Empezamos el mes de mayo, mes mariano por excelencia, un buen manto protector en estos momentos. Estos días son especialmente intensos y no es fácil moverse entre certezas y rumores. Hoy sabemos que en el marco de la sexta congregación, la del martes, se vivió una larga diatriba sobre Becciu. Los cardenales no acogieron positivamente sus declaraciones a los medios: «Conceder entrevistas en una situación tan delicada no es nada prudente. En la situación en la que se encuentra, no por nuestra culpa, sino por lo que ha decidido hacer el Papa, es increíble que tenga tantas exigencias». El sentimiento común del Colegio es claro: Francisco ha cometido un acto inédito, poco claro y también gravísimo, pero es el acto del Papa sobre el que es difícil poder decir algo.
También se reflexionará sobre este acto que corre el riesgo de ser muy político, pensemos si lo hubieran cometido otros papas y no el Papa Francisco, quien contaba con el favor de la prensa. Hemos regresado a la época en que el Pontífice actuaba políticamente y por intereses muy distintos a los de la Iglesia. Si esta decisión se aprueba sin reflexionar, cualquier papa podrá excluir a todos los cardenales creados por sus predecesores en un futuro cónclave, por ejemplo. Como se ha señalado, de hecho, el hecho de que pudiera participar en los Consistorios con el hábito de coro y ahora no pueda participar en el cónclave significa privarle del derecho/deber que permite la elección de un papa, es decir, una elección con consecuencias políticas. También significa decir: Yo divido los derechos y deberes, ustedes tienen algunos, pero no otros. Esto es lo que Francisco ha hecho en los últimos años, y algunos se han atrevido a decir que el papa es libre de hacer lo que quiera. No es así, el Pontífice está sujeto a la ley divina y al Evangelio: «No bromeemos, si no, corremos el riesgo de perder gravemente la credibilidad». Si esta decisión la hubiera tomado un conservador en detrimento de un progresista, habría titulares descontrolados que afirmarían que «el Papa político elimina a sus oponentes», pero la historia es la que es y la conocemos. Al final de una acalorada discusión, en la que también se revelaron algunos documentos que habían permanecido secretos hasta hoy, el cardenal Becciu optó por emitir un comunicado en el que anunciaba su retirada, tal como le habían aconsejado.
Ayer miércoles ha tenido lugar la séptima Congregación General, abierta con un momento de oración. Estuvieron presentes 181 participantes, incluidos 124 cardenales electores. En la primera parte de la mañana, los trabajos se centraron especialmente en la situación económica y financiera de la Santa Sede. El Cardenal Reinhard Marx, Coordinador del Consejo para la Economía, presentó un panorama actualizado de los desafíos existentes y de los temas críticos, ofreciendo propuestas orientadas a la sostenibilidad y reiterando la importancia de que las estructuras económicas sigan apoyando de manera estable la misión del Papado.
A continuación, el cardenal Kevin Farrell, presidente del Comité de Inversiones, habló sobre el papel y las actividades del Comité. El cardenal Christoph Schönborn, presidente de la Comisión Cardenalicia para la Supervisión del Instituto para las Obras de Religión (IOR), ofreció una reflexión sobre la situación actual del Instituto. El Cardenal Fernando Vérgez Alzaga, LC, Presidente Emérito de la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano, explicó a continuación algunos detalles relativos a la Gobernación, haciendo referencia también a algunas obras de reestructuración de edificios estatales y al apoyo prestado a la Sede Apostólica. Konrad Krajewski, Limosnero Apostólico, que ilustró el compromiso del Dicasterio con el Servicio de la Caridad.
La segunda parte del encuentro se leyó el comunicado al Pueblo de Dios, publicado por la mañana. A continuación se produjeron 14 intervenciones de miembros de la asamblea. Entre los temas tratados, se destacó una reflexión sobre la eclesiología del Pueblo de Dios, con especial referencia al sufrimiento causado por la polarización al interior de la Iglesia y las divisiones en la sociedad. El valor de la sinodalidad, vivida en estrecha conexión con la colegialidad episcopal, como expresión de corresponsabilidad diferenciada, ha sido recordado varias veces. La cuestión de las vocaciones sacerdotales y religiosas ha sido abordada en diversas ocasiones, considerada en relación con la renovación espiritual y pastoral de la Iglesia. Varias intervenciones hicieron referencia explícita a los documentos del Concilio Vaticano II, en particular a las Constituciones Apostólicas Lumen Gentium y Gaudium et Spes.
