Doble viaje del Papa a Caserta. Y doble petición de perdón

Como había prometido en una de sus reuniones previas con los líderes «evangélicos» en diferentes países, el Papa pidió perdón a los pentecostales de Caserta y su pastor John Traettino, su amigo, al que fue a visitar a Lunes, 28 de julio. De Sandro Magister para Settimo Cielo, traducido por Infovaticana Pidió perdón por las leyes contra los protestantes en Italia durante el período fascista. El Papa dijo: «Entre los que han perseguido y denunciado a los pentecostales, casi como si fueran tontos que arruinaban la raza, también hubo católicos: Yo soy el pastor de los católicos, y pido perdón por aquellos hermanos y hermanas católicos que no han entendido y que fueron tentados por el diablo «. Pero este no es el único «mea culpa» expresado por el Papa en su doble visita a Caserta. De hecho, Francisco se golpeó el pecho, también el sábado, 26 de julio la festividad de Santa Ana patrona de Caserta, esta vez con los fieles de su rebaño. Estas son sus palabras exactas, que dijo al principio de la reunión con el obispo y el clero local: «Muchas gracias por vuestra hospitalidad. Gracias. Estoy feliz y me siento un poco culpable de haber dado tantos problemas en el día de la fiesta patronal. Pero yo no lo sabía. Y cuando llamé al obispo para decirle que quería venir para una visita privada aquí, a ver a un amigo, el Pastor Traettino, dijo: ‘¡Ah, el día de la patrona!’. Y luego pensé: «Al día siguiente, los periódicos dirán: en la fiesta de la patrona de Caserta, el Papa se fue con los protestantes ‘. Buen título, ¿eh? Y así lo arreglamos, un poco «a toda prisa, pero me ayudó mucho al obispo, e incluso la gente de la Secretaría de Estado. Le dije al sustituto, cuando lo llamé: ‘Pero, por favor, qítame la cuerda del cuello’. Y lo hizo bien «. En cualquier caso, la visita de Francico a su amigo pentecostal, que en las intenciones iniciales de Francisco iba a ser «privadísima», si no secreta, por el camino se ha vuelto más que pública. Para encontrarse con el Papa, a las 11 en la iglesia de la «Reconciliación», estaban, además del pastor Traettino, más de 350 pentecostales, algunos venidos expresamente desde los Estados Unidos, Argentina y otros países, con un escenario y una banda de música. Y a continuación un almuerzo entre ellos y el Papa en el comedor de la comunidad.