El cardenal Cipriani insta a los obispos del Perú a rectificar: “No se ha comprobado nada”

Cardenal Juan Luis Cipriani Cardenal Juan Luis Cipriani
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El cardenal Juan Luis Cipriani ha enviado una carta a todos los miembros de la Conferencia Episcopal Peruana en la que responde con firmeza al comunicado publicado hace dos meses por la Presidencia de la CEP. En dicho comunicado, los obispos afirmaban que a Cipriani “se le aplicaron algunas medidas disciplinarias una vez que se comprobó la veracidad de los hechos”.

El purpurado, arzobispo emérito de Lima, desmiente con claridad esa afirmación y la califica de falsa. “No es verdad que se haya comprobado nada”, escribe, “porque no ha habido un juicio, ni se han actuado pruebas, ni ha habido una defensa, ni hay testigos, ni nada”. Añade que el decreto reservado de la Congregación para la Doctrina de la Fe menciona un fumus delicti (es decir, indicios), pero no hechos comprobados.

Cipriani afirma que acató las medidas limitativas impuestas “por el bien de la Iglesia”, aunque dejó constancia por escrito de que eran falsas las acusaciones, esperando la ocasión para poder defenderse. Esa ocasión, asegura, aún no ha llegado.

En la misma carta, el cardenal critica la confusión generada en el comunicado episcopal al relacionar su renuncia, aceptada al cumplir 75 años, con la imposición de medidas disciplinarias. Recuerda que la renuncia a esa edad es una obligación canónica para todos los obispos y no implica “dejar el ministerio episcopal”, como dice el comunicado, sino pasar a la condición de obispo emérito. Además, destaca que el decreto disciplinario es posterior a su renuncia por casi un año, lo que desmiente cualquier conexión entre ambos hechos.

Tras más de treinta años de ministerio episcopal —primero en Ayacucho y luego en Lima—, Cipriani denuncia que todo lo que hay en su contra es una carta anónima de origen desconocido, un decreto reservado y una campaña mediática para dañar su fama y su labor al servicio de la Iglesia y del Perú.

Afirma que esperó durante dos meses una rectificación que nunca llegó y por eso ha decidido dirigirse a todos los obispos del país, no sólo a los tres que firmaron el comunicado, para exponer el daño causado. Les pide que rectifiquen “por honradez y por responsabilidad de conciencia delante de Dios”.

A continuación, publicamos el texto íntegro de la carta enviada por el cardenal Cipriani:

Carta del cardenal Juan Luis Cipriani Thorne a la Conferencia Episcopal Peruana
Madrid, 28 de marzo de 2025

A Los Señores Obispos
Miembros de la Conferencia Episcopal del Perú

Hermanos en el Episcopado:

Han pasado dos meses desde la publicación del Comunicado que hizo público la Presidencia de la CEP en la que se afirmó —de manera falsa— que «se me aplicaron algunas medidas disciplinarias una vez que se comprobó la veracidad de los hechos». Esta afirmación es falsa y puede causar un grave escándalo al Pueblo de Dios y por ello me dirijo a todos los Obispos para invitarlos a que rectifiquen. No es verdad que se haya comprobado nada, porque no ha habido un juicio, ni se han actuado pruebas, ni ha habido una defensa, ni hay testigos, ni nada.

El Decreto emanado de la Congregación para la Doctrina de la Fe, que es reservado, menciona que existe un fumus delicti. Es decir, posibles indicios que no han sido comprobados, porque no han sido sometidos a un juicio que me permita el debido derecho a la defensa. Como he afirmado ya, y lo vuelvo a afirmar ahora, acaté las medidas limitativas que se me impusieron en el Precepto de modo reservado por el bien de la Iglesia, dejando constancia escrita de que eran falsas las acusaciones contra mí, esperando la ocasión de poder defenderme, cosa que no ocurre hasta ahora.

Más adelante el mismo comunicado dice que «reconoce la sabia decisión del Santo Padre de aceptar que deje el Ministerio Episcopal al cumplir los 75 años y de imponerme algunas limitaciones ministeriales». Como es de conocimiento público el Derecho Canónico obliga a todos los Obispos a presentar su carta de renuncia al cumplir los 75 años y el Santo Padre se reserva la decisión de conceder un tiempo de prórroga o no. La renuncia no implica ni quiere decir que el Obispo «deje el ministerio episcopal», como dice el Comunicado, sino que pasa a la condición de Obispo emérito sin una jurisdicción, pero plenamente Obispo.

