Los Jesuitas de Bolivia piden perdón por abusos cometidos por un misionero español

Alfonso pedrajas Alfonso Pedrajas
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La Compañía de Jesús de Bolivia ha emitido un comunicado en el que «repudia y condena estos hechos de pederastia denunciados públicamente, relacionados con el caso del sacerdote español Alfonso Pedrajas, fallecido en 2009».

«Comunica que a propósito de las denuncias ha decidido de manera inmediata suspender de sus actividades a los jesuitas que fueron Provinciales de la época de la que datan los abusos para realizar una investigación sobre sus actuaciones en el caso», se lee en el comunicado.

Además, informan de que han decidido suspender de sus actividades a otros jesuitas que ejercieron como Provinciales en los años posteriores al fallecimiento de Pedrajas para investigar sobre si hubo denuncias públicas no atendidas en su momento.

La Compañía de Jesús de Bolivia quiere subrayar su política de “tolerancia cero” ante los abusos, como varias veces ha reclamado al respecto el propio Papa Francisco y ratifica su disposición a colaborar con las autoridades competentes que lo requieran sobre estas investigaciones.

«Los abusos han provocado una herida profunda en las víctimas y las denuncias no pueden ser ignoradas, aunque el sacerdote involucrado en los hechos haya fallecido. Reiteramos nuestra decisión de investigar los casos con una comisión de peritos que está actuando desde el 2022, lo que puede crear una esperanza de Justicia para las víctimas, cuya situación nos ha avergonzado y causado indignación y tristeza. Pedimos perdón por el dolor causado», agregan los jesuitas.

En un comunicado previo, los jesuitas de Bolivia confirmaron que iniciaron una investigación en agosto del 2022. La investigación concluyó el 4 de abril de 2023, señalando la verosimilitud del hecho denunciado. El 5 de abril del presente año se inició una segunda investigación y se halla en curso.

La petición de perdón por parte de los jesuitas viene provocada tras la noticia de El País que reveló este domingo la historia del sacerdote Alfonso Pedrajas, quien dejó un insólito testimonio escrito antes de morir. “Hice daño a demasiados”, confesó. Se estima que puede haber más de 80 víctimas. Este sacerdote jesuita español llegó incluso a tener un novio en Bolivia

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Comentarios
34 comentarios en “Los Jesuitas de Bolivia piden perdón por abusos cometidos por un misionero español
  1. Los jesuitas cuándo piden perdón por este Bergoglio y otros parecidos y similares como él que han producido y que tantas herejías está creando y promocionando, destrozando la doctrinas de Cristo? Lo utilizarán, sin duda, para promocionar el odio a España. Y será verdad, todavía están investigando.

    1. Otro depredador loco como Renato Poblete SJ, encubierto durante decenios enteros por la Teología de la Liberación y la Compañía de Jesús. Un reportaje del diario «El País» les ha hecho bola el desayuno y llevan desde el domingo lloriqueando por los medios…

  2. Y además los pecados son personales, en su caso debería ser el pecador el que debe pedir perdón por sus pecados.

  3. Es una buena noticia que se arrepintiera de su pecado, Dios le perdone.

    Pero también tenemos que hacer lo posible para paliar los daños infligidos a las víctimas.Y el primer paso es pedirles perdón en nombre de la Iglesia, que se duele y se escandaliza ante estos abusos por parte de algunos de sus miembros. El segundo paso es hacer todo lo posible para que cosas como estas no vuelvan a suceder.

    Doy gracias a Dios porque la Iglesia esté trabajando en este sentido y rezo por las víctimas, que seguramente asociaran a la Iglesia ( en lugar de a uno de sus miembros) esos episodios tan duros y se apartaran de ella.

    Hablo en general ya que respecto a este caso todavía no está finalizada la investigación.

    1. Yo no he violado a ochenta niños, ni militado en la Teología de la Liberación, ni exaltado en libros, como ese tipo, la figura del compañero «Lucho» Espinal (el de la hoz y el martillo sacrílegos de Evo, que se llevó Bergoglio al Vaticano); sino que siempre he estado en contra. Estoy bautizado y también soy Iglesia, pero no tengo que pedir perdón por esos comunistas de la Compañía de Jesús que han exterminado la fe y la decencia en toda Iberoamérica.

