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Ahora es un obispo el que cuestiona la beatificación de Angelelli

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Las dos condiciones para la beatificación de un mártir están siendo muy cuestionadas en el caso del  obispo Angelelli. La primera es que lo hayan matado y no hubiera sido un accidente de circulación. Porque si hubiera ocurrido esto último como se sostiene con fundamento no existiría mártir y no cabría la beatificación por ese atajo.

La segunda es que la muerte venga causada por odio a la fe. Cosa que tampoco está clara pues pudo haber sido por las posiciones políticas del fallecido en el caso de que hubiera sido asesinado.

Ante esta división de opiniones me parece un enorme  error proceder a la beatificación:

http://www.laprensa.com.ar/469484-Crecen-las-objeciones-ante-la-beatificacion-de-Angelelli.note.aspx

En primer lugar porque se devalúa ese importantísimo acto de la Iglesia cuando muchos fieles lo rechazan en este caso concreto, a la inmensa mayoría de los católicos del mundo les trae sin cuidado y sólo agrada a sectores abiertamente contrarios a la Iglesia o que pretenden valerse de ella para sus postulados políticos de extrema izquierda.

Y también porque el prestigio del Papa Francisco, ya bastante en entredicho, va a quedar más deteriorado ante lo que no pocos juzgan que es un capricho personal suyo derivado de sus actuales simpatías izquierdistas.

Que un obispo, aunque emérito, se atreva a cuestionar públicamente esta decisión pontificia añade morbo al tema y es una muestra más del caos en el que se encuentra la Iglesia y que el Papa actual no quiere o no sabe remediar. Que es para lo que fue elegido y no para un lucimiento personal que además se le desmorona.

Comentarios
11 comentarios en “Ahora es un obispo el que cuestiona la beatificación de Angelelli
  1. Paco Pepe: me sorprende que usted no tenga claro que, si Angelelli fue asesinado, no lo fue por odio a la Fe, sino por motivos políticos, ya que en la dictadura argentina no se perseguía a los católicos por su Fe; no era la España de 1936.

  2. Vamos a ver si consigo explicarme.

    Las canonizaciones son infalibles. Pero eso no tiene mucho mérito, la misericordia de Dios es infinita y hasta el más pecador si se arrepiente puede ir al Cielo. De tal modo que en realidad no podemos afirmar de nadie que esté en el infierno, aunque como dino SS Benedicto, el infierno no está vacío.

    De todas formas el Espíritu Santo tiene millones de formas para evitar una canonización falsa y ahí sí que actúa. De modo que si se canoniza a alguien, es porque está en el Cielo. Otra cosa es que su vida sea ejemplar y en eso muchas canonizaciones no están muy claras.

    En el caso de este obispo, la beatificación no es infalible, de modo que un beato puede o no estar en el Cielo. No compromete mucho. Si se canonizara, es que está en el cielo, pero sin duda su vida no es ejemplo para nadie.

  3. Si quiere, que lo canonice.Será otro daño inmenso a la Iglesia, uno más de un pontificado infausto.Para mí, Demonielli será siempre un miserable bastardo filoterrorista, por más que se empeñe el italiano revenido argentino de las narices.

      1. Tratándose de un tema en el que no hay evidencias de asesinato no veo porqué se insista en que fue asesinado. Y más si murió sin confesarse y recibir la unción de enfermos.
        Pero, aún si el accidente hubiese sido provocado, eso no es el martirio, sobre todo si no le dio tiempo ni a rezar el acto de contrición o a proclamar la fe católica, que nadie discutía en un país donde había obispos de gran talla y virtud, reconocidos y apreciados por las autoridades. Recuerdo de esa época al arzobispo Castrense Monseñor Tórtolo, a su sucesor Bonamín., el Cardenal Primatesta, el Cardenal Aramburu. En Zárate Campana Monseñor Alfredo Espósito. Con esa «ceremonia» se va a desautorizar a toda una jerarquía argentina que sentía con la Iglesia.

  4. queda demostrado que la beatificación del montonero angelelli es absolutamente espuria, motivada por los caprichos personales e ideológicos de bergoglio. y es que al no existir pruebas irrefutables sobre el supuesto martirio y la supuesta santidad del montonero angelelli, por ende, tanto la beatificación como la posterior canonización del montonero angelelli serían absolutamente nulas, constituyéndose así una farsa bergogliana.

  5. «Y también porque el prestigio del Papa Francisco, ya bastante en entredicho, va a quedar más deteriorado […]»

    No sólo el prestigio, sino su propia legitimidad. Si las beatificaciones y canonizaciones comprometen la infalibilidad papal (se está discutiendo mucho el asunto), entonces por simple lógica si canoniza a un desorejado es que no es papa.

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