En una anticipación especial para nuestros lectores de InfoVaticana, les ofrecemos un resumen de la entrevista exclusiva con Monseñor Jesús Sanz, arzobispo de Oviedo, cuya publicación en dos partes está programada para la próxima semana.
En esta profunda conversación, Monseñor Sanz aborda una amplia gama de temas que son de crucial importancia para la comunidad eclesiástica y la sociedad en general.
Durante la entrevista, el arzobispo franciscano reflexiona sobre su reciente reelección para un tercer mandato en la Comisión Ejecutiva de la Conferencia Episcopal Española. Habla abiertamente sobre la dinámica interna de la CEE y su papel en la configuración de la agenda eclesiástica, especialmente en temas de sinodalidad y el tratamiento de la pederastia dentro de la Iglesia. Destaca los esfuerzos continuos de la Iglesia para abordar estas cuestiones de manera transparente y justa, enfatizando la importancia de la prevención y la educación. Además, Sanz Montes ha vuelto a dejar claro que Fiducia supplicans es un documento confuso.
El arzobispo también se moja sobre las recientes auditorías e informes, como el realizado por el despacho Cremades y el del Defensor del Pueblo, que han generado tanto interés como controversia. Explica las complejidades de estos procesos y defiende la integridad con la que la Iglesia ha respondido a las acusaciones y a los desafíos procedimentales que han surgido.
Uno de los temas más sensibles que aborda es la inmigración, un tema candente en la política española actual. Monseñor Sanz comparte su perspectiva sobre la propuesta de regularizar a 500.000 inmigrantes ilegales, enfocando en la necesidad de una política equilibrada que respete la dignidad humana sin comprometer la seguridad y el bienestar social.
Además, la entrevista toca puntos críticos como el cambio climático y la Agenda 2030. El prelado reivindica la necesidad de centrarse en el Evangelio y los sacramentos como los verdaderos cimientos de la vida cristiana.
Monseñor Sanz tampoco oculta su preocupación por la situación política que atraviesa España. También ha salido en defensa de los monjes benedictinos del Valle de los Caídos y lamenta que el Gobierno hará lo posible por expulsarles.
Esta entrevista es un testimonio del liderazgo pensativo y la dedicación pastoral de Monseñor Sanz. Le invitamos a leer la entrevista completa la próxima semana en InfoVaticana, donde estos temas y otros serán explorados en detalle, ofreciendo una perspectiva esclarecedora sobre las preocupaciones actuales y el futuro de la Iglesia y la sociedad española.
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Don Jesús Sanz es un buen obispo, por lo que es previsible que su entrevista será brillante. Habrá que leerla la semana que viene, y seguro que nuestros comentarios serán laudatorios.
Es de agradecer que haya obispos fieles que den a entender que no existe cambio climático, que la Agenda 2030 promueve un reinicio para construir un nuevo orden mundial anticatólico, que las conductas lgtbi son éticamente inadmisibles, que la inmigración masiva musulmana es una invasión que atenta contra nuestra integridad, que Fiducia Supplicans contiene graves errores, etc.
Monseñor Jesús, gracias de corazón por defender la unidad de España, la integridad de la Fe de toda la patulea que intenta transformarla y modificarla a su antojo, y por apelar al sentido común ante esta nauseabunda agenda globalista.
Le tenemos muy presente en nuestras oraciones y rogamos por usted, para que Nuestro Señor le proteja de todo mal, especialmente de los lobos disfrazados de oveja dentro de la Iglesia Católica.
El arzobispo de Oviedo es uno de los mejores mitrados de toda España. Su entrevista será luz enmedio de las tinieblas que asolan parte de la Iglesia.
Es falso que la jerarquía eclesiástica haya respondido con «integridad» al problema de los abusos en el clero. Todavía hoy, tras las amplias investigaciones realizadas, quedan muchos casos por esclarecer, víctimas que reparar, verdades que reconocer. La actitud general de la jerarquía eclesiástica ha sido primero la negación, luego los intentos de ocultamiento y en otros casos el encubrimiento, el cambio de lugar del trabajo de los victimarios y desde luego que queda mucho por reparar en el daño a las víctimas, tanto en lo psicológico como en lo espiritual y en lo económico. De manera que la actitud de monseñor Sanz deja mucho que desear.
Monseñor Sanz Montes es un verdadero pastor de la Iglesia Católica y un patriota ejemplar .
Estoy deseando leer la entrevista.