Ciertamente el bajo número de vocaciones sacerdotales en España supone inventar formas de atención pastoral que cada diócesis busca su propia solución. En zonas donde doce parroquias, por ejemplo, suman menos de quinientos vecinos, ya no existen doce curas para estar en esas localidades. Tampoco abundan curas capaces de pasarse todo el fin de semana montados en un coche llegando a los doce núcleos pastorales. Los sacerdotes vamos subiendo en edad, jubilándose o estando impedidos por una salud quebradiza. En la diócesis catalana de Solsona, existe el llamado Foro Ondara quienes han propuesto lo siguiente: «La agrupación de sacerdotes del Obispado de Solsona constituida bajo el Foro Ondara han elaborado una propuesta para poder hacer misa los domingos en todas las parroquias , incluso las más pequeñas . Se trata de utilizar las nuevas tecnologías para celebrar las misas dominicales a través de videoconferencia. La propuesta consistiría en instalar pantallas en las iglesias más pequeñas para que pudieran seguir en directo la liturgia que se haría en un municipio más grande. Un 75% de las parroquias del Obispado de Solsona no llegan a los 300 habitantes y muchas ni al centenar, lo que hace que un cura tenga que encargarse de hasta 10 parroquias. Desde el Foro Ondara se señala que «La iglesia debe estar al servicio de los pobres y también de la pobreza demográfica y, por ello, hay que buscar soluciones imaginativas» Los curas de Solsona creen que las nuevas tecnologías pueden facilitar la vida de la iglesia y apuntan otras propuestas como usar la mensajería instantánea de los teléfonos móviles o redes sociales como el Facebook para informar a los feligreses de si hay algún cambio en el horario de la misa o para convocar reuniones.» La noticia puede levantar alguna sonrisa, en los amigos lectores, es natural. Pero mirando el fondo del problema pastoral de esas zonas esta solución de participar en la misa por videoconferencia puede ser una solución viable. Cuando comenzaron a radiarse o televisarse las misas para enfermos o impedidos nadie puso el grito en el cielo. Si en algunos lugares se hacen mediante viodeoconferencia, pues sinceramente no veo ningún problema. Compartamos las opiniones de cada cual. El foro está abierto. Muchas gracias. Tomás de la Torre Lendínez
