Una Iglesia al borde del abismo

camino sinodal alemán
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(Jean Bernard, corresponsal especial en Francfort, en La Nef)-El Synodaler Weg (camino sinodal) celebró su última asamblea plenaria del 9 al 11 de marzo de 2023 en Fráncfort del Meno. Aunque no se produjo el temido cisma, el proceso emprendido por la Iglesia alemana desde 2019 la deja en un estado de extrema confusión.

En realidad, el lugar elegido resultaba algo desconcertante: la Reforma protestante tuvo lugar en las iglesias y fortalezas de Turingia; el camino sinodal, una especie de asamblea constituyente que se creó en 2019, celebró su quinta y última reunión plenaria en el corazón del distrito ferial de la capital financiera de Alemania. El lugar fue «Kap Europa», un centro de congresos futurista construido en medio de otros centros de congresos, encajonado entre la Gran Torre, el Skyline y la Torre Uno… Y cuidado con equivocarse de fecha: si hubiesen llegado un día antes, habrían asistido al congreso de trombosis y hemostasia; si hubiesen llegado un día después, se habrían encontrado en medio un mercado de reptiles o en la feria mundial de energías renovables. Afortunadamente, la vista de los primeros alzacuellos aportó cierta tranquilidad al lugar y unas amables azafatas guiaban a los participantes hasta la enorme sala de conferencias, pensada para acoger a los cerca de 200 miembros del camino sinodal, la prensa y hasta una batería (para amenizar las celebraciones a ritmo).

Pero no todos son Lutero. Al menos no el obispo Bätzing, presidente de la Conferencia Episcopal alemana y, junto con el presidente del ZdK (Comité Central de los Católicos Alemanes), principal organizador del camino sinodal. Y Kap Europa no es la capilla de Wittenberg en cuya puerta el monje luterano fijó sus provocadoras tesis.

De hecho, a medida que avanzaban los debates, pronto quedó claro que el reparto había sido acordado de antemano, con el fin de permitir a la mayoría de los obispos (que tienen poder de veto) adoptar textos cercenados y evitar así una ruptura con la Iglesia universal. Como resultado, al final de los tres días, la asamblea sinodal decidió no abolir el celibato eclesiástico, sino únicamente pedir a Roma que estudiara la posibilidad de ordenar a hombres casados. Una petición similar se hizo con respecto a la ordenación de mujeres al diaconado, cuando muchas voces habían reclamado su acceso al sacerdocio. Por último, aunque la asamblea sinodal aprobó casi por unanimidad la posibilidad de que las mujeres pronuncien la homilía (contraviniendo el Código de Derecho Canónico), la bendición para todas las parejas «que se amen» (contraviniendo el Catecismo) y la modificación de los registros bautismales para los fieles «transexuales» (contraviniendo el derecho natural), no se trata realmente de novedades, puesto que ya se están aplicando en varias diócesis con el consentimiento de los obispos afectados. Así pues, cuando terminó la rueda de prensa final, quedó claro que no se había producido el esperado cisma.

El hecho es que el camino Sinodal, cuyos trabajos continuarán a través de una «comisión sinodal» compuesta por algunos centenares de miembros, deja a la Iglesia en una situación de extrema confusión, de la que es posible identificar una certeza y varias incertidumbres.

La certeza es que no habrá cisma formal de la Iglesia alemana, al menos a corto plazo, por la razón de que un cisma solo existe cuando es sancionado canónicamente por Roma. Ahora bien, aunque el papa Francisco ha tolerado que los obispos alemanes se asocien a un proyecto que desafía abiertamente la teología moral y la eclesiología católicas, es bastante impensable que deponga, y mucho menos que excomulgue, a más o menos las tres cuartas partes de los miembros de la Conferencia Episcopal alemana. Tanto más cuanto que varios temas del camino sinodal se debatirán en el próximo sínodo universal. Además, los delegados del camino sinodal han preferido aplazar el único texto cuya adopción habría constituido un verdadero casus belli ante Roma, a saber: un texto que preveía la creación, a nivel de cada diócesis y de cada parroquia, de un «consejo sinodal» dotado de poder de decisión, con la consecuencia de privar de sus poderes a los obispos y a los párrocos respectivamente. En resumen, y como dijo un obispo con el que me crucé en los pasillos del camino sinodal, «en este asunto, no hay nada que esperar de Roma».

