En un contexto donde la confusión doctrinal y la apertura a prácticas ajenas a la tradición católica parecen ganar terreno, las declaraciones del cardenal Leonardo Steiner en el Sínodo han generado preocupación en los sectores fieles a la doctrina perenne de la Iglesia.
Durante una intervención, Steiner afirmó que “muchas de nuestras mujeres son verdaderas ‘diaconisas’”, sugiriendo que la Iglesia debe considerar la posibilidad de formalizar este papel. Esta propuesta no es nueva, pero sí es un claro ejemplo de la deriva que muchos obispos y cardenales parecen estar promoviendo, alejándose de la tradición apostólica y del magisterio constante de la Iglesia.
La Tradición en peligro
Desde sus inicios, la Iglesia ha dejado claro que los ministerios ordenados, como el diaconado, están reservados a los hombres, siguiendo el ejemplo de Cristo y los apóstoles. La insistencia en abrir el debate sobre las diaconisas no es más que un intento de modernizar la fe, cediendo a las presiones de grupos progresistas que buscan transformar la estructura eclesial en algo que se asemeje más a las comunidades protestantes que a la Iglesia fundada por Cristo.
El Cardenal Steiner, conocido por sus posturas cercanas a la teología de la liberación y su apoyo a las reformas radicales en la región amazónica, vuelve a poner en peligro la fidelidad a la enseñanza constante de la Iglesia. Esta propuesta, aunque disfrazada de “reconocimiento” al trabajo de las mujeres en las comunidades, representa una amenaza real a la integridad de la doctrina católica.
El riesgo de romper la Comunión
No podemos olvidar que en la Iglesia católica, la sinodalidad no es sinónimo de democracia. La verdad no se decide por consenso, y la Iglesia no puede ceder ante las presiones del mundo secular que buscan moldear sus enseñanzas. Propuestas como las del Cardenal Steiner, lejos de fortalecer la comunión, siembran división y confusión entre los fieles.
Algunos obispos y cardenales han expresado su rechazo a este tipo de propuestas, defendiendo que la única manera de mantener la unidad en la Iglesia es siendo fieles a la enseñanza de Cristo y los apóstoles. En un tiempo donde la apostasía y la secularización avanzan en Occidente, la Iglesia no puede permitirse el lujo de adaptarse al mundo. La Iglesia debe ser luz en la oscuridad, y no oscurecer la luz de la verdad.
La respuesta católica
Es necesario que los católicos se mantengan alerta y fieles a la tradición. Las palabras del Cardenal Steiner son un recordatorio de que la batalla por la verdad y la fidelidad a Cristo sigue vigente. Los fieles deben rezar por la conversión de aquellos pastores que, alejados de la doctrina, buscan transformar la Iglesia en algo que no es.
InfoVaticana seguirá informando y denunciando este tipo de propuestas que, lejos de unir, dividen a la Iglesia de Cristo y confunden a los fieles.
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Nunca jamás habrán diaconisas como orden sacramental ni ministerial. Jamás.
Las mujeres diaconisas que habla el Nuevo testamento eran simplemente servidoras eclesiales de otras mujeres, niños, ancianos, enfermos, invalidos y de los pobres y necesitados, o sea una pastoral parroquial y diocesana de servicio personal al que necesita obras de misericordia corporal.
Etimología griega:
-δι- (di-), «a través de»
– κονέω (koneo), verbo, «moverse» o «seguir».
Originalmente es alguien que «sirve», especialmente en la mesa, o que actuaba como asistente o mensajero.
Como puede verse, tiene un trasfondo social de servicio personal a necesidades básicas y asistenciales (comunicación de mensajes y transporte de pequeños objetos) en textos de la época clásica, como en las obras de Platón o Aristóteles.
Los primeros siete diáconos servían en la mesa de los pobres.
Antiguamente el «Orden ministerial» incluía obispos, sacerdotes y diáconos, sin embargo, desde el Motu Proprio d Benedicto XVI «Omnium in mente» (de fecha 26 de Octubre de 2009) ya no es así, el orden ministerial «en nombre de Cristo» ha quedado reducido sólo a los estados episcopal y presbiteral, mientras que los diáconos ya no forman parte del «orden ministerial» sino de un simple «orden servicial», ergo, nada impide que pueda haber diaconisas, pues el diaconado ha quedado excluido del orden ministerial, la nueva redacción dada al canon 1009.3 del Codigo Derecho Canónico (por esta reforma de Benedicto XVI) queda así:
Canon 1009.3.- «Aquellos que han sido constituidos en el orden del episcopado o del presbiterado reciben la misión y la facultad de actuar en la persona de Cristo Cabeza; los diáconos, en cambio, son habilitados para servir al pueblo de Dios en la diaconía de la liturgia, de la palabra y de la caridad».
