Que alguna conexión, más o menos remota, tienen.
El que fue rey Juan Carlos por extrañas reminiscencias de la unión del Altar y del Trono todavía parece encantar a católicos españoles. A mí me parece un caradura y un sinvergüenza de marca en el que el nombre de Rey Católico es hasta blasfemo. Un mujeriego compulsivo y de magnitud de cortedad solo comparable al tamaño de su compulsión.
Que con necesidad tanta, incluso en España, regale 70 millones de euros a la querida ocasional, que además le tiene en los tribunales creo que le retrata. Y que a mí me trae sin cuidado que viva o muera en Abu Dabi o en Nueva Zelanda que está más lejos. Pero por mi parte que no vuelva nunca.
Hace muchos años voté alguna vez al Partido Popular. Con escaso entusiasmo. Nunca fui entusiasta de Fraga y siempre me cayeron mal Aznar, Rajoy, Cascos, Rato. Arenas… Los que me parecían más aceptables, tampoco con enormes entusiasmos, eran enseguida descabalgados por su propio partido: Rita Barberá, María San Gil, Esperanza Aguirre, Carlos Mayor…
Con lo que lo tuve clarísimo. Con esos, ni a cobrar una herencia. Y ni habiendo herencia, con más motivo.
Y llegaron Casado y Ayuso. El primero un menesteroso congénito a quien parece que tuvieron incluso que ayudar para que concluyera su carrera. Que ya se ve como ha terminado. Tal vez porque nada había en ella.
¿La otra? Triunfo espectacular sobre el PSOE y por tanto sobre Sánchez. Celos del menesteroso, ambiciones de otros que sabiéndole al celoso de cortedad tanta quisieron heredarle desde secretarías o ayuntamientos…
Y como consecuencia el PP pulverizado.
Uno, desde las distancias, ve una salida que ni es la suya, ni le preocupa ni es salida. Aunque mejor que Casado hasta el Goofy de Walt Disney. Yo a Feijóo no le habría votado nunca ni a Ayuso le he votado. Sus modos de vida distan mucho de los que a mí me parecen bien y eso también lo tengo en cuenta a la hora de votar. Que uno es así de raro. Y reclamo el derecho de ser como me dé la gana.
Pero muchos católicos les votan y hasta pensando ellos que es lo que les pide su religión. Con Rajoy y con Casado creo que no pocos ya se han decepcionado. Les llegarán más decepciones católicas.
Y para concluir esta incursión política, Ucrania. Que hasta podría acabar con el mundo en un desastre nuclear. Mis simpatías políticas, con los invadidos. Sin la menor duda. Y una recomendación que no encuentro en las declaraciones eclesiales. Por si acaso, que Dios nos pille confesados.
Coincido en sus apreciaciones en su mayoría. Los 70 millones eran suyos y aunque quede feo, tampoco podemos decir nada. Pero los 600 millones de pesetas que dio entonces Aznar para tapar un vídeo comprometido con cierta actriz, es otra historia, porque los 600 eran nuestros.
Nunca voté al pp y por supuesto, si Dios me da salud, no lo pienso hacer. Fra Casado es eso, un zombi insepulto, no merece la pena hablar de él, pero que la gente de derechas y patriota vote a un tipo que ha borrado el español en Galicia, es para hacérselo mirar. No entro en la vida privada, aunque, yo como los useños, si un tipo o una tipa, no ha sido capaz de ser fiel a alguien que conoce íntimamente, ¿cómo va a ser fiel a una gente que no conoce? Y lo de intimidad no sólo es en cuestiones de cama, sino en todas las cuestiones matrimoniales.
Pero además, son devotos del aborto y de la agenda legtbzpj, a´si que como dice, ni a cobrar una herencia. Que Marisú se lleve la herencia.
En efecto, ahora el riesgo de guerra nuclear es mucho mayor que cuando la guerra fría, porque entonces eran tipos que sabían lo que se jugaban, ahora son unos frívolos a cargo de las bombas y si no, que se lo pregunten a Vetustatis.
Los pueblos sufren y los invadidos mucho más, pero si hay un gobierno corrupto es el de Ucrania y que muera gente por defender a esa gentuza…