Piden 5 años de cárcel para un monje de Montserrat por abusos sexuales a un chico

Piden 5 años de cárcel para un monje de Montserrat por abusos sexuales a un chico

Según ha avanzado el Periódico de Cataluña, la Fiscalía ha solicitado cinco años de cárcel para uno de los tres monjes de la Abadía de Montserrat acusados de pederastia.

El hermano Gabriel será juzgado por haber abusado presuntamente de un menor de 16 años en 2019 para quien el religioso era un guía «personal y espiritual». En su escrito, el fiscal subraya que el hermano Gabriel —que fue apartado por la Abadía de Montserrat cuando trascendieron los hechos— no solo conocía los “problemas personales” del joven, sino también la circunstancia de que es homosexual.

Según apunta el medio citado, en aquel entonces el religioso tenía 39 años y ostentaba el cargo de vicerrector del Santuario de Montserrat. También era uno de los coordinadores de Montserrat Jove, una iniciativa que organizaba dos encuentros anuales para 40 menores de acudían al monasterio a rezar asiduamente.

La relación, según el escrito de la Fiscalía, fue creciendo. El joven acabó considerando al hermano Gabriel un “referente personal” y un “guía espiritual” (fue su padrino en la confirmación), hasta el punto de que le explicaba todos sus problemas y le pedía consejo ante cualquier situación.

En mayo del 2019 el monje invitó al joven a gastos pagados a la Abadía para pasar el fin de semana. El viernes 3 de mayo, tras cenar juntos, el monje y la víctima subieron a la celda. El chico, siempre según el relato de la Fiscalía, había llevado una botella de cava como muestra de agradecimiento por la invitación. Pese a que el chico insistió en que apenas había probado el alcohol, el hermano Gabriel le invitó a beber juntos y emborracharse. Era bueno, dijo, que su primera borrachera fuera “en un entorno de confianza” para saber, después, a qué se enfrentaba.

Según el escrito de la Fiscalía, el monje le hizo tocamientos “por encima y por debajo de la ropa” que fueron consentidos por el chico; después, ambos se hicieron una felación. A la noche siguiente, se repitió la secuencia: cena, subida a la celda, cava y sexo. La Fiscalía cree que el monje “se aprovechó conscientemente” de la víctima, que, aunque estaba “incómoda” con la situación, “no lo supo verbalizar” por su estado de semiembriaguez, por la diferencia de edad y por el ascendente que tenía el monje sobre él.

El juzgado de Manresa, que lleva el caso, citó a declarar en otoño de 2021 al monje quien admitió el contacto sexual con el menor pero insistió en que los dos encuentros que compartieron fueron en todo momento consentido.

Los hechos provocaron un trastorno de estrés postraumático en el menor, que tuvo que someterse a psicoterapia por lo que piden para el religiosa hasta cinco años de cárcel.

Ayuda a Infovaticana a seguir informando