¡y ha sido Benedicto XVI el que lo va a permitir!
No podía faltar el toque de calor de Benedicto al caldero de cocción de la rana.
No mal interprete , el Papa Benedicto XVI nunca estaba pensando en diaconizas ni sacerdotizas .
Hay que conocer bien a Benedicto XVI el jamas aprobarìa algo asi .
Es mas hasta ahora solo existen dos diaconados uno para hombres que van a ser sacerdotes y otro que incluye hombres solteros y casados . Para cada caso existen ciertas condiciones .
Hay que investigar mas sobre estos sacramentos .
Lo que si es cierto es que las mujeres no necesitan ser sacerdotes para ser valoradas en la iglesia . Siempre han estado alli en la iglesia ayudando , sirviendo , y sobre todo educando y formando buenos cristianos .
Lamento decirte que tús palabras son vacías y sin ningún valor. Consuélate pensando que las cosas sean a tu gusto, pero debes aceptar que esas interpretaciones antojadizas, machistas y excluyentes ya no valen un pepino.
Kiko. Al igual que tus idioteces.
Muy bien Infovaticana , por informarnos y hacernos ver por cuales Cardenales hay que orar por su conversión.
Todos los laicos nos unimos a ser apostoles de la buena doctrina de la iglesia , de mantenernos firmes en nuestra fe.
Las mujeres realmente entregadas a la iglesia no andan en busca de reconocimiento , si no veamos el bello ejemplo de nuestro tiempo de Madre Teresa de Calcuta.
Si tanto habla ese hombre de reconocimiento por que ya no se menciona en la santa misa a las primeras martires del cristianismo , para que veamos que las mujeres siempre hemos sido valoradas por nuestra fe , me refiero a Cecilia , Agueda, Felicia , Anastacia etc ..
despues del Vaticano II ya ni se les nombra y ahora esos mismos curitas liberales vienen a darse golpe de pecho por las diaconizas, hipocritas solo quieren destruir la iglesia y dejar entrar la ideologìa de las feministas.
Mejor que canonizan a Mama Margarita , madre de San Juan Bosco por educar a un gran Santo. Asi a otras santas mujeres.
Youtube, canal Macabeo, puso un video de mujeres en una iglesia haciendo las «lecturas» y luego repartiendo la comunión (era de esas cada vez más parroquias donde «el cura no puede ir» y deja allí las hostias consagradas para que las reparta el «ministro/a» extraordinario, o sea, cualquiera).
Es decir, ya hay mujeres haciendo de «diaconisas», porque eso es lo que están haciendo esas, digamos que sin vestimenta de «diaconisa», pero sería lo único que le faltaría por hacer… «revestirse» de «diaconisa» y sacar algún «título» o «permiso» que las acredite como tales pero hacer, hacen ya lo que no deberían haber hecho nunca, plantar sus manos en las hostias consagradas, ni en el Sagrario, ni estar en el altar…
En fin.. .
Estimada, Aliseya.
Ojalá fuera de grave como usted lo pinta. Es mucho peor.
Trento habla de las órdenes del sacerdocio: “Sesión XXIII, EL SACRAMENTO DEL ORDEN, Capítulo II. De las siete Ordenes”. De hecho, establece en el canon II: “Si alguno dijere, que no hay en la Iglesia católica, además del sacerdocio, otras órdenes mayores, y menores, por las cuales, como por ciertos grados, se ascienda al sacerdocio; sea excomulgado”.
Decreta a su vez: “si no hubiese a mano clérigos celibatos para ejercer los ministerios de las cuatro órdenes menores; podrán suplir por ellos, aun casados de buena vida, con tal que no sean bígamos, y sean capaces de ejercer dichos ministerios; debiendo también llevar en la iglesia hábitos clericales, y estar tonsurados”.
El Primer Sínodo Diocesano de Roma (1960), cuyas conclusiones fueron solemnemente expuestas por Juan XXIII, prohibía a las mujeres…
Continúa…
… como siempre hizo la Iglesia, el acceso al presbiterio (así sigue en la Iglesia Ortodoxa).
Pero… he aquí que llegó Montini (¡No podía ser otro!) y en el “Motu proprio “Ministerio Quaedam”, establece: “En adelante no se confiere ya la primera Tonsura. La incorporación al estado clerical queda vinculada al Diaconado… Las que hasta ahora se conocían con el nombre de «Ordenes menores», se llamarán en adelante «Ministerios». Los ministerios pueden ser confiados a seglares, de modo que no se consideren como algo reservado a los candidatos al sacramento del Orden”.
