El compositor, director de orquesta y musicólogo peruano José Quezada Macchiavello ha dedicado su más reciente creación, la Sinfonía Nº 3, Tríptico Agustiniano, opus 32, al Papa León XIV, el primer Pontífice agustino en la historia de la Iglesia Católica. La obra, impregnada de la espiritualidad de San Agustín, será estrenada el próximo 22 de noviembre en Chiclayo, en un evento que promete ser tanto un espectáculo artístico como un homenaje teológico y filosófico.
Inspiración en San Agustín y la providencia
La sinfonía nace de un largo camino personal e intelectual. En una entrevista con EWTN Noticias, Quezada recuerda que fue durante su adolescencia, en el Colegio de San Agustín de Lima, cuando tuvo su primer contacto con las obras del obispo de Hipona. De la mano del padre Vicente Paniagua, descubrió Las Confesiones y La Ciudad de Dios, textos que —según confiesa— le cambiaron la vida.
Años más tarde, intentó elaborar una tesis sobre la estética agustiniana en la Facultad de Teología Pontificia y Civil de Lima, pero el proyecto no se concretó. “Entonces, ya que no pude escribir una tesis sobre San Agustín, decidí escribir una sinfonía sobre San Agustín”, relata.
Música como teología: el alma agustiniana hecha partitura
La Sinfonía Nº 3 busca captar lo más profundo del pensamiento de San Agustín: su concepción de la interioridad, su visión del tiempo como devenir humano frente a la eternidad divina, y su búsqueda incansable de la verdad. El resultado, según explica el propio autor, es una obra “cargada de simbolismo” y con una elaboración musical que pretende ser un vehículo de meditación espiritual.
Compuesta entre 2021 y 2023, en plena pandemia, la obra iba a estrenarse como parte del 120º aniversario del Colegio San Agustín, pero los planes se pospusieron. Entonces, dice el maestro,
la sinfonía quedó esperando que la providencia le dé a la Iglesia un Papa agustino. Me dieron un Papa agustino. Y aquí está la sinfonía”
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Estreno internacional y homenaje al Papa
El estreno será interpretado por una orquesta juvenil conformada por músicos peruanos y de países vecinos. La preparación tendrá lugar en Lima, y el concierto se celebrará en un teatro edificado por el antecesor de Mons. Robert Prevost, quien fue obispo de Chiclayo hasta 2023 y es hoy prefecto del Dicasterio para los Obispos.
El maestro Quezada señala que fue el sacerdote Pablo Rarrán quien lo animó a dar el paso de dedicar la obra al Papa León XIV. “Me dijo: ‘Hay que jugar en ligas mayores con la sinfonía. Dedícasela a Su Santidad’”.
El Santo Padre ya ha sido informado sobre la obra. “Él, como todos lo sabemos, se comunica permanentemente con el Perú. Está muy al día de todo lo que sucede aquí. Y él se siente peruano. Eso no es demagógico”, aseguró el compositor.
Luego de su estreno en Chiclayo, la sinfonía será interpretada en Lima, ofreciendo una nueva oportunidad para que el público peruano se acerque al pensamiento agustiniano y rinda homenaje, a través de la música, al nuevo Pontífice.