Al final de ese mismo párrafo, el comunicado relaciona la aceptación de mi renuncia con el imponerme algunas limitaciones ministeriales. Olvida, o no toma en cuenta, que el Decreto es de once meses después de mi renuncia en el mes de diciembre de 2019, sin relación alguna con mi renuncia y además con una fundamentación jurídica muy extraña.

Hermanos en el Episcopado, he compartido más de 30 años con ustedes la tarea de arzobispo, primero en Ayacucho y luego en Lima y puedo afirmar que realmente no hay absolutamente nada, salvo la carta de origen desconocido, el documento reservado y una evidente campaña mediática por menoscabar mi fama y mi labor de décadas en favor de la Iglesia y nuestro país.

He esperado dos meses desde mi carta anterior para una rectificación que no se ha producido. Por ello he decidido dar a conocer a todos los miembros de la Conferencia Episcopal —Obispos en actividad y Obispos eméritos—, no sólo a los tres miembros de la Presidencia que firmaron esa comunicación, el gran daño causado no sólo contra la honra de un cardenal, sino a los fieles de los que ustedes son los pastores, al haber afirmado una mentira diciendo que «se comprobó la veracidad de los hechos» como se dice en el Comunicado y usando esta falsedad como la justificación para el comunicado.

Apelo a su honradez y a la responsabilidad de su conciencia delante de Dios, para que rectifiquen este grave error y el daño que, por ignorancia o por otros motivos, han causado.

Atentamente los saluda,
Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne

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Comentarios
15 comentarios en “El cardenal Cipriani insta a los obispos del Perú a rectificar: “No se ha comprobado nada”
  1. Prefiero no expresar lo que siento en este momento, pero a pesar de ello quiero recordar cómo este personaje, Cipriani, se deshacía en elogios hacia Bergo…, como buen opusino quería estar en misa y replicando, por decirlo de manera sutil, por eso creo que ahora se encuentra con lo que se encuentra. Jamás he escuchado al padre Aberasturi, opusino como él, elogios hacia el felón, tampoco criticas explícitas, es cierto, pero es la diferencia de quien tiene algo de materia gris.

    1. Pepe tu comentario no digo yo que no sea pertinente, algo de razón te doy aunque es opinable. A mí me parece una virtud alabar al Papa, sobretodo cuando has tenido con él ciertos conflictos en reuniones de obispos de América latina. Para mí, loable.

      Pero creo que comentando te vas del tema central de esta noticia. Aquí se está faltando gravemente a los derechos fundamentales de cualquier persona. Poder defenderte. Y que fallé en esto la Santa Sede… es motivo de mucha oración de desagravio.

      1. NEO: «A mí me parece una virtud alabar al Papa» Esto es absurdo. Se puede alabar del Papa o de Perico de los palotes lo que sea loable objetivamente. Y nada más. En todo caso cubrir sus carencias con el manto de a misericordia. ¿Te parece loable que Clemente XIV disolviera la Compañía de Jesús, o que Pio XI promoviera la traición a los cristeros? Eres papolatra

    2. Pepito Apocalíptico, bienvenido a casa! Volvió el hijo prodigo! Hay que hacer fiesta! Un chivito! Un corderito. Un whiscacho! Sabía que eras «modernista» camuflado, pero me alegra que te queden sentimientos: «Prefiero no expresar lo que siento en este momento» (Uy, la religión del «sentimiento»… qué peligro!). Scheleimacher metido hasta los tuétanos en los presuntos «tradis». Lo más bueno es que en este post te comportas como persona «educada»; parafraséandote, parece que algo de «materia gris» todavía te queda. Seguí probando! Será el efecto del evangelio de este domingo. De nuevo, bienvenido a casa. Dios Padre es también Padre de todos los que sueles insultar, que son tus hermanos en Cristo. Cuando llegues a entender eso, Pepito Apocalíptico, habrás entrado en la «etapa de la Iglesia de Filadelfia» (= del amor fraterno), que no es ninguna resignificación pagana de nada, sino EVANGELIO EN ESTADO PURO: «TODOS USTEDES SON HERMANOS» (Christus dixit!).

    3. Si se está destruyendo a un hombre a sabiendas por algo que no ha hecho, da igual que alabara a Bergo o que le cantara una nana a su abuela. Eso pertenece a su libertad, y tú demuestras con esto poner una ideología por delante de la misma humanidad.