La Oficina de Prensa de la Santa Sede ha publicado el siguiente Comunicado: «La Congregación para los Cardenales desea dar a conocer las dos siguientes cuestiones de procedimiento sobre las que ha tenido oportunidad de reflexionar y debatir en estos días: 1) en cuanto a los Cardenales electores, la Congregación ha constatado que Su Santidad el Papa Francisco, al crear un número de Cardenales superior a 120, como establece el n. 33 de la Constitución Apostólica Universi Dominici Gregis de San Juan Pablo II, del 22 de febrero de 1996, en ejercicio de su suprema potestad, ha dispensado de esta disposición legislativa, por lo que los Cardenales que sobrepasan el número máximo han adquirido, a tenor del n. 36 de la misma Constitución Apostólica, el derecho a elegir al Romano Pontífice, desde el momento de su creación y publicación. 2) Respecto a Su Eminencia el Cardenal Giovanni Angelo Becciu, constata que él, teniendo en el corazón el bien de la Iglesia, así como para contribuir a la comunión y serenidad del Cónclave, ha comunicado su decisión de no participar en el mismo. Al respecto, la Congregación de Cardenales expresa su aprecio por el gesto realizado y desea que los órganos de justicia competentes puedan esclarecer definitivamente los hechos”.
La exclusión de Becciu ha agitado las aguas mucho más allá del ámbito estrictamente canónico, porque ha terminado por oscurecer el sentido mismo de las Congregaciones: preparar espiritualmente la elección del nuevo Papa, no hacer ajustes de cuentas internos. Otra pregunta que sigue en el aire: ¿es falso el documento del Papa Francisco contra el cardenal Becciu? ¿Y si alguien hubiera aprovechado su enfermedad del Papa Francisco para obligarle a firmar la carta?» “Es seguro que una de las tareas del próximo Papa será revisar las decisiones atribuidas a Bergoglio en el caso Becciu, para evaluar su autenticidad y corrección jurídica”. Se debaten los dos documentos que supuestamente excluían a Becciu del Cónclave: uno fechado en junio de 2023, escrito antes de una delicada operación quirúrgica realizada por el Papa, y un segundo “firmado con f temblorosa, es un texto largo, muy enrevesado, y ninguno de los cardenales de la Curia sabe cuándo ni por quién fue escrito, ni si corresponde verdaderamente a la voluntad de un Pontífice bajo medicación y que, en ese momento, luchaba por mantenerse con vida”. “Hay ahora numerosos errores legales del camarlengo Kevin Farrell quien, según él mismo confiesa, ignora incluso la existencia del derecho canónico”.
El siempre atento Luigi Bisignani opina que el caso Becciu provoca la confusión de los cardenales y que «Es un ajuste de cuentas». «Entre los jóvenes cardenales extranjeros llegados a Roma para el Cónclave, más de uno manifestó su preocupación, hablando en voz baja en las trattorias de Borgo, con el temor de ser escuchados. No tanto por la inminencia de la votación, sino por el clima que se respira, envenenado por las tensiones que siguieron al caso Becciu. “Han convertido el Cónclave en un ajuste de cuentas”. Becciu era percibido como un “gran anciano” de la Curia: sin derecho a voto, pero todavía capaz de moverse discretamente entre sus colegas, haciendo valer las relaciones construidas durante muchos años.
No afecta el número de electores pero está en los medios. Cipriani, miembro del Opus Dei y ex arzobispo de Lima, fue sancionado por el Papa Francisco en 2019 por acusaciones que el Santo Padre consideró creíbles de abusos sexuales a menores que se remontan a principios de la década de 1980. El cardenal está participando en reuniones y encuentros previos al Cónclave. Bruni admitió que «no se conocen los detalles de las sanciones» y que por el momento «no hay más información que proporcionar». El pasado 26 de enero el Vaticano confirmó: «Existen y siguen vigentes» recordando que «tras la aceptación de su renuncia como arzobispo de Lima», al cardenal «se le impuso un precepto penal con algunas medidas disciplinarias relativas a su actividad pública, lugar de residencia y el uso de insignias». La medida en cuestión fue «firmada y aceptada» por Cipriani.
