La Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP) suspendió la 24ª edición del Festival Saliendo de la Caja, un evento organizado por la Especialidad de Creación y Producción Escénica de la Facultad de Artes Escénicas.
Esta decisión se tomó tras la polémica generada por la obra teatral ‘María Maricón’, cuya promoción fue cuestionada por el uso de símbolos religiosos.
El festival, que habitualmente sirve como espacio para que los estudiantes presenten sus proyectos finales, fue cancelado debido a las críticas recibidas. En un comunicado oficial, la universidad expresó su rechazo al «uso inapropiado de símbolos religiosos» y ofreció disculpas a la comunidad, reafirmando su compromiso con los principios éticos y católicos que definen su identidad.
La PUCP aseguró que se tomarán medidas para prevenir situaciones similares en el futuro y reiteró su compromiso con los valores institucionales, destacando la importancia de una comunidad plural que respete los principios democráticos y religiosos.
Críticas de la Conferencia Episcopal y del Ministerio de Cultura
La Conferencia Episcopal Peruana expresó su rechazo hacia la obra, calificándola como una ofensa a la fe católica y criticando su promoción. Según el organismo, la publicidad y el contenido de la obra distorsionan símbolos religiosos profundamente arraigados en la tradición y devoción católica del país.
Por otro lado, la Conferencia Episcopal Peruana señala que si bien defiende la libertad de expresión considera que «no es un derecho absoluto y tiene límites, sobre todo cuando riñen con otros derechos como la libertad religiosa, la fecha y la devoción del pueblo peruano».
La polémica ha sido de tal calibre que hasta el Ministerio de Cultura también se pronunció, cuestionando el uso de imágenes religiosas en la obra y anunciando la evaluación de medidas correctivas. En su declaración, destacaron la importancia de respetar los símbolos religiosos como parte del patrimonio cultural del Perú y enfatizaron que la libertad de expresión tiene límites, especialmente cuando entra en conflicto con otros derechos fundamentales.
Quien también levantó la voz en señal de protesta fue el alcalde de Lima, Rafael López Aliaga quien no dudó en calificar esa obra de «porquería». Además, afirmó que “esto es un insulto a la Iglesia Católica y a los millones de católicos en el Perú y el mundo: ¿qué de católica tiene esa universidad? ¿Solo el nombre? Deberían quitárselo y llamarse de otra manera… esto es el colmo», escribió en su cuenta de ‘X’.
Como siempre ocurre en estos casos, tras la polémica desatada llega el momento en donde el autor aprovecha para justificarse y hacerse la víctima por su condición de homosexual. El autor de esta bazofia de obra justificó que «uso a las vírgenes y santas de las cuales he sido o soy devoto, y les tengo gran cariño y admiración para que me sostengan escénicamente y poder contar mis vivencias como homosexual en una Lima machista donde me han discriminado varias veces».
Aunque la Universidad Católica Pontificia de Perú haya cancelado esta obra blasfema, no deja de sorprender que durante algunas horas formara parte del programa oficial y que fuese amparada por esta Universidad de corte católica.
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¿Que les enseñan en esta Universidad? Es escandaloso que de escuelas y universidades supuestamente catolicas, surgan estos degenerados.
Sin irse tan lejos, los alumnos de la Facultad de Comunicación y Relaciones Internacionales de la Universidad Blanquerna (sí, la que es del arzobispado de Barcelona y está detrás de la demolición de la parroquia del Espíritu Santo para aprovechar el solar, y su rector actual pertenecía a esa Facultad) pergeñaron para el Festival de Cine de Sitges 2018 un homenaje a la actriz Traci Lords, y no fue una iniciativa particular de los alumnos, sino institucional avalada con el sello de la universidad. Para los que no sepan quién es, comento que fue una actriz porno muy famosa en los 70 entre otras cosas porque prácticamente todas sus películas pornográficas las rodó siendo menor de edad: fue un caso muy sonado porque se ve que el productor no lo sabía y se le cayó el pelo. Posteriormente se metió en el cine de serie B o Z porque, la verdad, sus dotes dramáticas no dan para más.
las webs católicas han evitado repetir las imágenes blasfemas, aunque han denunciado el hecho. Aquí no les importa mucho la ofensa a Dios y a la Virgen, por lo que veo, qué triste.