    4. 31 de marzo y Cipriani sigue sin querellarse contra El País, que en titulares dijo que es un depredador sexual.

      Más claro, agua.

  2. Puntualizar que desde el concilio de marras, la salvación ya no necesita pasar por Cristo, cualquiera puede salvarse profesando cualquier religión o secta, eso es lo que se aprobó en el documento Nostra Aetate del ecumenismo rabioso de inspiración masónica en la iglesia.Por otra parte el Viva Cristo Rey tal y como lo aprobó San Pio XI en su encíclica Quas Primas, incluía la necesidad de instaurar en todo el mundo cristiano el Reinado social de Cristo.Todo eso fue abolido por la estafa conciliar, el reinado social de Cristo derogado por el Decreto de Libertad Religiosa y posteriormente para que no desentonara,Pablo VI también derogó la festividad de Cristo Rey, cambiando su naturaleza al añadirle rey del universo.El grito de viva Cristo Rey hoy en día solo lo mantiene la Tradición en especial el carlismo y las Hijas de Cristo Rey, institución fundada por José Gras y Granollers en 1876.

    1. Está carta debería ser atendida diligentemente y dado su contesto atañe al bien de toda la Iglesia. Por favor que se evite todo comentario que pueda hacer daño a la verdad.

  3. Espero que el sr. Gurpeguy permita mi comentario. La vez pasada parece que no lo hizo. Además de los obispos peruanos, el sr. Pedro Salinas, periodista que investigó el caso Sodalicio con Paola Ugaz con decencia, varios libros y verdad, pese a que no sean católicos, afirmó conocer la identidad de un denunciante de Cipriani. Más aún, como el cardenal fue mucho tiempo arzobispo de Lima y presidente del tribunal eclesiástico, el supuesto abusado jamás acudió el terreno minado con otros 4 curas del Opus aa fecha. El denuciante tampoco quería exponerse socialmente una vez que es padre de familia y tiene hijos. La forma encontrada fue hacer llegar denuncia al Papa directamente y este la creyó verdadera. Prometió al denunciante que tan pronto renunciara Cipriani en diciembre de aquel año por edad, de «enero» no pasaría. Y no pasó. El peruano fue expectorado. Luego, se fue a España y prohibido de volver a Perú (por qué será?) y dar declaraciones públicas. Sigo…

  4. II y final) Cipriani desobedeció y fue a Lima para recibir uma condecoración del alcalde de Lima y Opus, López Aliaga. Cipriani se hizo el loco y su ida a Lima le rindió un segundo comunicado vaticano afirmando que la prohibición no fue levantada.
    El sr. Pedro Salinas o es un creativo inventor que ama una querella en su contra o sabe lo que dice. Dio más detalle sobre el supuesto ocurrido. En el año 1983, Cipriani habría sido director espiritual por 5 meses del muchacho. Dentro del confesionario, habrían ocurrido una serie de abusos sexuales «in creciendo» contra la víctima y vale recordar que no es necesario que haya alguien desnudo para ser abuso. Basta que haya solicitaciones, toqueteos, etc.
    En fin, según Salinas, hasta el Papa conoce la identidad de la víctima.
    Miren que obviamente Cipriani tiene derecho a defensa y a defender su honor. Y miren que del: «no se ha comprobado nada» al no existir víctima hay un abismo. Por hora, sería el Papa, la víctima y Salinas vs Cipriani.

    1. Te quedas muy corto, Rodrigo.

      La evidencia contra Cipriani es apabullante y mucho mayor de lo que relatas.

      Por eso Cipriani no se querella contra El Pais. 60 páginas de pruebas del acoso con amenazas al que sometieron a la víctima para obligarle a callar.

  5. Me viene a la mente el suceso de la casta Susana (Daniel 13) al ver los comentarios de algunos comentaristas y los referentes virtuosos de los acusadores (principalmente los periodistas peruanos y la personificación de la verdad y la honestidad intelectual que es el Pais) . Los perversos y enviciados “jueces“. falsos acusadores de Susana, hubieran triunfado con su mentira y su calumnia y estuvieron a punto de logarlo (no en vano tenían a su favor el “prestigio popular” de hacedores de justicia y hoy diríamos paladines de la libertad de expresión), si Dios no hubiera suscitado un defensor para la víctima de los acusadores, a Daniel, que pidiendo un recto juicio puso de manifiesto la inocencia de Susana y la perversidad de sus acusadores…

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