La actuación del Vaticano en el caso Gaztelueta ha puesto en entredicho no solo su credibilidad en materia de justicia, sino también su respeto por los principios fundamentales del derecho internacional y canónico.
Desde la creación de un tribunal ad hoc hasta la violación del principio de irretroactividad, pasando por una segunda condena a un acusado ya juzgado, la Santa Sede ha incurrido en una serie de irregularidades que hacen tambalear la legitimidad de su decisión.
El caso fue inicialmente cerrado por el Vaticano bajo la supervisión de los cardenales Gerhard Müller y después de Luis Ladaria, quienes consideraron que no existían pruebas suficientes para sostener una condena. Sin embargo, en una decisión sin precedentes, el propio Papa Francisco ordenó la reapertura del proceso en un programa de televisión con el periodista Jordi Évole, creando un tribunal especial exclusivamente para este caso y promulgando una ley específica para poder juzgarlo. Esta decisión no solo pone en duda la imparcialidad de la Santa Sede, sino que también evidencia una instrumentalización de la justicia con fines mediáticos y políticos.
El Vaticano pisoteando derechos fundamentales
El derecho penal establece que nadie puede ser juzgado por normas que no estaban en vigor en el momento de los hechos. Sin embargo, el Vaticano ha ignorado este principio al aplicar retroactivamente una ley creada ex profeso para este proceso. Esta flagrante vulneración de un principio fundamental del derecho internacional demuestra una falta de garantías procesales y abre la puerta a condenas arbitrarias sin seguridad jurídica equiparando al Vaticano a niveles de repúblicas bananeras tercermundistas.
El acusado en el caso Gaztelueta ya había sido juzgado y condenado por la justicia española (porque el juez Marchena no podía revaluar la causa de la prueba por la que fue condenado), que revisó el caso y redujo la pena inicial de 11 años a 2 años de prisión. El principio de non bis in idem (nadie puede ser juzgado dos veces por los mismos hechos) debería haber protegido al acusado de una nueva persecución. No obstante, el Vaticano ha ignorado esta garantía básica y ha sometido al acusado a un nuevo proceso, en clara contradicción con las normas del derecho internacional.
Uno de los episodios más preocupantes en este proceso ha sido la actuación del obispo de Teruel, José Antonio Satué. En una carta dirigida al acusado, el obispo le instó a reconocer los hechos, violando flagrantemente su derecho a la presunción de inocencia. En un Estado de derecho, la carga de la prueba recae en la acusación, y nadie está obligado a autoinculparse. La actitud del prelado refleja una parcialidad inaceptable y una presión indebida que debilita aún más la credibilidad del proceso.
Un juicio en un contexto de persecución al Opus Dei
Es imposible entender la reapertura del caso Gaztelueta sin considerar el contexto más amplio: el Vaticano está llevando a cabo una serie de medidas que afectan directamente al Opus Dei a nivel internacional.
Desde la intervención en Torreciudad hasta la reforma de los Estatutos de la Obra, pasando por la aparición de obras críticas como el libro de Gareth Gore o el documental ‘minuto heroico’, todo apunta a una campaña de debilitamiento de la prelatura. En este sentido, la sentencia contra el acusado de Gaztelueta podría interpretarse como un eslabón más en esta estrategia de presión contra el Opus Dei.
Un detalle significativo de este proceso es que el Vaticano ha juzgado al acusado aplicando los Estatutos del Opus Dei. Esto supone, de facto, un reconocimiento de que los laicos forman parte de la prelatura, en abierta contradicción con la narrativa oficial que ha tratado de desligar a los numerarios y supernumerarios de la estructura eclesial de la Obra. Esta contradicción refuerza la idea de que el proceso contra el acusado de Gaztelueta responde más a una agenda política que a una auténtica búsqueda de justicia.
Un proceso viciado y carente de legitimidad que marca un peligroso camino dentro de la Iglesia
El caso Gaztelueta ha expuesto las graves deficiencias del sistema judicial vaticano y su falta de respeto por los derechos fundamentales. La creación de un tribunal a medida, la aplicación retroactiva de una ley, la vulneración del principio de non bis in idem y la falta de imparcialidad en el proceso han convertido este juicio en una chapuza jurídica que difícilmente puede sostenerse desde el punto de vista del derecho internacional y canónico.
Si el Vaticano pretende mantener su autoridad moral, debería empezar por respetar los principios básicos de la justicia en lugar de instrumentalizarla con fines políticos. De lo contrario, su credibilidad seguirá en caída libre.
Bien sabe Satué que sus trabajos serán recompensados (si da tiempo) bajo este pontificado… ¿quizá con el cardenalato en Barcelona?
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Esta chapuza contra un inocente, define la falta de misericordia y justicia del Papa Francisco y su camarilla.
Oremos para que el nuevo pontífice corrija los abusos de poder de Francisco, Satué y compañía.
Este pederasta fue condenado tres veces: juzgado de 1º instancia, Audiencia Provincial y Tribunal supremo. Como dice uno de sus ídolos, Bukele, soy creyente y creo en el perdón, pero eso es cosa de Dios, aquí en la tierra que pague. Además ni llegó a entrar en prisión.
Eres el de siempre con otro nick???
Yo diría que sí
Lo de la presunción de inocencia y las irregularidades del proceso canónico te lo pasas por el forro. Ya se ve que eres el mismo troll con nick anglosajón
No sé si te gustaría que te aplicaran procedimientos retroactivos en un juicio. Supongo que tampoco te gustaría que rechazarán tus pruebas y a tus abogados.
Ya, ya: es tan culpable que por eso el Tribunal Supremo lo puso en la calle, ¿a que sí? Ante los hechos no caben argumentos.