Las incertidumbres se refieren evidentemente a las consecuencias prácticas de las decisiones tomadas por el camino sinodal, en particular si la «comisión sinodal» anulará la prohibición romana y establecerá finalmente estos llamados consejos sinodales con poder de decisión. Pero las incertidumbres se refieren también -y este es quizá el aspecto más interesante- a la capacidad de reacción de los católicos alemanes para permanecer fieles al Magisterio. Aunque durante mucho tiempo han permanecido paralizados ante el proceso en curso, en parte debido a la falta de receptividad del espíritu alemán y a una red tradicionalista poco desarrollada, hay varios signos de cambio. Por ejemplo, cada vez más laicos, reunidos en asociaciones como Neuer Anfang o Maria 1.0, se declaran dispuestos a dejar de pagar el Kirchensteuer (el impuesto eclesiástico), con el fin de drenar los fondos de una Iglesia cuya riqueza se juzga precisamente como causa de su desarticulación. Más fundamentalmente, podría desarrollarse en el futuro una Iglesia paralela, en gran parte clandestina, formada por obispos que rechazan las conclusiones del camino sinodal, sacerdotes sancionados por su fidelidad al Magisterio y fieles que rechazan la invitación del obispo Bätzing a hacerse «católicos de otra manera».

Publicado por Jean Bernard, corresponsal especial en Francfort, en La Nef

Traducido por Verbum Caro para InfoVaticana

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Comentarios
30 comentarios en “Una Iglesia al borde del abismo
  1. No hace falta un cisma oficial, lo es de facto, de la misma manera que Berg oglio no es discípulo de Jesucristo porque por sus obras le conocemos, en palabras de Cristo mismo.
    La ruptura con Jesucristo comienza en el corazón de cada persona y solo Dios conoce el alcance real de esta gran apostasía anunciada por el mismo Señor hace 2000 años.
    Da igual lo que Berg oglio diga o haga… hasta que no doble la cerviz ante el Señor al que dice servir, todo es paja que se lleva el viento…
    Son las personas que nos rodean a cada uno las destinatarias de nuestra oración, caridad y obras, pensamientos y consejos acertados que podamos darles, las que importan. Las estructuras caerán. La Iglesia seguirá en pie, por la Promesa de Cristo. Amén.

    1. El Papa está llevando la Iglesia al abismo. Nunca debió convocar el sínodo de la sinodalidad, y debería corregir a los díscolos alemanes. Pero en vez de eso, guarda silencio ante el avance de la ideología de género y el aborto, e insulta a los sacerdotes que defendemos la recta moral (como se vio en el programa de Disney+)
      Menos mal que Dios defenderá a la Iglesia para que los lobos no la derroten.

  2. La culpa la tiene Bergoglio, como en el siglo 16, pues gran parte de la culpa la tenía el Papa Medici, León X que era una persona completamente incompetente, que en vez de cumplir sus deberes como papa, le gustaba la cacería y las fiestas. Bergoglio debía de haber parado eso hace años y manifestado que las consecuencias de los actos de esos obispos sería su destitución y excomunión. Como los obispos alemanes viven la buena vida gracias al abundante dinero que reciben del estado, es probable que no hubieran hecho lo que han hecho con otro papa irresponsable, es decir, Bergoglio.

    1. Curiosa teoría: la culpa de las herejías sostenidas por Lutero en el siglo XVI la tenía… León X.

      Es decir, cuando un agustino tan pío como Lutero vio lo malíssssimo que era León X y cuánto le gustaban la cacería y las fiestas, se dijo a sí mismo: «Esto lo soluciono yo soltando varias herejías, a cual más gorda, amancebándome con una monja y azuzando a los príncipes europeos para que me apoyen, para que así puedan enriquecerse con lo que roben a la Iglesia (sin riquezas de por medio no había apoyo)».

