La consigna parece ser: cualquier rito para la Misa, siempre que no sea el que se ha utilizado durante siglos. Tenemos desde hace décadas un rito africano, desde hace poco otro maya, y ahora en Australia acaban de aprobar la Misa de la Tierra del Espíritu Santo, para aborígenes.
Los obispos australianos se han inventado un rito para la Misa con elementos de la cultura de los aborígenes australianos. La Asamblea General de la Conferencia Episcopal Australiana ya ha aprobado las directrices para la celebración de la Misa «Tierra del Espíritu Santo» (Missa Terra Spiritus Sancti) en la diócesis de Broome. En Australia Occidental se celebran misas con elementos tradicionales y en lenguas indígenas desde hace más de medio siglo, y ahora esta celebración debería ahora ser reconocida oficialmente de forma permanente, lo que requiere la aprobación del dicasterio litúrgico .
La Misa fue aprobada por primera vez «ad experimentum» en 1973 por el entonces obispo de Broome. Se celebra en varios idiomas locales y es originaria de Bidyadanga en la región de Kimberley, de ahí que también se la conozca como Missa Bidyadanga y Missa Kimberley.
El Consejo Nacional Católico Aborigen e Isleño del Estrecho de Torres de Australia describe la liturgia como una «Misa distintiva que fusiona maravillosamente la tradición católica con la cultura aborigen, creando una celebración única de la fe que la diócesis ha disfrutado desde entonces durante más de cinco décadas».
La Misa, afirman, no es sólo una práctica litúrgica, sino “un testimonio de la conexión profundamente arraigada entre nuestra fe y la rica cultura de los pueblos indígenas”. Es un puente que conecta las creencias espirituales con la antigua sabiduría de los guardianes originales de la tierra, dice una carta del consejo a la conferencia episcopal. «Es una expresión concreta del compromiso de la Iglesia de reconocer y celebrar la dimensión espiritual y cultural de la vida de los pueblos indígenas, promoviendo así un ambiente de inclusión y respeto», continuó el consejo. En fin, es cualquier cosa menos el sacrificio incruento de Nuestro Señor Jesucristo.
«Debemos caminar junto con los pueblos indígenas. Estoy muy contento de que la Missa Terrae Spiritus Sancti haya sido reconocida oficialmente por los obispos de Australia después de un período de uso tan largo», dijo el administrador apostólico de Broome, Michael Morrissey. «Sabemos que hay muchas culturas aborígenes en Australia y oramos para que todas sean guiadas por el Espíritu Santo para desarrollar la mejor manera de celebrar la Eucaristía de la manera más apropiada con su pueblo y dentro de celebrar la vida de la Iglesia. «