| 04 enero, 2025
Le quedan veinticuatro días de la penosa prórroga de dos años que Francisco le concedió. Al que seguramente es el peor obispo de España. El 28 de enero cumple 77 años. Y la diócesis desea que ni un día más de prórroga. Otros dos años sería de escándalo aunque hoy todo es posible.
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Esto me dicen desde la Isla:
«Querido Paco Pepe, feliz año nuevo.
Le remito la noticia del día de hoy en que Taltavull prohibió a las hermanas Jerónimas, propietarias según ya van tres sentencias judiciales del Monasterio de Santa Isabel de Palma, de celebrar la misa del Gallo el día 24 de diciembre.
Las hnas. habían organizado con ayuda de Cruz Roja y del Ayuntamiento de Palma un día de puertas abiertas para sus benefactores y colaboradores y una comida de Navidad en su claustro para los marginados de las calles de Palma bajo el lema, «Ni un Pobre sin Navidad «. Esa jornada debía terminar con dicha celebración eucarística.
La cuestión es que el obispo prohibió dicha misa.
A 26 días de que expire la famosa y cacareada prórroga, según Taltavull por escrito y según la Canciller y el Vicario General, nunca han visto dicho escrito; se ve que la maldad y sobre todo los celos corroen al susodicho prorrogado.
Sabemos que Taltavull tiene y practica varios pecados capitales; es un vanidoso, un soberbio, un orgulloso, un iracundo y un tremendo envidioso.
Pues no se da por aludido con las distintas sentencias, se empecina en recurrir ya en la última instancia, eso sí pagando con los dineros de los fieles mallorquines su engrasada máquina jurídica.
Pero en el fondo lo que seguramente más le fastidia es que unas pobres hermanas quieran celebrar esa jornada de compartir su pan con aquellos que más lo necesitan y que viven en las calles de la ciudad y no estar él presente, siendo un adalid de la defensa de los pobres, de acciones solidarias y de proyectos caritativos, eso sí siempre poniendo las fotos por delante.
Esperemos que Taltavull pronto pase a su retiro dorado como obispo emérito, que Roma , por fin lo mande a su retiro dorado y esta diócesis y el sucesor que llegue al menos intente recuperar lo que se pueda en esta DANA que ha sido el pontificado de un infame».
Pues, la Misericordia en Persona, ya le juzgará y ya conocerá el empedrado camino que le será señalado, porque tuve hambre y no me disteis de comer.
Muy mal lo tendrá el próximo pastor de Mallorca para encauzar a ciertos colectivos de sacerdotes palmeros del de Ciudadela. Le ríen las gracias cerrando parroquias, que por vagos no quieren ir a celebrar, prefieren dedicarse a otros menesteres que le salen más provechoso para sus bolsillos, como dedicarse a la docencia, o como el ahorcado a la funeraria de Inca del que se llevaba un buen porcentaje de todos los difuntos, que triste. Feligreses que no saben a que parroquia acudir, suprimiendo misas y un largo etc. La diócesis se hunde por el sabotaje de los mismos miembros encabezado por el menorquín.
Con que el sucesor sea mejor, me conformo. Por algo Martínez Sistach no lo quería ni ver y «pasó» de él como si no existiera.