Hoy comienza el cónclave que elegirá al sucesor de Francisco, y mientras los focos se concentran en los cardenales más mencionados por las quinielas, hay un detalle litúrgico y ceremonial que puede pasar desapercibido… salvo para los más atentos.
La tradición manda que, una vez elegido el Papa, sea el Protodiácono de entre los cardenales diáconos quien salga al balcón central de San Pedro a pronunciar el famoso Habemus Papam. Y actualmente, ese honor corresponde al cardenal Dominique Mamberti, Prefecto del Supremo Tribunal de la Signatura Apostólica.
Pero aquí viene lo curioso: si el elegido como Papa fuera precisamente Mamberti, entonces no podría salir al balcón para anunciarse a sí mismo. En tal caso, sería sustituido en la proclamación por el siguiente cardenal diácono por orden de precedencia.
Así que, cuando llegue el momento y las cortinas del balcón se descorran, habrá una primera respuesta inmediata:
-
Si quien aparece es Mamberti, significa que el nuevo Papa es otro, y él va a anunciarlo.
-
Si no es Mamberti quien sale, sino Mario Zenari, la explicación es sencilla y sorprendente: él mismo ha sido elegido Papa.
Un pequeño truco para los iniciados en las rúbricas y protocolos de la Iglesia, que añade una pizca de suspense extra a uno de los momentos más solemnes y emocionantes de la vida de la Iglesia.
Por supuesto, todavía falta la fumata blanca, las campanas, la espera… pero ya sabemos que, este año, incluso antes de escuchar el Habemus Papam, podremos intuir el nombre de quien ocupará la Cátedra de Pedro solo con ver quién cruza el balcón.
Estaremos atentos.
Ayuda a Infovaticana a seguir informando
Gurpegui está super emocionado porque cree que va a salir un Papa de su cuerda, un Sarah o un Burke que le proporcione consuelo a su corazoncito tradicionalista.
Pues ojalá sea así.
Gurpeyejo está convencido de que van a elegirle a él
¡Qué ingenioso y ocurrente es Peligrosísssssomo Bufón Aburrido! 😁
Un Papa «de su cuerda», es un Papa católico, que es de lo que se trata. Y es lo que debe pasar si los cardenales entran en razón.
Ut Fumus Sint ya quisiera un cardenal Marx, que escogiera el nombre de Karl I…
Hay otra posibilidad, no sale Mamberti y el elegido es … X!
Resulta que Mamberti ha sufrido una súbita indisposición. 😉
Sería alucinante que saliera un «tapado» por ejemplo, el pope Tucho I A ese nadie lo espera
Yo ya estoy esperando un Pope inesperado, una sorpresa para el mundo, que muchos dirán: «y este ¿quién es?» Y vaya si puede ser sorprendente que en la vieja Europa lo verían como un personaje exótico, todos buscando información sobre él, su origen, formación, ideología, etc. «La novedad del siglo», según algunos exagerados, pero no muy desencaminados. Con una apariencia un tanto andrógina, tirando al moreno pero con ojos cristalinos muy vivos y mirada profunda, no demasiado grandes. «Parece venido de otro planeta», bromearían algunos. Y al escuchar su voz se quedarían de piedra! Qué tremenda voz cálida, segura, potente, como voz de trueno pero sin estallido sino que muy suave. ¿Nombre? Papa Bonifacio, aquél que lo hace todo bueno.
¡Menuda chapa! Si no pone troleces más breves, que se las lea otro.
Siempre ha sido así. Recuerdo que hace 12 años había hasta quien pensaba en Tauran, a pesar de su evidente parkinson. Y al salir Tauran a anunciar a Bergoglio, una corresponsal dijo:»Es Tauran».
Será italiano y yo pongo en mi quiniela a Pizzaballa.