Joseph Strickland, obispo de Tyler, Texas, ha revolucionado a los católicos estadounidenses en Twitter con un polémico mensaje desde su cuenta: “Creo que Francisco es el Papa, pero es hora de que diga que rechazo su programa de socavar el Depósito de la fe. Sigue a Jesús».
Strickland no es nuevo en estas páginas. Ha sido estos últimos años el ‘Pepito Grillo’ de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos, firmando el año pasado una carta abierta criticando la carta apostólica Desiderio Desideravi, pidiendo al Papa que detenga el sínodo alemán, que condene explícitamente al presidente Biden por su postura anticatólica, alertando de los riesgos del sínodo de la sinodalidad…
Inmediatamente antes de ese tuit, Strickland escribió desde su cuenta: “En estos tiempos difíciles con tantas voces en conflicto, oremos y siempre volvamos a Jesús. Recordemos que estamos luchando contra los poderes y principados de satanás, no solo contra la corrupción humana”.
Posteriormente al tuit de la discordia, el de Tyler anunció: “En estos tiempos difíciles con tanta confusión incluso desde Roma, es fundamental permanecer EN LA IGLESIA. Los movimientos cismáticos como la FSSPX o los sedevacantistas, por muy bien intencionados que sean, son una lesión para el cuerpo de Cristo. Debemos luchar por la unidad total, no solo por aspectos del catolicismo”.
Tras ese tuit, volvió a publicar otro para matizar sus palabras sobre la FSSPX y retractarse: «Una corrección… como ha declarado el obispo Schneider, la FSSPX no está en cisma. La FSSPX continúa manteniendo la Tradición para la Iglesia Universal. La Eucaristía de la FSSPX es considerada válida por la Iglesia Católica. Debemos volvernos hacia el rostro eucarístico de Jesús».
Naturalmente, los entusiastas de la renovación ya están pidiendo públicamente su cabeza, los mismos que se han negado a otro tanto con el episcopado alemán en abierta rebeldía ante instrucciones explícitas de Roma.