
Leo en la nota de prensa que me envía la Conferencia Episcopal:
El número de declaraciones a favor de la Iglesia ha sido 7.112.844. Teniendo en cuenta las declaraciones conjuntas, más de 8,5 millones de contribuyentes destinan a la Iglesia el 0,7% de sus impuestos. Esto supone que el porcentaje de asignación llega al 33,54%, descendiendo en 1,39% en relación al ejercicio anterior.
El año anterior, el porcentaje de declaraciones en favor de la Conferencia Episcopal fue del 34,93%. Este año es del 33,54%, lo que supone, para quien calcula porcentajes en la Conferencia, un descenso del 1,39%, esto es, 34,93-33,54.
El descenso es del 3,98%, que es el resultado de dividir esa diferencia de 1,39 puntos entre el 34,93%.
Y yo me pregunto,
- ¿por qué los que comunican se equivocan siempre en su propio favor?
- ¿Si bajara del 2% al 1%, nos dirían que ha bajado un 1% o ya entienden que entonces el descenso es de un 50%?
- ¿Alguien va a pararse a analizar que 2 de cada 3 declarantes rechazan que se financie a la Conferencia Episcopal, a pesar de que marcar esa X no les supondria pagar más impuestos?
- ¿Se equivoca calculando un simple porcentaje el vicesecretario de asuntos económicos de la CEE, Giménez Barriocanal, que es profesor de economía en la Universidad Autónoma?