      1. Ah, y han hundido también la fe en España con sus prevaricaciones y abusos sexuales, según las propias investigaciones del diario «El País» (seguidos por salesianos, maristas, escolapios, Montserrat…).

        1. El P´a´ís y los «jesuitas» con sus arrebatos de cristofobia habituales. Hablan de «denuncias» no de «hechos probados», y no del padre Pedrajas, sino «relacionado» con el padre Pedrajas. O sea, que no hay nada, salvo ganas de vociferar contra la Iglesia.

          1. A estas alturas, alturísimas por así decir, resultan incluso cómicas las actitudes numantinas, caballero…

          2. Para numantina, la postura del citado libelo socialista y de quienes se creen y difunden sus indisimuladas calumnias.

      2. Lector,

        pues a mí no me costaría pedir perdón en nombre de otros si así pudiera aliviar un poco el dolor de una persona que ha sufrido tal horror. Me parece que vale la pena. Y apruebo que la Iglesia lo haga.

        Es también como predicar con el ejemplo. Aprender a reconocer nuestros errores humildemente e intentar paliar el dolor ajeno en lo que se pueda me parece un buen ejemplo cristiano. Ejemplo de humildad, de empatía, de apoyo, de comprensión, de cercanía etc

        En fin, son distintos modos de verlo…

        1. Tiene usted razón pero, en mi opinión, el problema está en que sólo han pedido perdón públicamente cuando la noticia ha salido publicada en la prensa y, al parecer y si estoy equivocado dígamelo por favor, pero no antes.

          1. Pero si los jesuitas le han hecho homenajes a Alfonso Pedrajas SJ hasta en el centro donde perpetraba sus ultrajes sobre los críos. Y la Conferencia Episcopal Boliviana, hasta el domingo pasado, ha exaltado públicamente en los medios el «ejemplo de resistencia contra la opresión» del ‘Padre Pica’, Luis Espinal y toda su célula comunista.

          2. ¿Qué demonios tiene entonces todo ese pringoso polítiqueo revolucionario con la Iglesia, ACS…?

          3. Javier C.

            pues sí…tienen razón: tal como se lee en el artículo eso parece.

            Pero prefiero pensar, hasta no tener datos suficientes, que antes de haber pedido perdón públicamente también lo hicieron en privado, eso espero y creo que es una posibilidad. Sinceramente, no lo sé…

            Si sólo han pedido perdón después de la publicación del caso va a servir como argumento a los enenmigos de la Iglesia.

            Gracias

          4. Lector,

            dice: ¿Qué demonios tiene entonces todo ese pringoso polítiqueo revolucionario con la Iglesia, ACS…?

            pues no lo sé pero…yo creo que sí tiene algo que ver. Pues la Iglesia es nuestra madre y todos sabemos cuanto consuela el abrazo de una madre. Y una madre también consuela siempre a su hijo. Pedirle perdón a una víctima de abusos es un consuelo para ella, porque es reconocerle víctima inocente, y una prueba de que es amada por nuestra Madre, la Iglesia, aunque un hermano suyo le haya hecho tanto daño.

            Lo veo un poco así.

          5. ACS: que les pida perdón Biden, por si les consuela. La Iglesia no tiene que pedir perdón por nada. De los errores y pecados sólo se pueden disculpar los que los han perpetrado. El resto es teatro con el único fin de atacar a la Iglesia responsabiliza sola de lo que no es culpa suya. Y si las presuntas víctimas sólo hallan consuelo con los perdones de alguien ajeno al culpable, pues que les den mucha morcilla, porque ya nos conocemos todos esas «víctimas» victimarias, que además suelen poner el cazo.

        2. Claro que no le costaría. Pedir perdón en nombre de otros es algo agradable, gratificante, dejz como una aureola de humildad y de «qué bueno soy». Es una manera agradable de acusar a los demás de malos, sin quedar como acusador oh no, yo «pido perdón en su nombre». No me extraña que se hags tanto, da mucho gustito y no deja ninguna responsabilidad…

          1. Amalia,

            y otra pregunta:

            ¿le parece que a una madre le da mucho gustito pedirle perdón a un hijo que ha sido tan torturado por otro?

          2. «¿le parece que a una madre le da mucho gustito pedirle perdón a un hijo que ha sido tan torturado por otro?»

