por El Olivo | 09 enero, 2014
Ciertamente el bajo número de vocaciones sacerdotales en España supone inventar formas de atención pastoral que cada diócesis busca su propia solución. En zonas donde doce parroquias, por ejemplo, suman menos de quinientos vecinos, ya no existen doce curas para estar en esas localidades. Tampoco abundan curas capaces de pasarse todo el fin de semana montados en un coche llegando a los doce núcleos pastorales. Los sacerdotes vamos subiendo en edad, jubilándose o estando impedidos por una salud quebradiza. En la diócesis catalana de Solsona, existe el llamado Foro Ondara quienes han propuesto lo siguiente: «La agrupación de sacerdotes del Obispado de Solsona constituida bajo el Foro Ondara han elaborado una propuesta para poder hacer misa los domingos en todas las parroquias , incluso las más pequeñas . Se trata de utilizar las nuevas tecnologías para celebrar las misas dominicales a través de videoconferencia. La propuesta consistiría en instalar pantallas en las iglesias más pequeñas para que pudieran seguir en directo la liturgia que se haría en un municipio más grande. Un 75% de las parroquias del Obispado de Solsona no llegan a los 300 habitantes y muchas ni al centenar, lo que hace que un cura tenga que encargarse de hasta 10 parroquias. Desde el Foro Ondara se señala que «La iglesia debe estar al servicio de los pobres y también de la pobreza demográfica y, por ello, hay que buscar soluciones imaginativas» Los curas de Solsona creen que las nuevas tecnologías pueden facilitar la vida de la iglesia y apuntan otras propuestas como usar la mensajería instantánea de los teléfonos móviles o redes sociales como el Facebook para informar a los feligreses de si hay algún cambio en el horario de la misa o para convocar reuniones.» La noticia puede levantar alguna sonrisa, en los amigos lectores, es natural. Pero mirando el fondo del problema pastoral de esas zonas esta solución de participar en la misa por videoconferencia puede ser una solución viable. Cuando comenzaron a radiarse o televisarse las misas para enfermos o impedidos nadie puso el grito en el cielo. Si en algunos lugares se hacen mediante viodeoconferencia, pues sinceramente no veo ningún problema. Compartamos las opiniones de cada cual. El foro está abierto. Muchas gracias. Tomás de la Torre Lendínez
El día menos pensado ponen unas máquinas expendedoras de sacramentos. Y mire usted sr. Tomás que lo digo con tristeza. Miedo no tengo, porque de la Iglesia ya se encarga el Espiritu, que no nosotros. A lo mejor ha llegado la hora de revisión para el sacerdocio.
En términos litúrgicos no existe ninguna dificultad en admitir la celebración de misas mediante videoconferencia. En el plano espiritual tampoco para personas enfermas e impedidas. Llevado todo al suelo práctico sí existe dificultades reales de tipo técnico. Esta es al menos mi opinión.
Pues yo discrepo. Creo que las diocesis deben volver al modo de actuar de los paises de mision, proponiendo que cada aldea sea visitada por el sacerdote una vez al mes o dos. Nunca la presencia del cura puede ocuparla un ordenador o una pantallla.
Estoy de acuerdo con , usted don Tomas, la falta de vocaciones impone maneras nuevas de presencia pastoral. La tecnica no esta reñida con la practica de la fe.
Don Tomás,
puede ser una opción viable sin duda alguna (aunque yo personalmente le pondría algún que otro pero).
También hay que tener en cuenta que en la mayoría de esas parroquias la edad media de los feligreses es muy alta y dudo que muchos de ellos sepan utilizar las nuevas tecnologías: whatsap, facebook, ordenadores,….
La Misa es el acto central de participación cristiana. La Eucaristía es insustituible pero tal como señala usted,don Tomás,la Misa por Tv abrió una puerta a enfermos e incapacitados.
Es una posibilidad a no despreciar,por supuesto.
Un abrazo.
Recientemente leía el comentario de un lector, quejándose que la liturgia de la última misa navideña trasmitida desde le Vaticano, le resultaba sosa.
Realmente pienso que ninguna misa papal transmitida por TV (De cualquier Papa) Supera a una misa presencial, celebrada por el cura de barrio.
La gran mayoría, se niega al beneficio que da el invertir una hora semanal de sus vidas, en asistir a misa dominical (¡Imprescindible!), en lugar de perder la mayor parte de su tiempo en problemas, que en su mayoría son causados por seguir la moda de turno -Absolutamente prescindible-
¿Que hay que hacer, para que que la gente, reflexione, y deje de causar, y causarse daño, por seguir a pié juntillas lo que dicta la milicia del siglo?
¿Cual es la clase de evento necesario para que las personas de bien se sacudan la modorra, y reaccionen frente a los males que acometen, y parecen pasar desapercibidos por la mayoría?
Se vienen tiempos difíciles.