ha anunciado que hoy mismo ha puesto en marcha un correo electrónico (denunciaabusos@cremadescalvosotelo.com) para facilitar la denuncia de casos de abusos, para atender a las víctimas y elaborará una completa documentación de los casos históricos. «Este cauce de colaboración y denuncia es complementario a los ya existentes en las más de 40 oficinas desplegadas por la Iglesia. Igualmente revisará los aspectos jurídicos de la actuación de los organismos e instituciones religiosas encargados de la prevención y sanción de dichos casos. El bufete hará público un informe de todos los que hayan sido documentados hasta la fecha, al que se adjuntará un análisis a cargo de una auditoría independiente», ha comunicado el despacho.
Omella apuesta por mirar al futuro
Tras la intervención de Javier Cremades, ha tomado la palabra el cardenal y presidente de la Conferencia Episcopal, Juan José Omella quien ha comenzado pidiendo de nuevo perdón por los abusos cometidos en el seno de la Iglesia. Omella ha afirmado que la «CEE quiere dar un paso más en el campo de la transparencia sobre los abusos y por ello encarga al despacho una investigación para que audite el trabajo realizado hasta el momento por las diócesis.
Por otro lado, Omella ha destacado que el principal objetivo es «la ayuda y reparación a las víctimas» y «establecer un puente con el trabajo de las autoridades». El arzobispo de Barcelona ha asegurado que la CEE «quiere sumir su responsabilidad» y ha pedido a todos «ayuda y comprensión ya que este trabajo nos llevará un tiempo».
Al comenzar la ronda de preguntas Omella ha puesto el énfasis en que «lo importante es empezar una nueva etapa y mirar al futuro e intentar no mirar al pasado y lamentarnos, que es muy propio de los españoles». Acto seguido se ha vivido el momento de mayor tensión cuando un periodista ha comenzado a relatar casos de abusos acusando directamente a Omella de encubridor.
Otras de las preguntas, dirigida en este caso a Cremades, ha ido relacionada con su pertenencia al Opus Dei y la reciente sentencia del caso Gaztelueta. El presidente de la firma no ha querido entrar al trapo y se ha limitado a responder que comparece en calidad de abogado y no como miembro de nada y ha insistido en que «vamos a ir hasta el final».
Auditoría complementaria con lo que haga el Gobierno y en colaboración con las diócesis
«Esta investigación se hace en colaboración y coordinación con el Gobierno. Pretende ser un complemento de lo que puedan hacer los poderes públicos», respondía Cremades a una pregunta de los periodistas. El papel que juega la Conferencia Episcopal, será principalmente el de servir de canal entre el despacho y las distintas diócesis, colegios y órdenes religiosas.
Omella también ha destacado que «han seguido los protocolos marcados por la Santa Sede» y ha anunciado que «informaremos inmediatamente a Roma de esta nueva etapa que va a estar muy unida a todo lo hecho hasta ahora».
Por último, en cuanto al tema económico, el despacho ha informado que no cobrará a la Conferencia Episcopal por la auditoría más allá de los gastos que se puedan ocasionar fruto de las investigaciones o del trabajo que se tenga que realizar.