El cardenal Sakò cree que el Cónclave podría concluir rápidamente, con la elección del nuevo Papa en un par de días, quizás el día 8 o 9. La predicción no es sorprendente, considerando la tendencia de todos los últimos cónclaves. El análisis del último siglo sugiere que las elecciones papales tienden a resolverse muy rápidamente.
No son noticia las misas en San Pedro, hay pocas noticias sobre las celebraciones de estos días, las congregaciones absorben todo el interés. El martes 29 de abril de 2025, a las 17.00 horas, en la Basílica Vaticana, el cardenal Mauro Gambetti presidió la Santa Misa del cuarto día de los novendiales, dedicada en particular a los miembros de los capítulos de las basílicas papales , se desarrolló en el tenso clima de los últimos días. “En particular, hoy están representadas aquí las cuatro basílicas papales de Roma que tanto amó el Papa Francisco ”, es lo que hay que decir, pero si algo hizo el Papa Francisco con los Capítulos de las Basílicas fue destruirlos. Los canónigos de San Pedro, y los demás no son excepción, acusan al Papa Francisco de que necesitaba era meter las narices en los bienes económicos del Capítulo, y nada más, era lo único que le importaba. El legado del Papa Francisco se muestra aquí en toda su coherencia paradójica: desmanteló lo que decía amar, reformó destruyendo y luego reconstruyendo las mismas estructuras que vació con el pretexto de renovar. En la Basílica de San Pedro vemos estos días como las muchas sillas vacías hablan más que las palabras, hasta la nece central está a medias, el enorme crucero y el altar de la cátedra totalmente vacíos. Son clamorosas las ausencias de muchos cardenales que tienen que recuperar doce años de Consistorios negados. El tan citado pueblo de Dios ha pasado página, ya lo había hecho porqué llevamos años de clamorosos vacíos en el Vaticano. La Basílica es un elocuente reflejo de donde estamos: el Papa Francisco es pasado, los cardenales a lo suyo y el pueblo de Dios ausente.
Es una pregunta que flota en el aire: ¿Qué pasó con la mafia de San Galo? Siguen vivos el cardenal Walter Kasper (92 años), monseñor Joseph Doré, arzobispo emérito de Estrasburgo (88 años) y el arzobispo emérito de Rotterdam Adrianus Herman van Luyn (89 años). Kasper, que no entrará en el cónclave por tener más de ochenta años, ha hecho oír su previsible voz en los últimos días: «El pueblo de Dios -dijo- ya ha votado en los funerales y ha pedido la continuidad con Francisco». Los miembros del grupo, aparte de los pocos supervivientes mencionados, están muertos, pero el “espíritu” de San Galo está vivo. “Iglesia en camino”, sinodalidad y revisión de la posición de la Iglesia sobre la homosexualidad, el diaconado femenino, la descentralización doctrinal, la comunión para los divorciados vueltos a casar: harina del saco de San Galo, trasladada de forma más o menos acentuada al pontificado del Papa Francisco.
Hay muchos artículos interesantes estos días, terminamos señalando dos de ellos. Larry Chapp en Catholic World Report : «Con la llegada de los medios modernos, la presencia pública del papado ha crecido exponencialmente. Esto trajo consigo ventajas y desventajas. Por una parte, aumentó la capacidad del papado de difundir instantáneamente sus enseñanzas y la imagen global de cada viaje y gesto papal en todo el mundo. Por otra parte, paradójicamente, dado que es propio de la naturaleza de los nuevos medios de comunicación reducir todo lo que tocan a noticias de fácil digestión y “noticias del día”, las diversas declaraciones del Vaticano se han reducido a lo que los medios consideran “vendible”. «En mi opinión, el Papa Francisco no era un hereje como afirman sus más ardientes críticos. Pero con el debido respeto hacia él y con sincero amor filial hacia su alma, que pido al Señor, su estrategia pastoral fue una receta para el suicidio institucional, y esto es algo quizás peor que la herejía».
