La diócesis de Getafe, ante las presiones del Ayuntamiento, ha optado por tapar la placa del Cerro de los Ángeles que recuerda que ese lugar fue levantado por mandato de Francisco Franco.
El pasado mes de enero, el Ayuntamiento de Getafe (PSOE) volvió a presionar a la diócesis de Getafe para que retirase la placa que hasta hace escasos días podía verse en el Cerro de los Ángeles y que recordaba que el primer viernes de agosto de 1936 fue profanado y violado dicho monumento.
Francisco Franco ordenó la construcción del nuevo templo que inauguró el 25 de junio de 1965 renovando la consagración de España al Sagrado Corazón de Jesús.
En diciembre, el Obispado de Getafe instaló una valla en para delimitar la zona como privada y, por lo tanto, ajena a la normativa, que cita expresamente «espacios abiertos al público» o «locales y establecimientos públicos».
Esa medida fue insuficiente para el Gobierno local que aprobó en el Pleno de enero una propuesta que contó con el respaldo de la Mesa de Memoria Democrática de Getafe, para iniciar los trámites que incluyan esta placa en el catálogo de símbolos y elementos contrarios a la Memoria Democrática.
Aprobada la moción e iniciados los trámites, la diócesis de Getafe que pastorea el obispo Ginés García Beltrán ha decidido tapar esa inscripción con una lona para cumplir con la totalitaria ley de Memoria Democrática.
El odio ‘rojo’ contra el Sagrado Corazón de Jesús
El 23 de julio de 1936, cinco jóvenes de Acción Católica guardaban el lugar de posibles represalias, toda vez que los templos y enclaves religiosos eran pasto de la ira anticlerical desde el inicio de la Segunda República. Los cinco fueron asesinados como preludio de lo que iba a pasar.
El día 6 de agosto de 1936, los milicianos que habían ocupado el cerro colocaron un potente cable de acero, que pusieron alrededor del cuello de la estatua del Sagrado Corazón, enganchándolo a un tractor. Tiraron en varias ocasiones y cuando creyeron que a la tercera iría la vencida, el cable se partió. Al día siguiente minan el monumento con explosivos y logran su propósito. Antes habían fusilado al Cristo, cuyo corazón «esquivó» las balas.
Desde el año 2016, el Ayuntamiento socialista de Getafe batalla por retirar esa placa. Un objetivo que han logrado ahora a pesar de la oposición de Vox y que al comienzo contó con la abstención cómplice de PP y Ciudadanos.