Críticas a Don Carlos Osoro

Nuestro arzobispo de Madrid suscita división de opiniones. Cosa que suele ocurrir con todo el mundo. Los comentarios que algunos lectores dejan en el Blog reflejan, bastantes, posiciones críticas con el arzobispo. Presentándole como un progresista que viene a romper una Iglesia que se mostraba bastante unitaria bajo  el arzobispo anterior. Y con aspectos marcadamente tradicionales en su línea. La conclusión lógica sería que Don Carlos Osoro llegaba para imponer la contraria, bien por representarla él o siguiendo instrucciones en ese sentido. Sin embargo a veces la lógica no es tan lógica. Empieza a rechinar el raciocinio al tener en cuenta que el nuevo arzobispo jamás se había mostrado como un progresista sino más bien como sólido representante de posiciones llamémoslas de centroderecha por utilizar una terminología política. No se apreciaban quiebras entre la línea que podía representar el cardenal Rouco y el que fuera obispo de Orense y arzobispo de Oviedo y Valencia salvo las propias de diferencias de carácter. Llega, además, a Madrid, como final de su carrera eclesial. En la que llegó a la cumbre. Le falta el cardenalato, que parece más que previsible, y la presidencia de la Conferencia Episcopal Española. No falta quien asegura que está haciendo méritos para la púrpura. Me parece una elucubración sin sentido. El mérito que tiene que hacer es llevar su diócesis bien y sería demérito el dividirla en facciones irreconciliables. Y mayor todavía si la división fuera de un 80% disgustado y un 20% satisfecho. Si además, entre la minoría que le apoyase estuviera lo peor del clero de Madrid pues vendería muy mal ese resultado. Osoro tiene que saber que va a ser cardenal seguro y que la única duda en estos momentos es si lo será en el próximo consistorio o en los siguientes y si le adelantará Omella o no. La presidencia de la CEE la veo más complicada porque me da la impresión de que, hoy por hoy, la mayoría de los obispos españoles no le apoya. Y queda un año exacto para la elección. Cuando concluya el mandato del próximo presidente, Osoro, por edad, sería ya un improbabilísimo candidato. Hay otro argumento que descabala más todavía la tesis del arzobispo progresista que quiere dar un vuelco a la archidiócesis madrileña. Y es que el sector más radical de la misma no está nada satisfecho con el año y medio de gobierno de Osoro y así lo ha manifestado públicamente en un escrito que bajo formas suaves y un comienzo halagador expone un fondo sumamente duro y crítico. Claro que ese Foro de Curas de Madrid son poquísimos y de nula relevancia eclesial. Pero demuestra que Osoro tampoco es lo deseado por los Podemitas eclesiales. Cosa que para quien esto firma era evidente. Lean el artículo y se convencerán: http://www.atrio.org/2016/04/presion-desde-el-clero-de-base-al-arzobispo-de-madrid/#more-13005