John en Crisis Magazine: «A medida que transcurrían los años de su pontificado fuimos entendiendo que la Iglesia ha caído en un caos sin precedentes». «Durante el pontificado del Papa Francisco no ha habido orden y ciertamente no ha habido tranquilidad. Los trastornos se sucedieron uno tras otro; los shocks han dado paso a otros shocks; la ambigüedad se agravó con la ambigüedad».
Sub tuum praesidium confugimus
sancta Dei Genitrix;
nostras deprecationes
ne despicias in necessitatibus;
sed a periculis cunctis
libera nos semper,
Virgo gloriosa et benedicta.
«…no hizo allí muchos milagros, a causa de su falta de fe».
Buena lectura.
Estimado Specola,
No ceja en sus costumbres. Debe referenciar alguna vez sus fuentes.
Citar entre comillas pues está muy bien pero mejor si indica dónde se ha dicho para que sus lectores podamos fiarnos de usted y confrontar y construir nuestras opiniones al fin y al cabo sus columnas son de opinión. Es fácil pensar que sin fuentes fiables usted no opina sobre una verdad sino fórmula hipotesis sobre bases ideológicas y así se acerca peligrosamente a la manipulación de sus lectores que no construir opiniones. Para eso ya tengo los periódicos, sus editoriales y los políticos. Sea más claro.
Me encantan sus columnas. Se debate la fe sobre una base de ideología política. Y me tendría que convencer de que es al revés… Sí, en ese caso no le haría falta entrecomillar… 😉
Yo personalmente me conformaré con lo que el Espíritu Santo envié a la Iglesia.
Felicidades por el pseudónimo. Pero no permita que los que le leamos pensemos que estaría mejor así: «Specola di parte»
Un saludo.
Después de haber lanzado la bomba atómica de Amoris laetitia contra la Fé y moral católica como demostró Seifert (2013-2017), Francisco procedió a lanzar otra bomba atómica contra la liturgia católica mediante el Sínodo de la Amazonia (2017-2020), justo antes del evento disruptivo de la pandemia del covid de enero-febrero de 2020.
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QUERIDA AMAZONIA
Sobre la inculturación litúrgica en regiones andinas, especialmente tras el Sínodo Amazónico de 2019, que propuso un posible «rito amazónico» (Querida Amazonia, párrafos 79-84).
Preparación del Sínodo de la Amazonía:
Anuncio: El Papa Francisco anunció el Sínodo Especial para la Región Panamazónica el 15 de octubre de 2017, durante el Ángelus, con el objetivo de abordar los desafíos pastorales, ecológicos y culturales de la Amazonía.
Fase preparatoria:
2018: La Red Eclesial Panamazónica (REPAM) coordinó consultas en las comunidades amazónicas, involucrando a indígenas, laicos, religiosos y obispos. Se realizaron foros en nueve países (Brasil, Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia, Venezuela, Guyana, Surinam, Guyana Francesa).
Junio de 2019: Publicación del Instrumentum Laboris (documento de trabajo), que identificó temas clave: inculturación, ecología integral, escasez de sacerdotes, y roles de mujeres y laicos.
Evento inicial: El 4 de octubre de 2019, una ceremonia en los Jardines del Vaticano marcó el inicio oficial, con participación de indígenas y el Papa Francisco, aunque generó controversia por las estatuillas de la Pachamama.
Celebración del Sínodo:
Datación sinodal: El Sínodo se llevó a cabo del 6 al 27 de octubre de 2019 en el Aula del Sínodo, Vaticano.
Participantes: Incluyó 185 padres sinodales (obispos, sacerdotes), representantes indígenas, expertos, auditores laicos (hombres y mujeres) y delegados ecuménicos.
Documento final: Publicado el 26 de octubre de 2019, propuso medidas como la ordenación de viri probati (hombres casados, n. 111), el diaconado femenino (n. 103), y un posible rito amazónico (n. 116-119).