No quedó ahí la cosa: “Los ministerios que deben ser mantenidos en toda la Iglesia Latina, adaptándolos a las necesidades actuales, son dos, a saber: el de Lector y el de Acólito. Las funciones desempeñadas hasta ahora por el Subdiácono, quedan confiadas al Lector y al Acólito…
Continúa…
… deja de existir por tanto en la Iglesia Latina el Orden mayor del Subdiaconado. No obsta sin embargo el que, en algunos sitios, a juicio de las Conferencias Episcopales, el Acólito pueda ser llamado también Subdiácono”.
¡Ojo a la jugada! ¡Las funciones de una orden mayor del sacerdocio pasan a simples seglares!
No obstante (a la rana hay que hervirla poco a poco para que no salte fuera del agua), dice: “La institución de Lector y de Acólito, según la venerable tradición de la Iglesia, se reserva a los varones”.
La realidad fue que las mujeres hacían de lectoras cuando les parecía (en la Misa de JPII en Papúa Nueva Guinea, con las tetas al aire).
Las consecuencias: “[155] Además de los ministros ordinarios, está el acólito instituido ritualmente, que por la institución es ministro extraordinario de la sagrada Comunión, incluso fuera de la celebración de la Misa” (Redemptiones Sacramentun”, 25/03/2004).
Continúa…
También: “En ausencia del diácono, el acólito ritualmente instituido lleva los vasos sagrados a credencia y allí los purifica los seca y los arregla del modo acostumbrado” (esto era función del subdiácono).
Estoy harto de ver al monaguillo purificar sobre el altar mientras el cura sentado se toca los bemoles, así como sacar y regresar el Santísimo al Sagrario, etc.
Finalmente, al haber admitido Bergoglio a ambos ministerios a las mujeres (“Carta apostólica en forma de “motu proprio” “Spiritus Domini”( 11/01/2021):
¡LA RANA ESTÁ HERVIDA!
Dónde digo, aveces, sacerdocio entiéndase «orden sacerdotal».
🤦 a veces
Estimada Aliseya
Si exactamente existen los ministros y ministras extraordinarios de la misa. Es por eso que usted va observar que hay laicos ya sea hombres o mujeres que pueden hacer por ejemplo en lugares donde no hay misa ni sacerdote » la celebracion de la
palabra » que consiste que un ministro sigue todo el rito de la misa con las lecturas y una reflexion , sin consagracion , luego pasan a distribuir las sagradas comunion a los fieles presentes y luego una oracion final.
Los ministros de eucaristìa tambien pueden llevar la comunion a los enfermos y no necesitan usar las vestiduras del sacerdote pero si una vestimenta digna tanto laicos como laicas casados o solteros.
Se puede consultar con el sacerdote cuales son los requerimientos y me parece que hay unos cursos para poder hacer este ministerio de LAICOS .
Toda esa corriente de estilo amazónico al que pertenece este ente de origen alemán, siguen una voz de orden: podrir por dentro la Iglesia.
Sea con el estilo demagógico comunista de la teología de la liberación,
Sea por empoderar a un sector humano manipulable aduciendose defensores del sector femenino de la humanidad
Sea por la lucha de clases formulada por la corriente lgtbista
Cualquier cosa que inventen, NO ES IGLESIA. Son herejes contumaces como el obeso postulante al cajón de la ignominia (que ni los gusanos aceptarán cuando llegue al cementerio) y que ocupa una silla de destaque en el Vaticano.
Estoy de acuerdo con usted , sobre todo lo de esa corriente Amazonica por que eso es lo queces solo una corriente una excusa más bien buscan una excusa a falta de argumentos . Ellos quieren protestantizar la iglesia catolica equipararla con la protestante . Por eso debemos tener mucho cuidado con todo el liberalismo , la manipulacion y la presion que nos viene
de Alemania .
Qué es eso de “ nuestras mujeres”?, me choca. Yo nunca oigo o leo sobre “nuestros hombres”.
Señor Jesús, tu Palabra está comprometida: «las puertas del infierno no podrán derrotarla». Mt. 16, 16ss. Francisco te contradice: Amoris Leatitia, permite que los divorciados vueltos a casar pueden cometer el sacrilegio de comulgar; Fiducia Supplicans, permite bendiciones a parejas homosexuales; tu dijiste que eras «el camino» y que «nadie va al Padre sino es por mí» y Francisco dice que todas las religiones son «un camino» para ir a Dios; y te contradice en tantas cosas, también con estos sínodos, pues estableciste una Iglesia Jerárquica y quieren democracia; estos Cardenales y obispos ahora llamados «progresistas» y patrocinados por Francisco, le han hecho daño inmenso al Depósito de la Fe, en lugar de conversarlo, custodiarlo, como un conservador de un museo conserva intactas sus piezas valiosas, es un conservador, así deben igual todo miembro de la Iglesia ser conservador, nunca cambiarte para complacer al mundo; Francisco te contradice tanto que piensa en un «infierno vacío» y Tú
«Amoris Leatitia, permite que los divorciados vueltos a casar pueden cometer el sacrilegio de comulgar».
