En una entrevista con en el semanario «Die Tagespost», el obispo de Passau, Stefan Oster, uno de los más críticos con el camino sinodal alemán, ha vuelto a alertar sobre los efectos nocivos que está provocando este proceso en Alemania.
Para Stefan Oster, el camino sinodal provocó que la polarización en la Iglesia aumentase. Observó este desarrollo «en el pueblo de Dios, entre los obispos y en las relaciones entre la Iglesia en Alemania y Roma», afirmó Oster en una entrevista publicada el jueves en el semanario «Die Tagespost».
Según el obispo, las decisiones del Camino Sinodal “casi con seguridad” no lograrán un cambio en el elevado número de dimisiones. Una mirada a la historia de la Iglesia muestra que la liberalización de la enseñanza y la disciplina de la iglesia conduce a una conexión cada vez menor con la iglesia. «Si la iglesia se relaja institucionalmente en su conjunto, el pueblo de Dios termina volviéndose aún más relajado». Hay “muchas cosas que vale la pena considerar” en los textos del proceso de reforma de la Iglesia.
Oster también criticó el hecho de que en la iglesia alemana apenas se ofrece catequesis para jóvenes adultos. «De alguna manera, en todas nuestras actividades de la iglesia, parece que asumimos que las personas ya son creyentes». El obispo pone el foco en que debido a la falta de formación en la fe en muchos lugares, no existe una base real en la fe, incluso entre muchos católicos comprometidos. «Para muchos esto hace que la fe sea algo poco tangible o algo que se puede elegir entre una variedad de ofertas», dice Oster. Esto también lleva a que la gente abandone la Iglesia: luego están los clásicos temas candentes, como el celibato , el sacerdocio de las mujeres o los abusos. Y añadió que «casi ningún joven comprende por qué debería estar ya en esta ‘tienda extraña'».
«Nuestro compromiso con la Iglesia, con la sociedad y con la creación se deriva en realidad de esto: que hemos aprendido de nuevo que somos hijos de Dios». Es importante como iglesia involucrarnos con los jóvenes y ofrecerles una amistad basada en la fe. «Al principio, esto seguramente ya no será un movimiento de masas». «Pero para algunas personas esto podría proporcionar un camino hacia una mayor profundidad y resiliencia de la fe frente a las demandas de la sociedad secular», defiende el obispo germano.
Ayuda a Infovaticana a seguir informando
¡Pero qué sínodo ni que ocho cuartos! Esto que dice el artículo viene de antes.
En las parroquias a las que fui, los católicos de a pie, ni siquiera conocen la Biblia, y si daban catequesis, no sabían nada de nada.