Finalización con Querida Amazonia:
La Exhortación Apostólica Postsinodal Querida Amazonia fue publicada el 12 de febrero de 2020, y el Papa Francisco aborda la posibilidad de incorporar elementos de la espiritualidad indígena en las celebraciones litúrgicas, promoviendo una inculturación de la liturgia.
Los puntos específicos donde se menciona esta idea están en los párrafos 79-84, particularmente en los párrafos 81-82, que tratan sobre la inculturación litúrgica en la Amazonía.
Citas relevantes:
Párrafo 79:
“Es posible recoger de alguna manera un SÍMBOLO INDÍGENA sin calificarlo necesariamente de idolatría. Un MITO cargado de sentido espiritual puede ser aprovechado, y no siempre considerado un error pagano. Algunas fiestas religiosas contienen un significado sagrado y son espacios de reencuentro y de fraternidad, aunque se requiera un lento proceso de purificación o de maduración.”
Francisco permite que los símbolos y fiestas indígenas con valor espiritual pueden integrarse en la práctica cristiana, siempre que se «purifiquen o adapten adecuadamente».
Párrafo 81:
“La inculturación eleva y plenifica. Ciertamente, en la piedad popular se podrá recoger, como decía Juan Pablo II, ‘el alma de los pueblos, sus inclinaciones más profundas, que se expresan en la religiosidad’… Es posible asumir en el cristianismo FORMAS Y MODOS PROPIOS DE LOS PUEBLOS AMAZÓNICOS, sin que esto suponga una alienación, sino un enriquecimiento.”
Las expresiones religiosas de los pueblos amazónico SÍ enriquecen la liturgia cristiana.
Párrafo 82:
“Esto nos permite recoger en la liturgia muchos elementos propios de la experiencia de los indígenas en su íntimo contacto con la NATURALEZA y estimular expresiones autóctonas en CANTOS, DANZAS, RITOS, GESTOS Y SÍMBOLOS. Ya el Concilio Vaticano II había pedido este esfuerzo de INCULTURACIÓN de la liturgia en los pueblos indígenas…”
Francisco explícitamente aboga por incluir en la liturgia elementos como cantos, danzas, ritos, gestos y símbolos indígenas, reconociendo su conexión con la naturaleza y lamentando el lento progreso en la inculturación litúrgica desde el Concilio Vaticano II.
Párrafo 83:
Francisco menciona la importancia del DESCANSO CONTEMPLATIVO Y LA ESPIRITUALIDAD de los PUEBLOS ORIGINARIOS, sugiriendo que las celebraciones dominicales deberían reflejar esta experiencia para conectar con la Palabra y la Eucaristía.
Párrafo 84:
Los sacramentos deben ser accesibles y reflejar la cercanía de Dios, lo que implica adaptar las celebraciones a las REALIDADES CULTURALES DE LOS PUEBLOS AMAZÓNICOS.
Resumen:
El Papa Francisco, en Querida Amazonia, especialmente en los párrafos 79 y 82, promueve la incorporación de elementos de la espiritualidad indígena (como símbolos, cantos, danzas y ritos). Este enfoque busca una Iglesia con «rostro amazónico» que integre la riqueza cultural y espiritual de los pueblos originarios.
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ESCÁNDALO DE LA DIOSA PACHAMAMA DURANTE EL SÍNODO DE LA AMAZONIA
El Sínodo de la Amazonía (6-27 de octubre de 2019) generó un escándalo significativo relacionado con la supuesta veneración de la Pachamama, una deidad andina asociada a la Madre Tierra, en tres eventos específicos.
I. Originó tres situaciones de escándalo y confusión de idolatría
1. Ceremonia en los Jardines Vaticanos (4 de octubre de 2019)
El Papa Francisco presidió una ceremonia en los Jardines del Vaticano para inaugurar el Sínodo de la Amazonía, organizada por la Red Eclesial Panamazónica (REPAM) y los Frailes Menores Franciscanos.
Incluyó danzas indígenas, ofrendas y un ritual con estatuillas de madera de una mujer embarazada desnuda, identificadas por algunos como la Pachamama.
Francisco observó desde fuera del círculo principal, sin participar en las danzas ni gestos rituales.
Participantes: Indígenas amazónicos, representantes de REPAM, clérigos, laicos y obispos sinodales.
