Mucho antes de que el Papa Francisco hiciera público su intención de crear cardenal (el próximo 7 de diciembre) al dominico inglés Timothy Radcliffe, en estas páginas ya les habíamos ofrecido un perfil sobre el peligro de este religioso y predicador oficial del Sínodo de la sinodalidad.
Por si no fuera suficiente todo lo que este medio -y muchos otros del orbe católico- han publicado sobre este controvertido sacerdote, que llegó a ser el jefe durante varios años de los Dominicos, InfoVaticana publica nuevos textos del neocardenal Radcliffe que en otro contexto en vez de ser elevado al cardenalato hubiera sido motivo de una inspección de Doctrina de la Fe.
InfoVaticana ha tenido acceso a un informe sobre sexualidad humana que elaboró ‘The House of Bishops’, uno de los órganos de la Iglesia de Inglaterra (anglicanos), y que fue publicado en el año 2013. En sí mismo, este informe sobre la sexualidad no presentaría gran interés informativo, pero contiene un resumen de un trabajo al respecto que pidieron al ahora neocardenal Timothy Radcliffe.
Casualmente, el trabajo completo no se puede encontrar ya que ha sido borrado del lugar en internet donde estaba alojado, pero el informe al que ha tenido acceso este medio y sí es público hace citas literales del mismo que son demasiado graves.
Las graves y controvertidas opiniones de Radcliffe sobre homosexualidad
El informe encargado por el órgano anglicano explica que han tratado de colaborar con teólogos que tienen «cosas nuevas e interesantes que decir y que no se dejan cooptar fácilmente para apoyar ninguna postura dentro de las disputas actuales de la Iglesia«. En el transcurso de este trabajo, «escuchamos dos impresionantes presentaciones de teólogos a los que habíamos invitado a reunirse con nosotros porque son bien conocidos por su trabajo sobre ética sexual y relacional: El profesor Oliver O’Donovan y Fr. Timothy Radcliffe OP. Ambos tuvieron la amabilidad de facilitarnos las transcripciones de sus presentaciones ante nuestro grupo, por lo que podemos resumir sus aportaciones con una serie de citas directas», se lee en el informe.
Timothy Radcliffe expuso en esas jornadas de trabajo -tal y como queda plasmado en el citado informe que tiene completo al final de la noticia- que durante la mayor parte de la historia de la Iglesia, la conducta sexual no ha sido una preocupación importante ni se ha entendido principalmente en términos de normas. Según el neocardenal dominico, el cambio comenzó con la Reforma, pero sólo con la Ilustración vemos una preocupación primordial por la regulación del sexo: «… mi sospecha es que tanto esta obsesión por el sexo como el énfasis en las normas (son) relativamente tardíos y ajenos al cristianismo tradicional», dice el futuro cardenal de la Iglesia católica.
En su lugar, el P. Radcliffe propuso una ética sexual eucarística que partiera de la entrega del cuerpo de Jesús en la Última Cena. El informe de los anglicanos recoge que esa visión «podría ayudarnos a superar el dualismo -la división entre cuerpo y alma- que ha sido un problema constante para el pensamiento cristiano, especialmente desde Descartes. Si somos en esencia mentes, entonces lo que hacemos con nuestros cuerpos no es tan importante…. Nuestra sociedad permisiva tiene un desprecio implícito por el cuerpo».
El padre Radcliffe continuó hablando del problema de la ‘cultura machista’. Para el predicador sinodal elegido por Francisco, «el orgullo masculino herido no soporta mostrarse vulnerable…. Hasta hace poco, la homosexualidad se consideraba afeminamiento y, por tanto, se enterraba y ocultaba. Esto a veces conducía a la ocultación y la deshonestidad».
En el apartado del informe que recoge la intervención de Radcliffe se lee también esto: «Como Jesús se entregó a sí mismo de una vez para siempre, la relación sexual es un acto de alianza: «nos entregamos para siempre». Pero en nuestra sociedad, el matrimonio es una institución frágil y ningún vínculo es tan seguro como antes. Vivimos en una sociedad de contratos a corto plazo, tanto en el trabajo como en casa», lo que dificulta mucho las cosas a las parejas. La Iglesia debe encontrar la manera de ofrecer «una acogida completa» a las personas cuyos matrimonios se han roto.
En una clara manifestación de intenciones, el neocardenal inglés ya defendía hace más de diez años que el reto para la Iglesia es «valorar el significado inherente de la relación sexual como alianza… al tiempo que se afrontan los inevitables fracasos que incluso los mejores cristianos experimentarán».
En otro momento, Timothy Radcliffe también aseguró que otro aspecto de la entrega de Jesús es que: «Es una fecundidad que estallará en frutos en la mañana de Pascua». La fecundidad y la fertilidad también son intrínsecas a la sexualidad. El P. Radcliffe señaló lo difícil que resultaba el concepto católico de un clero no casado en muchas partes de África, donde la idea de la fertilidad se encuentra en el corazón de la comprensión de la sexualidad, en una cultura arraigada en los ritmos del año agrícola con sus ciclos de siembra y cosecha. En algunos lugares de África que había visitado, percibió que la homosexualidad «contradecía tanto la profunda relación entre sexualidad y fertilidad que resultaba difícilmente comprensible».
Autodonación de Cristo en la sexualidad gay
Sin lugar a dudas, es el punto 266 del informe del organismo anglicano lo que más polémica genera. Lo más preocupante, es que no es la opinión de un anglicano sino la creencia de un sacerdote católico y que si nadie lo remedia será creado cardenal el próximo siete de diciembre. Esto dice el polémico párrafo de la intervención que hizo Radcliffe: «¿Cómo afecta todo esto a la cuestión de la sexualidad gay? No podemos empezar con la cuestión de si está permitida o prohibida. Debemos preguntarnos qué significa y hasta qué punto es eucarística. Ciertamente, puede ser generosa, vulnerable, tierna, mutua y no violenta. Así que, en muchos sentidos, creo que puede ser expresiva de la autodonación de Cristo». Insistimos, el que ha dijo estas palabras en 2013 será creado cardenal por decisión expresa del Papa Francisco y ha sido el encargado de predicar los retiros sinodales.
Por último, el neocardenal inglés asegura que «también podemos ver cómo la homosexualidad puede ser expresiva de la fidelidad mutua, una relación de alianza en la que dos personas se atan la una a la otra para siempre. Pero la legislación propuesta para el «matrimonio homosexual» implica que no se entiende como inherentemente unitivo, un hacerse una sola carne. Por eso no se propone ninguna equivalencia ni para la no consumación, el convertirse en una sola carne, ni para el adulterio, que es la negación de ese vínculo».