La diplomacia vaticana vuelve a quedar tocada. Es notorio que en Nicaragua los esfuerzos de Roma no está sirviendo para nada y plegarse a las exigencias de la dictadura comunista china con «pactos secretos» tampoco parece que esté dando buenos resultados.
Según informa Asia News, a principios de este año 2024 ha sido detenido el obispo Peter Shao Zhumin, de 61 años, de Wenzhou, en la provincia oriental de Zhejiang.
El obispo Shao no es reconocido por el gobierno chino y, por lo tanto, las autoridades locales lo encarcelan habitualmente para impedirle llevar a cabo su ministerio al servicio de la vibrante comunidad católica local.
Según el citado medio especializado en información religiosa en Asia, «le ordenaron llevar ropa para primavera, verano, otoño e invierno». “Esto sugiere que su situación no es prometedora y que probablemente permanecerá detenido durante mucho tiempo. Los fieles están preocupados porque ni siquiera saben dónde será detenido”.
El obispo Shao fue ordenado obispo coadjutor con mandato papal en 2011 y sucedió al obispo Vincent Zhu Wei-Fang cuando este último falleció en septiembre de 2016.
Sin embargo, al negarse a unirse a los organismos oficiales impuestos por el gobierno a los católicos chinos, nunca ha sido reconocido por las autoridades. Al considerar vacante la sede, el gobierno ha puesto a cargo de la diócesis a un miembro de la Asociación Patriótica Católica China, el padre Ma Xianshi.
Durante las festividades, el obispo Shao es detenido periódicamente para impedirle dirigir celebraciones públicas en una ciudad apodada la Jerusalén del Este por sus iglesias.
Este año, sin embargo, las cosas fueron un poco diferentes. Unos días antes de Navidad, el 16 de diciembre, las fuerzas de seguridad se llevaron al obispo Shao y lo liberaron dos días después.
Luego, el 24 y 25 de diciembre, lo llevaron al condado de Taishun para impedirle celebrar la Misa de Navidad, pero aun así informó que pasó una de las Navidades más tranquilas de su vida.
Su detención se produjo más tarde, a raíz de una nueva carta que Mons. Shao escribió al P. Ma el 31 de diciembre, creyendo con la conciencia tranquila que debía protestar por las decisiones tomadas sobre la diócesis sin su autoridad.
«Les he escrito», se lee en la carta que hizo pública Mons. Shao, «expresándoles mi deseo de reunirme con ustedes lo antes posible para discutir soluciones a algunos de los complejos problemas de la diócesis en este momento».
“Lo mismo se aplica a la promoción de los seminaristas. Según la ley de la Iglesia, es necesario ser ordenado personalmente por el obispo de la diócesis o tener un poder suyo.
«Según el Código de Derecho Canónico, quien recibe las órdenes sagradas de alguien que carece de poder legítimo para ordenar, queda automáticamente suspendido».
La carta parece haber provocado una fuerte reacción por parte de los organismos «oficiales» de la Iglesia en Wenzhou, que aparentemente están detrás del arresto del obispo Shao. «Ahora – dice la fuente a AsiaNews – los fieles rezan por él, pidiendo al Señor que lo devuelva a su comunidad lo antes posible».
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Los que han entregado los Catolicos Chinos al Regimen Comunista son unos Malditos.