Presentada como una celebración del Día de San Francisco y un acto de inculturación, alineado con Sacrosanctum Concilium (n. 37-40).
Exposición de estatuillas en iglesias (octubre de 2019)
2. Estatuillas de la diosa Pachamama
Las estatuillas de la mujer embarazada fueron expuestas en varias iglesias de Roma, notablemente en Santa María en Traspontina, cerca del Vaticano, como parte de las actividades sinodales.
Fueron colocadas en altares laterales junto a símbolos amazónicos (redes, canoas), generando confusión sobre su propósito, ya que algunos las asociaron con la Pachamama y otros con «Nuestra Señora de la Amazonía» o símbolos de vida y fertilidad.
El Vaticano no aclaró inicialmente su significado, lo que intensificó las críticas de sectores conservadores, quienes las percibieron como ídolos paganos en espacios sagrados.
3. Robo y recuperación de las estatuillas (21-25 de octubre de 2019)
El 21 de octubre, el activista católico austriaco Alexander Tschugguel, junto a un cómplice, robó varias estatuillas de Santa María en Traspontina y las arrojó al río Tíber, grabando el acto y publicándolo en redes sociales. Alegó que era un gesto contra la «idolatría».
Las estatuillas fueron recuperadas por la policía italiana el 25 de octubre. El Papa Francisco, como obispo de Roma, pidió disculpas a quienes se sintieron ofendidos por el robo, afirmando que las figuras no tenían «intenciones idólatras».
El robo fue aplaudido por tradicionalistas (e.g., LifeSiteNews) como defensa de la fe, pero criticado por el Vaticano y sectores progresistas como un acto de intolerancia cultural.
II. Razones del escándalo
1. Idolatría y paganismo: Las estatuillas, identificadas como Pachamama por algunos participantes y el propio Francisco (25 de octubre), fueron vistas por críticos como ídolos paganos, incompatibles con el culto católico (Ex 20,3-5). Su presencia en iglesias y en un ritual vaticano fue considerada un acto de sincretismo, especialmente por sectores tradicionalistas (Mons. Athanasius Schneider, LifeSiteNews).
2. Falta de claridad teológica: La ambigüedad del Vaticano sobre el significado de las estatuillas (¿símbolos de vida, Virgen María o Pachamama?) y la ausencia de catequesis previa alimentaron acusaciones de profanación. La prensa (Sandro Magister) señaló evasivas en las respuestas oficiales, aumentando la confusión.
3. Tensión entre inculturación y ortodoxia: Mientras defensores veían el evento como un ejercicio legítimo de inculturación (Querida Amazonia, párrafos 79-84), críticos argumentaron que cruzó límites doctrinales al integrar elementos percibidos como no cristianos, exacerbando divisiones entre progresistas y conservadores.
4. El escándalo reforzó las críticas al pontificado de Francisco, marcando un punto álgido en el debate sobre inculturación versus sincretismo, aún relevante en discusiones sobre ritos amazónicos (Catholic Online, 2024).
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RITO INCA O PACHAMAMA
Propuestas de elementos incas en la liturgia católica
A. Dentro de la Misa
En los Andes (Perú, Bolivia), la inculturación busca integrar la cosmovisión inca, especialmente en comunidades quechua y aimara, siguiendo el espíritu del Sínodo Amazónico (2019).
Propuestas:
Incienso de hierbas andinas: Usar hierbas locales (muña o palo santo) en lugar de incienso tradicional durante la incensación, simbolizando la conexión con la Pachamama cristianizada como creación divina.
Textiles andinos: Incorporar casullas o manteles de altar con diseños incaicos (chakanas o motivos solares) en Misas en Cusco y Puno.
Música andina: Uso de quenas, zampoñas y charangos para acompañar himnos litúrgicos, propuesto en diócesis andinas como Ayacucho.
Estas iniciativas son experimentales, no forman aún un «Rito Inca» y requieren aprobación episcopal.
B. En partes específicas de la Misa
Ritos iniciales:
Procesión con símbolos incaicos: Incluir banderas con la chakana (cruz andina, reinterpretada como cruz cristiana) en la entrada, propuesto en Misas en la fiesta de la Virgen de Copacabana, Bolivia.