            El hijo, como buen hijo, debería perdonar a la madre por darle otro disgusto: además de sufrir tortura por parte de otro, tiene que sufrir a una madre con problemas mentales, lo cual le crea la obligación, como buen hijo, de llevarla al psiquiatra y aparcar su propio problema, que la locura de su madre no cura, sino que agrava.

        3. ACS Araceli Campos Sarmiento. Si tú eres necia, yo no debo disculparme por tu necedad. Tú eres la responsable.
          Pregunto, por curiosidad, nada más: ¿Está en los Evangelios la empatía?
          Cristo y los apóstoles, me parece que jamás la usaron.
          Al pan, pan, y al vino, vino.

        4. CATHOLICVUS, a ACS le ha dado fuerte con difundir el error malvado de que «no somos responsables de nuestros `propios pecados, podemos arrepentirnos de nuestros pecados, pero en cambio, debemos pedir perd´on por los pecados de otros».

          Es decir, justo lo contrario de lo que enseña la Iglesia. Lo que viene a ser la costumbre en ACS.

    2. ACS Araceli Campos Sarmiento. Tu necedad te ciega.
      Si tú no has cometido el pecado ¿cómo vas a pedir perdón por lo que no has hecho?
      En cambio tú sí debieras pedirnos perdón a todos, por burlarte.

    3. ACS, el perdón ya se ha formulado en otras ocasiones, no es sano en términos espirituales regodearse en ello.

      En efecto, póngase el énfasis en la prevención. Aplíquese lo que lleva mucho tiempo inaplicándose: la «Ordenatio Sacerdotalis» y sobre sodo la «NSTRUCCIÓN SOBRE LOS CRITERIOS DE DISCERNIMIENTO VOCACIONAL EN RELACIÓN CON LAS PERSONAS DE TENDENCIAS HOMOSEXUALES
      ANTES DE SU ADMISIÓN AL SEMINARIO Y A LAS ÓRDENES SAGRADAS».

      Estoy segurísimo de que usted apoyará esas líneas. ¿Verdad que sí?

  4. Lo que pretenden esos «jesuitas» y el panfleto El País es calumniar a la Iglesia utilizando a personas fallecidas que no pueden ya defenderse. El País es un panfleto gubernamental que como tal está a favor de la corrupci´ón sexual de menores. Que no intente tapar sus vergüenzas personales tirando porque´ría contra los demás como hace también el tal Bergoglio.

    1. Tenía que haber visto usted a la pobre cristiana mestiza que destapó –llena de humildad y después de años de silencio– las aberraciones que le hizo el malhadado Renato Poblete SJ. Arrastrándola incluso a violaciones orgiásticas con palos incluso que le propinaban tipos enmascarados. Todo reconocido a su pesar por la Compañía de Jesús. Y era una más de decenas. Es un milagro que esas mujeres y pequeños hayan conservado la fe. Y no creo que la Iglesia necesite encima defensores sin humanidad ni corazón.

      1. La calumnia no es ni humanidad, ni corazón. Lo que «reconozca» la ex Compañía de Jesús (cuyo des-Propósito general niega la Revelación porque en aquella época «no había grabadoras») tiene de carácter probatorio cero patatero. No ya de «decenas», sino ni siquiera de un solo caso. ¿O estaba la ex Compañía de Jesús de espectadora, para dar fe, y en ese caso sí emplearon grabadoras?

          1. Nadie hace el ridículo por llamar calumnias a las calumnias. Cuando tenga usted un caso de condena judicial, lo comenta con nombres y apellidos. Y comenta ése y sólo ése. La calumnia compulsiva no es indicador de equilibrio mental, precisamente.

  5. Ven ese vínculo, homosexualidad – pederastia que aparece en la mayoría de abusos dentro de la Iglesia. Dos conductas sexuales anormales juntas. ¿no quieren James Martin SJ, el cardenal Hollerich y muchas autoridades eclesiásticas en la santa sede y el mundo hacer licitos los actos homosexuales? el poderoso lobby LGTBQIP ¿no quiere hacer licita la pederastia, aliado con la ONU? Creo que ya han visto varios videos de niños homosexuales y vestidos de drags, bailando en discotecas para homosexuales. Entonces, esas dos depravaciones, homosexualidad-pederastia, se hacen dentro de la iglesia y luego, las autoridades dentro de la iglesia y las autoridades del mundo, tratan de hacerlas licitas.
    Que Dios nos ayude.

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