Es posible que Satué sea recompensado – como otros muchos- por sus fechorías… el y ellos deben saber mejor que nadie
«de qué vale ganar el mundo si pierde su alma»
Las múltiples irregularidades de este proceso, son más propias de un estado totalitario que de la Iglesia. Francisco ha prevaricado en contra del profesor de Gaztelueta, y debemos esperar que prontamente venga un bue pontífice que anule esta infame actuación judicial, y rehabilite a D. José María Martínez que es inocente.
Si al menos tuvieran estudios para desempeñar cargos de tantísima responsabilidad y gravedad. Bergoglio se fue de Alemania sin terminar la tesis para la que le concedieron una beca, Satué tiene una FP, Sánchez falsificó su tesis, su portavoz, Alegría, es diplomada y gracias… ¡En qué manos estamos!
Lo de la presunción de inocencia y las irregularidades del proceso canónico te lo pasas por el forro. Ya se ve que eres el mismo troll con nick anglosajón
Este pederasta fue condenado tres veces: juzgado de 1º instancia, Audiencia Provincial y Tribunal supremo. Como dice uno de sus ídolos, Bukele, soy creyente y creo en el perdón, pero eso es cosa de Dios, aquí en la tierra que pague. Además ni llegó a entrar en prisión.
Ya, ya: es tan culpable que por eso el Tribunal Supremo lo puso en la calle, ¿a que sí? Ante los hechos no caben argumentos.
Ojalá tus hijos reciban lecciones privadas a upa de las piernas de martinez Sanz mientras miran por o grafía que le muestra Sanz y los sadomiza. Que harías tú si te pasa eso ?
Si sigues defendiéndolo a pesar de que abuse d tus hijos, eres un pervertido como martinez Sanz
¿Por qué no contáis que se le ha aplicado artículo 30.1 del Código de Derecho Particular del Opus Dei, que debería haber sido aplicado tras la sentencia civil?
Sensu stricto no es un nuevo proceso sino la aplicación de la norma de su organización, que todavía incluye personas laicas. Al no haber sido aprobados los nuevos estatutos siguen vigentes los anteriores. Es lo que tiene la seguridad jurídica.
El Prelado podía haber aplicado los Estatutos sin necesidad de nuevo juicio. De hecho, la competencia es suya.
¡¡Viva el nuevo arzobispo de Barcelona¡¡
Y cardenal electrocutor ¡Huy, que diga! elector.
Los prevaricadores y sectarios, tendran que dar cuentas a Dios, unos antes que otros.
Se ha jugado con la buena fama de una persona. Es calumnia.
Sr Satue, no creo que pueda dormir tranquilo, o si ?. Y el otro tambien ?
La jerarquía progresista retrocedió la historia del derecho a edad de piedra.
El artículo es muy claro. Lo que han hecho es una atrocidad jurídica.
Discurso de Francisco al Pontificio Consejo para los Textos Legislativos. Viernes, 21 de febrero de 2020.
Dar a conocer y aplicar las leyes de la Iglesia no es una traba para la presunta «eficacia» pastoral de quienes quieren resolver los problemas sin el derecho; al contrario, es la garantía de la búsqueda de soluciones no arbitrarias, sino verdaderamente justas y, por tanto, verdaderamente pastorales. Evitando soluciones arbitrarias, el derecho se convierte en un baluarte válido en defensa de los últimos y de los pobres, en un escudo protector para aquellos que corren el riesgo de ser víctimas de los poderosos de turno. Lo vemos hoy; vemos cómo en este contexto de guerra mundial a trozos, siempre hay una ausencia del derecho, siempre. Las dictaduras nacen y crecen sin el derecho. En la Iglesia no puede pasar eso.
Es evidente que le han escrito el discurso. Como también es evidente que no comulga con su escribano, porque él hace justo lo contrario (las cotas de arbitrariedad e inseguridad jurídica alcanzadas durante este pontificado son inéditas, jamás vistas).
Espero que la víctima (el profesor) mantenga vivo el asunto y llegue judicialmente hasta donde pueda. Supongo que amigos no le van a faltar. Pero debería exigir reparación civil, y lo que corresponda penalmente, a Sauté y al resto de impresentables (si hay que incluir a Francisco, se le incluye). Menuda gentuza se ha congregado en este asunto apestoso.
Este pederasta fue condenado tres veces: juzgado de 1º instancia, Audiencia Provincial y Tribunal supremo. Como dice uno de sus ídolos, Bukele, soy creyente y creo en el perdón, pero eso es cosa de Dios, aquí en la tierra que pague. Además ni llegó a entrar en prisión.
Ya, ya: es tan culpable que por eso el Tribunal Supremo lo puso en la calle, ¿a que sí? Ante los hechos no caben argumentos.
Condenado por el juzgado de 1ª instancia, la Audiencia Provincial y el Supremo: PEDERASTA!!!!
Ya, ya: es tan culpable que por eso el Tribunal Supremo lo puso en la calle, ¿a que sí? Ante los hechos no caben argumentos.
Seguimos defendiendo al numerario pederasta condenado en firme. Un criminal.
Ya, ya: es tan culpable que por eso el Tribunal Supremo lo puso en la calle, ¿a que sí? Ante los hechos no caben argumentos.
Me hago una pregunta : Ocariz no cumplió con el mandato del Vaticano que se l impuso de expulsar al pederasta del opus dei , porque ?
Acaso no admite a la iglesia católica como lo que es , matriarca apostólica Romana y su código de derecho canónico ? Se cree que el es el único que forma la iglesia católica ?
Esto de no expulsar al pederasta es para hacerle un juicio por no cumplimiento de funciones y mandatos y no obedecer al papa