Liturgia de la Palabra:
Oraciones en quechua: Traducir la oración de los fieles o las lecturas al quechua, con referencias a la creación (las montañas como obra de Dios), usado en comunidades de Apurímac.
Ofertorio:
Ofrendas andinas: Presentar coca, papa o quinoa junto al pan y el vino, simbolizando gratitud por la tierra, experimentado en Misas en Puno.
Rito de la comunión:
Cánticos quechua: Cantos eucarísticos en quechua con instrumentos andinos, propuestos en parroquias de Arequipa.
C. Fuera de la Misa (celebraciones paraeucarísticas)
Procesiones y festividades:
Danzas andinas: Incorporar danzas como la tinku o la morenada en procesiones de Corpus Christi o la Virgen del Carmen, comunes en Cusco y La Paz.
Ofrendas a la tierra: Ritos de agradecimiento con hojas de coca o despachos (ofrendas rituales) cristianizados, usados en bendiciones agrícolas en comunidades aimara de Bolivia.
Liturgias de la Palabra:
Celebraciones no eucarísticas con oraciones en quechua, uso de la chakana como símbolo cristológico y música andina, propuestas por misioneros en Huancavelica.
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RITO AMAZONICO
(RITOS CHAMÁNICO-PACHAMÁNICO)
El Sínodo Amazónico (2019) propuso un «rito amazónico» que refleje el patrimonio litúrgico, teológico y espiritual de la región amazónica, incluyendo elementos culturales indígenas. La zona sur de la Amazonas se incorporarían los ritos de la Pachamama.
En Querida Amazonia (2020), el Papa Francisco apoyó la inculturación litúrgica (párrafos 79-84), pero no se ha creado aún un rito formal.
El foco del rito amazónico es la diversidad de pueblos indígenas de la Amazonía (como los quechua, aymara, o guaraní, entre otros).
Este rito amazónico, que incluiría elementos culturales de pueblos indígenas (algunos de los cuales podrían compartir herencias andinas como la Pachamama especialmente en las zonas sur), está en una fase experimental de tres años para observar su viabilidad y aún no ha sido aprobado definitivamente.
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RITO MAYA
Se han autorizado adaptaciones litúrgicas específicas para comunidades indígenas, particularmente en el caso de los pueblos mayas en México.
En noviembre de 2024, el Vaticano, a través del Dicasterio para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, otorgó el reconocimiento («recognitio») a ciertas adaptaciones litúrgicas para la celebración de la Misa en español (y pendientes de traducción a lenguas indígenas) para las comunidades Tseltal, Tsotsil, Ch’ol, Tojolabal y Zoque de la diócesis de San Cristóbal de las Casas, en Chiapas, México. Estas adaptaciones no constituyen un «rito maya» como tal, sino que son modificaciones al Rito Romano para incorporar expresiones culturales indígenas.
El 8 de noviembre de 2024, el Cardenal Arthur Roche, prefecto del Dicasterio, emitió una carta aprobando estas adaptaciones, según anunció el Cardenal Felipe Arizmendi Esquivel, obispo emérito de San Cristóbal. No se trata de un nuevo rito litúrgico, sino de adaptaciones opcionales al Ordinario de la Misa (la estructura básica de la Misa del Misal Romano).
Elementos aprobados:
1. Danzas rituales: No son «danzas» folclóricas, sino un «movimiento pendular rítmico» o balanceo corporal meditativo durante momentos como el ofertorio o la acción de gracias después de la comunión, acompañado de música tradicional.
2. Mujeres como incensadoras: del altar, imágenes sagradas y la asamblea usando «sahumerios» (incensarios tradicionales), reflejando costumbres locales donde las mujeres desempeñan este función.
3. Función del «principal»: Un laico (hombre o mujer) reconocido por la comunidad puede guiar ciertos momentos de oración comunitaria (como la oración de los fieles o momentos de acción de gracias), siempre bajo la autorización del sacerdote celebrante. No implica presidir la Misa ni reemplazar al sacerdote.