      Vamos, que está clarísimo: León X obligó a Lutero a tomar como concubina a una monja. Y él se dejó, claro. Y a sostener y difundir herejías también le obligó, naturalmente. Y también habrá obligado a Francisco, desde la tumba, a inventarse este sínodo y permitir que en él se suelten todo tipo de despropósitos.

  3. A ver, no puede haber cisma, porque en la Iglesia católica falsa de hoy día son (casi) todos cismáticos. ¿Cómo va a haber cisma si todos piensan lo mismo y defienden lo mismo, desde Roma hasta Berlín? Repito, no puede haber cisma si todo es cisma. Lo que les pone como fieras son el 5-10% de católicos tradicionales que resisten valientemente en pequeños reductos, también en Alemania. Contra esos se lanzarán los lobos todos a una. Hay que arriconarlos, ningunearlos, perseguirlos, y en pocos años estarán enseñando los leones que nos «acompañarán» en el circo. La extrema brillantez de Satanás en este asunto es que los católicos fieles sean arrinconados y acosados ¡en su propia Iglesia!

  4. Pues no será porque no se ha visto venir si no se cortaba a tiempo. El «buenismo», «armar lío», y expresiones parecidas. Sobre las conciencias de quienes podían haberlo evitado recaerá el resultado: aquí y sobre todo en la otra vida

  5. Muy rico este ar´tículo. Primero, se ha evitado un cisma formal ya que en la práctica es una iglesia con otra deriva. El Papa no hará nada -estoy de acuerdísimo-, ya que los temas del sínodo alemán SON LOS TEMAS de los Sínodos de Obispos 2023 y 2024. Francisco ya ha reformado la doctrina católica del matrimonio admitiendo el divorcio y las nuevas nupcias no sacramentales pero no invalidantes de comunión. Ya ha anticipado lo de los sacerdotes casados. Entre lo hecho y lo por hacer, la Iglesia Católica habrá roto su rumbo post Sínodo, donde el sínodo alemán será una anécdota a caballo de que las propuestas allí realizadas son las que llegan al Vaticano de la encuesta mundial realizada por orden del Papa. El articulista pone como hecho relevante lo del órgano de gobierno supraobispo diocesano, cuando se está arrasando la doctrina y la moral católicas. Y creo que será el «distractor» del proceso: por ver la estructura de gobierno aceptaremos las rupturas que se avecinan.

  6. «aunque la asamblea sinodal aprobó casi por unanimidad la posibilidad de que las mujeres pronuncien la homilía (contraviniendo el Código de Derecho Canónico), la bendición para todas las parejas «que se amen» (contraviniendo el Catecismo) y la modificación de los registros bautismales para los fieles «transexuales» (contraviniendo el derecho natural), no se trata realmente de novedades, puesto que ya se están aplicando en varias diócesis con el consentimiento de los obispos afectados. Así pues, cuando terminó la rueda de prensa final, quedó claro que no se había producido el esperado cisma.»

    1. Es cisma material y herejía formal y mayerial.

    2. Los obispos están excomulgados latae sententiae non declarata, como mínimo con con sede impedida relativa, no pueden innovar y sólo mandan si hay justa causa (335 y 1335 CDC)

    3. ¡Todo cisma implica herejía! ¡La unidad ya está rota!

  7. Como dice el refràn popular, «la verdad padece pero no perece». Sobrevivirà un pequeño 10 % en verdaderos catòlicos europeos, e irà creciendo de a poco con la fuerza de lo realmente vivo… y finalmente volverà a reinar. Como siempre ha sucedido en la historia de la Iglesia Catòlica, como sucediò con la aparentemente arrolladora fuerza que inicialmente tuvo el arrianismo, la verdad catòlica finalmente triunfò. Ni Neròn, ni Juliano el Apòstata, ni Arrio, ni la Ilustraciòn, ni el marxismo ateo lograràn vencer la verdad de Cristo.

  8. Dejen de desinformar a la gente diciendo que el cisma no está en un proceso avanzado en Alemania y que todo se ha solucionado.
    ¿Qué buscan obtener con esas mentiras?
    Acumular más pecados en el alma.