Blasfemar es reirse con ánimo de rediculizar y ofender. Eso es lo que han hecho (lo que, por supuesto el Santo Padre condena)
«las webs católicas…»
Ah, ¿esta vez ya no son «webs cristianas»? Como con las católicas no se identifica, bien puede tomar distancia, claro. Pero deje de fingir con ese descarado ejercicio de cinismo: a ver cuándo se queja por la no retractación de la afirmación de que la Virgen no nació santa, frase no sólo blasfema, sino herética y bastante más grave que una imagen, que además aquí se pone para mostrar cómo se las gastan sus autores y quienes les amparan. Y una imagen vale más que mil palabras. Así que ahórrese su hipócrita rasgado de vestiduras para matar a la paloma mensajera, que ya le conocemos, troll repelente. Además, Francisco dice que los autores de esa imagen pueden reírse de Dios y de la Virgen, pero ojo con ofender a los pobres.
Fred, estaba pensando exactamente igual que usted.
El arzobispo, cardenal Matasuegras, seguro que estaba encantado con la obra
¿Y qué hay que hacer, callar? Y por cierto, ¿por qué se indigna por las protestas de otros y usted practica lo contrario a lo que dice molestarle?
«Infowc» ¿Cree que esa expresión no nos molesta a otros? Si no le gusta el medio, no lo lea, como hacemos muchos con otros medios que no nos gustan. Pero sentido común y coherencia son unas «rara avis».
«Hipócritas, sabéis juzgar del aspecto de la tierra y el cielo; ¿pues cómo no juzgáis del tiempo presente? ¿Por qué no juzgáis por vosotros mismos de que es justo?»
(Lucas 12, 56-57)
Bla, bla, bla, bla…
CDC, canon 369: «Quien, en un espectáculo o reunión públicos, en un escrito divulgado, o de cualquier otro modo por los medios de comunicación
social, profiere una blasfemia, atenta gravemente contra las buenas
costumbres, injuria la religión o la Iglesia o suscita odio o desprecio
contra ellas debe ser castigado con una pena justa».
Ojito con decir algo del h er e je mayor del reino que te cortan las criadillas, pero de Cristo y su Santísima Madre lo que sea.
«La justicia de enero es muy rigurosa, pero la de febrero ya es otra cosa».
¿Universidad Católica y sensible católico?
Desagravio público, 5.000 rosarios, y un mes a pan y agua y cilicio en salva sea la parte.
¡Nada!
Saldrá la conferencia episcopal y, muy enérgicamente, dirá: «¡Jolín, cáspita, canastos… no seáis chicos malos, que os castigará Jesusito con un cuchillo de chocolate. Y, tú, artistazo, ven que te hagamos acompañamiento.
Lamentablemente, creo que sucedera como usted dice, «Quién como Dios»… Pero estoy recordando las palabras de Nuestro Señor Jesucristo, aludiendo a quienes escandalizan: «Mejor sería que les ataran al cuello una piedra de molino y los arrojaran al mar…». El pueblo humilde peruano es profundamente religioso y mariano. Imagino cómo se habrán escandalizado los que vieron este cartel burlándose de Nuestra Señora.
«La PUCP aseguró que se tomarán medidas para prevenir situaciones similares en el futuro y reiteró su compromiso con los valores institucionales, destacando la importancia de una comunidad plural que respete los principios democráticos y religiosos.»
Y bien, me gustaría saber si expulsarán a alguien, o basta con que los lobos «estén muy tristes» por no haber completado la fechoría, pero sigan «disimulando» y esperando un tiempo más propicio.
Lo de «comunidad plural», ya sabemos de qué va también.
Recordemos que el Gran Canciller de la PUCP es Monseñor Carlos Castillo Mattasoglio, Arzobispo de Lima y Primado del Perú, quien sucedió al gran Juan Luis Cipriani. Castillo es conocido por sus vínculos y cercanía con la teología de la liberación y con el Partido Comunista Revolucionario y el grupo terrorista Sendero Luminoso. Fue suspendido como profesor de teología de la PUCP por el entonces arzobispo Cipriani, por sus comentarios ofensivos hacia la jerarquía eclesiástica; como respuesta a su suspensión, acaudilló una revuelta contra Cipriani, y, a pesar de su condición de sacerdote de la diócesis de Lima, se negó a obedecer a su obispo y a asumir responsabilidades pastorales. Como nuevo arzobispo de Lima, se ha dedicado básicamene a desmantelar todo el buen trabajo realizado por Cipriani. Como recompensa, fue nombrado cardenal.
¿ Porqué siempre tienen que meterse con Cristo ó la virgen?, ¿ porqué siempre tienen que atacar al cristianismo?, si defienden el multiculturalismo religioso que también se metan con otras religiones, pero claro hay tanta malaleche y cobardía que reconocen que es la única religión la cristiana que por eso se meten con ella.