Aclaración de la Conferencia Episcopal Mexicana (CEM):
El 24 de noviembre de 2024, la CEM emitió un comunicado aclarando que no existe un «rito maya» ni una «Misa maya». Las adaptaciones son específicas para las comunidades mencionadas y no incluyen elementos como «altar maya», «oraciones a los puntos cardinales» ni la transferencia de la presidencia litúrgica a laicos. Estas adaptaciones son opcionales y no modifican sustancialmente la estructura del Misal Romano.
Estado actual
Estas adaptaciones son un caso excepcional, siendo solo la segunda vez desde el Concilio Vaticano II que se aprueban adaptaciones litúrgicas de este tipo (la primera fue el Rito Zaire en África).
Su implementación será gradual, con formación para sacerdotes y agentes pastorales, y está limitada a la diócesis de San Cristóbal, aunque se está considerando su posible extensión a otros pueblos indígenas de México con variaciones específicas.
La práctica real parece sugerir que sí que se trata de una celebración que acabará siendo un ritual completo con misa y altar y vestiduras mayas.
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RITO AZTECA
Propuestas de elementos aztecas en la liturgia católica
A. Dentro de la Misa
En México, en regiones con herencia náhuatl, se han propuesto elementos aztecas para expresar la fe católica en un marco cultural local, siguiendo el modelo de inculturación de la Virgen de Guadalupe.
Propuestas:
Uso del copal: Sustituir o complementar el incienso tradicional con copal, usado en rituales aztecas, durante el ofertorio o la incensación del altar, simbolizando purificación y oración ascendente.
Parroquias en Puebla han experimentado con copal en Misas solemnes, aunque sin aprobación formal.
Instrumentos tradicionales: Incorporar el teponaztli (tambor de madera) o el huehuetl durante el canto de entrada o el ofertorio, adaptando ritmos náhuatl a himnos litúrgicos.
Vestimentas litúrgicas: Diseños de casullas con motivos aztecas (glifos solares o de Quetzalcóatl cristianizados) para el sacerdote, como expresión de identidad cultural, vistos en algunas Misas en el Estado de México.
Estas prácticas son experimentales, locales y no están reguladas por el Misal Romano ni aprobadas por la Santa Sede. Requieren autorización episcopal (Sacrosanctum Concilium, n. 22).
B. En partes específicas de la Misa
Ritos iniciales:
Danza ritual: Propuestas de incluir danzas aztecas (e.g., concheros) durante la procesión de entrada, como expresión de reverencia, similares a las danzas mayas aprobadas en el Rito Maya (2024).
Misas en la Basílica de Guadalupe han integrado danzas en festividades marianas.
Liturgia de la Palabra:
Lecturas en náhuatl: Traducir las lecturas bíblicas o la oración de los fieles al náhuatl, con alusiones a la cosmovisión azteca (el sol es símbolo de Cristo), usadas en comunidades indígenas de Hidalgo.
Ofertorio:
Ofrendas aztecas: Presentar maíz, flores de cempasúchil o cacao junto al pan y el vino, simbolizando la creación y la gratitud, como se ha visto en Misas en Tlaxcala.
Rito de la comunión:
Cánticos náhuatl: Cantos en náhuatl durante la comunión, adaptando textos eucarísticos a melodías tradicionales, propuestos en diócesis como Texcoco.
C. Fuera de la Misa (celebraciones paraeucarísticas)
Procesiones y devociones:
Danzas y ofrendas: Uso de danzas aztecas y altares con flores, copal y maíz en procesiones marianas (e
12 de diciembre, Virgen de Guadalupe), comunes en Ciudad de México y Oaxaca.
Ritos de bendición:
Incorporación de limpias con hierbas o copal en bendiciones de casas o campos, integrando espiritualidad azteca cristianizada, practicadas en comunidades rurales de Morelos.
Liturgias de la Palabra:
Celebraciones no eucarísticas con lecturas en náhuatl, danzas y símbolos aztecas (el fuego como símbolo del Espíritu Santo), propuestas por misioneros en Guerrero.
Estas prácticas son más comunes y aceptadas localmente, pero carecen de un marco litúrgico oficial y dependen de la aprobación del obispo.
¿Están los Cardenales apurados por volver a alguna parte? Mejor tómense el tiempo necesario, que después ya no hay lamentaciones que valgan.