Una mujer cristiana de 40 años, Shagufta Kiran, ha sido condenada a la pena capital en Pakistán por presuntamente haber reenviado un mensaje en redes sociales que denigraba al profeta Mahoma.
Su abogado informó que el tribunal también impuso una multa de 300.000 rupias (alrededor de 1.000 dólares) tras un juicio que se extendió por tres años.
La sentencia se dictó bajo la Ley de Prevención de Delitos Electrónicos (PECA), y el caso fue inicialmente tratado por un tribunal especial en Islamabad. Según la defensa, Kiran no era la autora del mensaje en cuestión, sino que lo reenvió sin haberlo leído previamente en una sala de chat. A pesar de ello, el juez decidió imponer la pena de muerte.
Shagufta Kiran, casada y madre de cuatro hijos, fue detenida por la Agencia Federal de Investigación (FIA) el 29 de julio de 2021, acusada de compartir contenido considerado blasfemo en un grupo de WhatsApp en septiembre de 2020. Desde entonces, se encuentra en la prisión central de Adyalaa, en Rawalpindi, donde permanecerá hasta la ejecución de la sentencia.
El abogado de Kiran ha anunciado su intención de apelar la decisión ante el Tribunal Superior de Islamabad, que será la siguiente instancia judicial. Según declaraciones del letrado a la agencia Fides, «la persona que realmente escribió el mensaje ofensivo sigue en libertad», mientras que su clienta, quien únicamente reenvió el mensaje sin tener intención de difundir contenido ofensivo, ha sido condenada. El defensor afirma que su clienta ha sido acusada debido a su fe cristiana, lo que la convierte en un «blanco fácil y vulnerable» dentro del sistema judicial.
Intensificación de la vigilancia en Internet
Las autoridades paquistaníes han intensificado la supervisión de declaraciones presuntamente blasfemas en plataformas digitales y redes sociales, a las que diversas organizaciones islámicas consideran una amenaza creciente que debe ser sancionada con severidad. La División de Delitos Cibernéticos de la Agencia Federal de Investigaciones es la encargada de identificar y denunciar ante la policía a quienes publiquen o compartan contenido que sea clasificado como blasfemo en Internet.
Tras un ataque terrorista perpetrado en Peshawar en 2014 por extremistas islamistas, Pakistán levantó una moratoria que mantenía sobre la pena de muerte. Desde entonces, se han reanudado las ejecuciones, aunque hasta ahora ningún cristiano ha sido ejecutado por cargos de blasfemia. Sin embargo, los cristianos viven en constante riesgo, ya que los fanáticos islamistas suelen recurrir al linchamiento para castigar este tipo de actos.
La Iglesia Católica en Pakistán ha señalado en múltiples ocasiones los peligros inherentes a las leyes de blasfemia, advirtiendo que estas normativas pueden ser mal utilizadas para resolver disputas personales o atacar a minorías religiosas.
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Que nuestro Dios Todopoderoso ayude a esta señora y la rescate de esa sentencia. Que la diplomacia en el Vaticano intervengan en el rescate de esta señora .
La meta es el cielo,
Esto debería ser la primera noticia en los mass media.
No lo es, porque son anticristianos
Pero sí,» todas las religiones llevan a Dios»…