Espero no crearle un trauma, pero su amado Benedicto, durante los funerales de JPII el 8 de abril de 2005, cometió el sacrilegio de dar públicamente la Comunión a un hereje protestante, el pastor calvinista Roger Schutz, más conocido como el hermano Roger de Taize, por ser el fundador de la Comunidad Taize. Según declaraciones del cardenal Walter Kasper JPII lo hizo también varias veces.
En cuanto a la comunión a los divorciados, siento aumentar su trauma, pero el primero en proponerlo fue Ratzinger en un ensayo:»Ehe und Ehescheidung: Diskussion unter Christen [Marriage and Divorce: A Discussion between Christians]», (Editor Franz Henrich y Volker Eid, publicado en Munich en 1972 por Kösel-Verlag).
El Papa Benedicto XVI tambien hablo que hay muchos cados de matrimonios nulos y la iglesia en algunas excepciones y despues de un estudio permite la anulacion
de algunos matrimonios y pueden volver a casarce.
Hay que conocer quien es el Papa Benedicto XVI . Y no sacar cosas de contexto.
Francisco te contradice tanto que piensa en un «infierno vacío» y Tú, categóricamente afirmaste que hay infierno eterno y no vacío como dice Francisco; Señor Jesucristo, sabemos que siempre has tenido enemigos y que los derrotas, pues Tu vences siempre; Señor, manifiesta tu Poder y ya has comprender por qué hiciste que el Papa Benedicto XVI construyera su renuncia inválida, para que tu Palabra nunca cayera al vacío con Francisco. Actúa Señor, más hazlo ya. Te lo suplico desde lo más íntimo de mi alma. Amén. ¡Ven Señor Jesús!
Las mujeres realmente entregadas a la iglesia no andan en busca de reconocimiento , si no veamos el bello ejemplo de nuestro tiempo de Madre Teresa de Calcuta.
Si tanto habla ese hombre de reconocimiento por que ya no se menciona en la santa misa a las primeras martires del cristianismo , para que veamos que las mujeres siempre hemos sido valoradas por nuestra fe , me refiero a Cecilia , Agueda, Felicia , Anastacia etc …… despues de esa reforma del Vaticano II ya ni se les nombra y ahora esos mismos liberales vienen a darse golpe de pecho por las diaconizas. Cuanta hipocrecia , solo quieren destruir la iglesia y dejar entrar ideologìas feministas.
Mejor que busquen canonizar a Mama Margarita , madre de San Juan Bosco por educar a un gran Santo.
Febe nombrada por San Pablo en Romanos es algo más que una mera sirvienta. Aparece calificada como “diákono” apelativo que el apóstol también utiliza para referirse a Timoteo, y además, como “prostatis” algo parecido a “patrona”.
Estudios recientes demuestran que en las comunidades cristianas primitivas proporcionalmente el número de mujeres era muy superior al de hombres, algo nada extraño, porque la sociedad pagana era brutal con las mujeres y en el seno de la Iglesia se sentían protegidas, por tanto, es factible que ejercieran liderazgo, presidiendo asambleas o incluso que partieran el pan.
Como ya le contesté en otra ocasión: «El que no puede lo menos tampoco puede lo más».
Si San Pablo ordena expresamente que las mujeres en la iglesia estén calladas y que si quieren saber algo pregunten a sus maridos en casa, añadiendo que lo que dice es mandato del Señor, ¿cómo va a permitir que sean diáconas?
Entonces porque denomina a Febe diacono al igual que a Timoteo?
Y estamos hablando del año 55, si todos sabemos que el el siglo II se denominaba diaconisas a las mujeres que velaban por el pudor de las bautizadas desnudas y realizaban trabajos serviles.
Eso ultimo que usted dice es una suposicion una interpretacion subjetiva suya , no un hecho comprobado.
No confundamos peras con manzanas .
Si en un momento dado las mujetes fueton servidoras del bautismo para cuidar el pudor de otras eso se descontinuo al cambiar la forma y hasta la vez no se ha dado . El sentido de ese servicio difería del diaconado de otros discipulos .
Todos hombres y mujeres somos sacerdotes y sacerdotas desde el bautizo, pero no tenenos el sacerdocio ministerial.
Es por ese sacerdocio del bautizo que podemos hombres y mujeres por ejemplo bendecir la mesa o la comida, bendecir al hermano o a nuestros propios hijos , orar por los enfermos etc etc .
Todos los bautizados hombres o mujeres podemos en casos especiales bautizar a otro en el Nombre del Padre , del Hijo y del Espiritu Santo. Se considera importante un testigo en estos casos que viene a ser el padrino .
La iglesia no necesita sacerdotizas , ni diaconizas. La iglesia inicio con pocos apostoles.