El arzobispo de san Luis, en Estados Unidos, ha anunciado un nuevo plan pastoral para la archidiócesis que consiste en cerrar 44 parroquias.
La semana pasada contamos como la Diócesis Católica de Columbus, en el estado norteamericano de Ohio, anunció su decisión de cerrar 15 iglesias y un colegio en el condado de Franklin. Esta semana, el arzobispo de san Luis, Mitchell T. Rozanski, ha anunciado que con el nuevo plan pastoral para el futuro de la archidiócesis, se reduce el número de parroquias pasando de 178 a 134.
El arzobispado explica que se entran en un proceso de reforma interna y por ello pasan de 178 parroquias a 134 como parte de la iniciativa de planificación pastoral estratégica bautizada como ‘Hacer nuevas todas las cosas’.
Treinta y cinco parroquias se incorporarán o fusionarán en parroquias vecinas. Además, se fusionarán 15 parroquias para crear cinco parroquias nuevas. También se establecerá una nueva parroquia personal para la comunidad de habla hispana en el condado de St. Charles. Estas parroquias serán supervisadas por casi 90 párrocos diocesanos y 17 párrocos de órdenes religiosas.
“En St. Louis, estamos llamados hoy a comenzar un nuevo capítulo en nuestra historia de 200 años”, dijo el arzobispo Rozanski. “Que un nuevo Pentecostés nos inflame a cada uno por el Evangelio de Cristo. Humildemente le pedimos al Espíritu Santo que nos guíe, y espero y oro para que trabajemos juntos para forjar nuevos caminos y asegurar que el tesoro de nuestra fe pueda continuar brindando sanación y esperanza a un mundo quebrantado”. La nueva estructura se implementará a partir del 1 de agosto.
«El anuncio es la culminación de una iniciativa de planificación pastoral estratégica de casi 16 meses para examinar todas las facetas de la archidiócesis y fortalecer los esfuerzos de evangelización de la Iglesia local», asegura el arzobispado.
La archidiócesis reconoce que el número de católicos activos ha disminuido en las últimas décadas. En 2021, el arzobispado informó tener aproximadamente 490 000 católicos, siendo la primera vez desde principios de la década de 1960 que se baja de la cifra de 500 000 católicos.
Las parroquias se han enfrentado con muy pocos sacerdotes en las parroquias grandes y un número desproporcionado de sacerdotes en las parroquias más pequeñas. El número de sacerdotes diocesanos está disminuyendo. Este año, la archidiócesis ordenó solo a cinco sacerdotes. Además, los sacerdotes también están envejeciendo: el 41% de los sacerdotes activos y jubilados tienen actualmente más de 70 años. Estas cifras son las que están detrás de este reajuste aprobado por el arzobispo quien aseguró que «esto no es el final, sino el comienzo de algo nuevo».
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El descaro de ese arzobispo no tiene límites, como osa el decir que es un Pentecostés cuando en su diócesis están cerrando casi 50 parroquias?.. como es utiliza ese versículo bíblico de hacer nuevas todas las cosas para nombrar un plan de pastoral de cierre de templos?
Cómo le llaman a eso plan de pastoral?….Dios mío que DESFACHATEZ,
Una vergüenza y una derrota es eso.. solo hay una explicación para cerrar una iglesia, que no hay feligreses y el Clero a tirado la toalla en la evangelización… Cómo se pudo llegar hasta ahí???… Por qué no se tomó una pastoral antes de que después de ?
Somos de los que ponemos candado cuando nos roban?… Por qué surgió un fuego del espíritu Santo para evitar el cierre de todas esas parroquia….
Lamentable, y eso que esa es la primavera que trajo el concilio, esa es la primavera que trajo el papá Francisco,, ese el el aggiornamiento que procamo Juan XXIII… MUCHAS GRACIAS..
Señor ven pronto por el rescate del remanente fiel….
‘esto no es el final sino el comienzo de algo nuevo’. Estos obispos useños, además de ser en su gran mayoría afeminados, están locos de remate.
La FSSPX necesita parroquias para sus apostolados. Lo digo señor obispo por si ha pensado en la opción de ceder alguna iglesia. Gracias por tan gran generosidad.