El arzobispo de San Francisco, monseñor Salvatore Cordileone, ha escrito un artículo publicado en First Things en donde habla de los mártires del comunismo.
Monseñor Cordileone comienza su artículo recordando al obispo Rolando Álvarez (actualmente exiliado en Roma) y a quien define como «héroe de los derechos humanos de Nicaragua». El arzobispo de San Francisco recuerda que el obispo Álvarez «es uno de los cientos de sacerdotes nicaragüenses encarcelados y exiliados en el último año» y denuncia que «Nicaragua está siguiendo el camino trazado por los totalitarios en Rusia, Cuba, China y otros lugares».
«¿Por qué tan pocos estadounidenses prestan atención a los horrores de los regímenes de tendencia marxista? Para mí, una pregunta aún más preocupante es: ¿Por qué los católicos saben tan poco sobre los mártires y las víctimas de las brutalidades del comunismo?», se pregunta el arzobispo estadounidense.
Para Cordileone, una de las razones puede estar en que la Iglesia Católica «tradicionalmente ha categorizado a los mártires según su identidad nacional». Monseñor Salvatore Cordileone subraya que «esta categorización, aunque lógica, tiende a enterrar lo que estos mártires tienen en común: estos hombres y mujeres son héroes de fe que se enfrentaron a ideologías impías, asesinas y totalitarias que se extendieron por todo el mundo en los siglos XX y XXI».
El arzobispo de San Francisco explica que otra de las razones del desconocimiento de los católicos de la existencia de mártires del comunismo puede deberse a que «nos hemos vuelto demasiado dependientes de los medios y artistas seculares para contar nuestra historia».
«A medida que la cultura secular se vuelve más hostil, o simplemente indiferente, a la religión, es hora de redescubrir las artes como centro de evangelización. Una vez más debemos cantar nuestras propias canciones y contar nuestras propias historias, para que podamos compartir la verdad, la bondad y la belleza de la fe con el mundo», escribe el arzobispo Cordileone.
Es por ello, que el prelado estadounidense desvela que ha pedido al Instituto Benedicto XVI que lance un nuevo proyecto plurianual que cuente la historia de estos heroicos mártires del comunismo, en liturgia e himnos, pero también en pinturas, poesía, obras de teatro, videos y ensayos, en asociación con el Museo de las Víctimas del Comunismo en Washington.
Cordileone concluye su escrito afirmando estar seguro de que «nuestra incapacidad para recordar a nuestros héroes y mártires del comunismo está teniendo un efecto peligroso en lo que sabe la próxima generación». Remarca que en 2022, la Fundación Víctimas del Comunismo publicó un informe sobre las actitudes de Estados Unidos hacia el socialismo, el comunismo y el colectivismo, sintetizando datos de 2.100 encuestados estadounidenses de dieciséis años o más: El treinta por ciento de la Generación Z tiene una visión favorable del marxismo, 6 puntos porcentuales más que 2019. Solo el 63 por ciento de la Generación Z y los Millennials (en comparación con el 95 por ciento de la generación anterior) cree que la Declaración de Independencia garantiza mejor la libertad y la igualdad que el Manifiesto Comunista.
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En mi grupo de formación se predicó, se enseño siempre y lo hemos transmitido a nuestros hijos.
¿ Que por qué? Porque vosotros, teniendo miles de colegios y universidades por todo elmundo colaboráis ocultándose a millones de vuestros alumnos limitandoos a dar el temario oficial y manteniéndolos en la ignorancia.
No sé si me he explicado bien, pero mire usted por donde y dado que visitaré su página oficial se lo contaré en un estupendo inglés.
Es muy cierto lo que dices. Tampoco lo enseñan los curas en sus homilías.
Otro caso: en México es la propia Iglesia la que nos mantiene en la ignorancia con respecto a la persecución que desataron los masones en los años 20 del siglo pasado que desencadenó en la guerra Cristera. Se calcula que costo la vida a alrededor de un cuarto de millón de personas
EL GATO CON BOTAS, TIENES MUCHAS RAZÓN. EN LAS HOMILIAS LOS SACERDOTES, TE CUENTAN ALGO DEL EVANGELIO Y, «EN BOCA CERRADA NO ENTRAN MOSCAS»
Bien por el arzobispo Cordileone. Adelante. Es importante escribir, hablar y gritar de los crímenes continuos y en aumento del comunismo en el mundo entero. Los hechos no se pueden tergiversar ni ocultar. Estamos obligados a defender la verdad y a nuestra Iglesia tan vapuleada por todas partes.
«¿Por qué los católicos saben tan poco sobre los mártires y las víctimas de las brutalidades del comunismo?».
Que se lo pregunte a Juan XXIII, que por vender la moto de su Concilio ecumaniaco y tener observadores de la Iglesia Ortodoxa Rusa (la mayoría de su clero agentes del KGB, como el agente Mijailov hoy Patriarca Kirill), negoció con la URSS, a través del Cardenal Tisserant, que el Concilio no condenaría el comunismo, para lo cual ordenó hacer desaparecer las actas con las firmas de unos 400 padres conciliares que solicitaban dicha condena.
Pablo VI… otro que tal baila. JP II cambió el cuento porque como polaco le apretaba el zapato en lo personal, hasta el punto de ordenar sacerdotes contra la prohibición expresa de Pablo VI que no quería problemas con la URSS (curiosamente, años después, él excomulgó a Lefebvre por ordenar obispos pese a su prohibición).
De los anterior a la excomunión de Pío XII, por «intrínsecamente perverso»…
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¿No se ha preguntado Vd. para qué y quién da la clase de religión en los colegios….? ¿Como son ciertas homilías en plena iglesia…? ¿Como te hablan y ejemplarizan, a su gusto, en las catequésis…? ¿Se extraña ahora, tras tantos años, en los que ya no te felicitan por tu Santo…? ¡No me HODA, la culpa es de vuesas mercedes!