| 24 abril, 2025
A él le gusta Arborelius. A mí también.
Y no ha dudado en afirmar que Francisco ha sido un Papa profundamente absolutista. Lo que es pura evidencia.
<
A él le gusta Arborelius. A mí también.
Y no ha dudado en afirmar que Francisco ha sido un Papa profundamente absolutista. Lo que es pura evidencia.
Ese absolutismo se ha revestido de capricho y arbitrariedad. Con el pretexto de la universalidad, ha nombrado cardenales en Irán, Mongolia, Israel, Marruecos y Argelia, pero con trampa, porque son respectivamente, un belga, dos italianos, un español y un francés, o sea, «menos lobos, caperucita». Ha dejado sin electores a la República Dominicana, Puerto Rico, El Salvador, Venezuela, Ecuador, Bolivia, Honduras y Costa Rica, para premiar a Brasil y Argentina y castigar a Méjico (con dos electores, mientras Gran Bretaña tiene tres, dos de ellos macabros). Les ha quitado los votos a Vietnam, Australia, Eslovaquia, Letonia, Eslovenia, Austria y a doce naciones africanas para premiar a Portugal (con cuatro votantes), ha despreciado a los coptos, armenios y melquitas pero le ha dado un cardenal a Singapur. Ha violado los pactos de Letrán, concediendo capelos a italianos con un nivel intelectual inferior a una rebanada de pan de molde, es decir, sus nombramientos cardenalicios han obedecido, lisa y llanamente, a los de un caprichoso niño de guardería. Ajaccio sí, París no; Como sí, Milán no y ya lo de nombrar !tres! cardenales en Santiago de Chile es de traca (menos mal que dos no votarán). Que el nuevo pontífice tenga un poquito más de «finezza» (como dicen los italianos).
Ya era hora de tener una crítica bien fundada. Sí, Francisco ha representado, diga lo que diga Vidal, y por mucho parloteo sobre la «sinodalidad», un regreso al absolutismo papal más crudo. También comparto la opinión positiva sobre el sueco Arborelius, toda una sorpresa.
Mi pronóstico es que no saldrán ni Zuppi, ni Parolin, ni Tagle porque se formará una minoría de bloqueo en su contra, de forma que habrá que buscar un candidato de consenso y ahí el cardenal sueco puede tener su oportunidad. Cualidades no le faltan y además por sus características puede recibir votos de muchas tendencias. Veremos.