En su intervención en la segunda jornada de los Estados Generales de la Natalidad, el Papa ha pedido que recemos por él, añadiendo que algunos en la propia Santa Sede rezan “en contra”.
Durante el discurso del pontífice en los Estados Generales de Natalidad, en Roma, el Papa se permitió contar una anécdota significativa.
«Rezad por mí, a favor y no en contra», dijo el Papa Francisco al final de su discurso con una broma que suele hacer al final de sus alocuciones. Pero esta vez añade los detalles:
«Una vez estaba terminando una audiencia y a veinte metros de distancia, donde estaba la valla, había una señora, una viejecita, de ojos hermosos. Ella me dice ‘ven, ven’. ..’, simpático.
Me acerqué: ‘¿Cómo te llamas?’, ‘¿Y cuántos años tienes?’, ‘¿Qué haces, qué comes para estar tan fuerte?’ Y me dio una receta de raviolis», cuenta Bergoglio.
«Y entonces dije: ‘Pero señora, por favor ore por mí’. ‘Lo hago todos los días’. Y en broma dije ‘pero ore por, no en contra’.
Y la anciana sonriendo me dijo: ‘Cuidado Padre, allí dentro están rezando contra él…’”, dice el Papa Francisco. «¡Listo, eh! Un poco anticlerical…», bromeó el Pontífice. «¡A favor, no en contra!», reiteró, pidiendo oraciones al público.