Alrededor de 100 personas se han distribuido por la plaza de San Silvestre para «acabar con el silencio sepulcral de los pastores de la Iglesia frente a la crisis moral y doctrinal de la Iglesia».
Solo faltan dos días para el inicio de la cumbre sobre abusos sexuales a menores dentro de la Iglesia que se celebrará en el Vaticano. Por ello, la capital italiana está siendo testigo desde este lunes de diferentes actos como ruedas de prensa, conferencias o manifestaciones, como la celebrada este martes en la céntrica plaza de San Silvestre.
Sin embargo, esta protesta nada se asemeja al resto de las que estamos acostumbrados a ver. Lo ocurrido este martes en una de las plazas más céntricas de Roma ha sido una «manifestación silenciosa» para romper el «muro del silencio» que existe respecto al tema de la homosexualidad en los abusos dentro de la Iglesia.
Alrededor de 100 personas se han distribuido por la plaza de San Silvestre para «combatir el silencio con el silencio» y han dedicado una hora de oración para «acabar con el silencio sepulcral de los pastores de la Iglesia frente a la crisis moral y doctrinal de la Iglesia».
La manifestación ha sido convocada por Acies Ordinata, «un grupo de laicos católicos de todas partes de Italia y del mundo unidos por el amor de la Iglesia, su doctrina y sus instituciones». La iniciativa, liderada por el historiador y escritor Roberto de Mattei, persigue profesar públicamente la Fe católica de los manifestantes y también «derrumbar el muro del silencio».
Para Acies Ordinata, «la cumbre de los presidentes de las Conferencias episcopales es una ocasión histórica para afrontar no solo el tema de los abusos sexuales a menores, sino también el tema de la corrupción moral, que comprende cada violación de la ley divina y natural, comenzando por la terrible plaga de la homosexualidad».
«El nuestro es un llamamiento a los obispos silenciosos para que tengan el coraje de romper el silencio. ¿Habrá algún pastor que osará decir a verdad al Santo Padre?», se han preguntado los manifestantes.