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Dos horas de buena televisión

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Anoche vi un programa de debate en una televisión. La Iglesia, lo cristiano, la civilización cristiana, los signos religiosos, la herencia cristiana y la acción de gracias a la Iglesia de un país, como Cuba, a favor de los presos deportados a España, fueron temas preferentes.

En dos horas aparecieron varios aspectos que deseo destacar:

1.- Algunos periodistas presentes en el debate estaban más pegados que un sello de las viejas cartas de correos, ignorando y mezclando conceptos de la filosofía griega con la romana, desconociendo que ambas las conocemos gracias al cristianismo que nos las legó a través de San Agustin o Santo Tomás de Aquino.

2.- Entre el público presente en el estudio encontré lo que vivo todos los días: las victimas de Logse. Los pobres jóvenes analfabetos funcionales que repiten palabros sin decir nada; que repiten latiguillos aprendidos en una sola fuente informativa; y totalmente ayunos en argumentos para debatir. Hubo algunos ejemplos positivos para ser plenamente sinceros.

3.- Sobre los símbolos religiosos y el proyecto de ley de libertad religiosa, del que escribimos ayer aquí, se demostró la mezcla de conceptos entre aconfesional, laica, laicista y laicismo. Los periodistas presentes usando lugares comunes agarrándose a ellos como el naufrago a la tabla más próxima cuando desde la opción de un católico y un no creyente comenzó un disparo graneado de motivos documentados con casos prácticos de la historia pasada y presente del cristianismo en España.

4.- El programa tuvo una gran altura intelectual, humorística, casi radiofónica, que acabó con el testimonio de uno de los presos deportados desde Cuba, quien, cuando llegó el momento, agradeció la misión de la Iglesia cubana en el papel ejercido en su deportación a España, cuyo gobierno, al llegar aquí, después de prometerles el oro y el moro, les ha dejado en el total abandono.

Acabo. El canal televisivo fue Veo 7. El programa comenzó a las diez de la noche pasadas y terminó a las doce pasadas.

¿Quién moderaba el programa y quien era uno de los periodistas invitados?.

Lo dejo a que los amigos lectores lo averigüen. Quien viera este espacio lo sabrán fácilmente. Los que no visionaran este canal a esas horas se perdieron dos horas de una forma de hacer televisión atractiva, cultural, humana, y apta para todos los públicos.

Tomás de la Torre Lendínez

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