  9. Una buena noticia la Santa Sede frustra como observador permanente «el impulso occidental para el aborto y educación sexual en Comisión de la ONU». 13 de abril 2023. (es.zenit.org)

    1. ¿Ya se han decidido a actuar, por fin? ¿Ya no va a aparecer nada de la abortista Agenda 2030 en la JMJ de Lisboa? ¿Van a echar a todos los proabortistas del Pontificio Instituto para la Vida y la Familia? Francisco va a emitir una orden a todos los obispos de EEUU (para empezar) para que prohíban comulgar sacrílegamente a Biden «El Católico» y a todos los políticos que públicamente apoyan o legislan leyes abortistas, homo y transexualistas (casi todos del Partido Demócrata)? ¿Francisco va a reducir al estado laical a Paglia, por apoyar explícitamente la ley del aborto italiana? No sé, sáquemos usted de dudas, ya que tiene más información.

      1. La noticia creo que es importante, porque la Iglesia, sólo hay una, aunque dentro de ella esté monseñor Paglia, pero también están el Cardenal Timothy Dolan y el Arzobispo William Lori, está consiguiendo que la Agenda del 2030 no se explaye por el mundo ahora mismo. Y esto hay que resaltarlo. Está en la ONU poniendo trabas al aborto y a la ideología sexual. No está para favorecer la agenda 2030 en estos dos temas.

        1. Es que la abortista Agenda 2030 no es la carta de un menú: o se suscribe completa, o se rechaza completa (no dan la opción que usted dice). Pero vamos, que por su respuesta, que no: van a seguir apoyando oficialmente esta Agenda abortista, no van a echar a ningún proabortista del Pontificio Instituto para la Vida y la Familia (ya me parecía raro, habiendo sido designados a dedo para el puesto por Francisco), ni a Paglia le va a decir nadie que se vaya a su casa porque en el cargo que ocupa queda feo un prelado excomulgado «latae sententiae», y se va a seguir alentando a los políticos proabortistas a comulgar sacrílegamente. Pues, la verdad, no veo noticia por ninguna parte: más de lo mismo, con algún gesto de vez en cuando para disimular, pero que no eche por tierra lo que les ha costado tanto esfuerzo (no vayamos a volver a la situación de condena sin paliativos del aborto de JPII. ¡Eso nunca!).

  10. Parece que lamentan algunos que no se produjera el cacareado cisma del episcopado alemán. Es de admirar la inteligencia, laboriosidad y sensatez de la gran mayoría de los asistentes al Camino Sinodal, para dar un paso adelante, que como decía el cardenal Newman «is enough for me», sin necesidad de producir traumas, cismas o escisiones de ninguna clase. Laus Deo!

    1. «Parece que lamentan algunos que no se produjera el cacareado cisma del episcopado alemán»

      Sería absurdo lamentarse de lo que ya se ha producido de facto. Hasta le han hecho una pedorreta a Francisco cuando les ha dicho que NO. Lo lamentable es que no les mande al paro, porque cobrar por engañar a los fieles no es de recibo.

      «Es de admirar […] para dar un paso adelante…»

      ¡Y tanto! Es digno de admiración el valor para dar un paso adelante cuando uno está al borde del precipicio. Pero luego que no se quejen de que tienen pupa: tú lo quisiste, fraile mostén; tú lo quisiste, tú te lo ten.

  11. ¿Qué hubiese sucedido si el Camino Sinodal hubiese decidido volver a la liturgia bimilenaria de la Iglesia, a su doctrina de siempre, a la lengua universal y a la disciplina de credo y doctrina de siempre?. No habría durado ni media semana el dichoso sínodo. Enseguida habría habido destituciones y visitas apostólicas con las consiguientes «misericordes» collejas. Pero ha sido al revés: bendición de la sodomía, atentado contra la doctrina y etc… . Y claro, en Roma ni se han movido. Ni lo harán. Cuando el padre Santiago Martín se preguntaba el por qué del silencio de los obispos de la Iglesia Católica ante estos desmanes, acababa respondiéndose a sí mismo que por ese silencio el papa se sentía solo y por esa razón tampoco decía nada. Increíble, pero cierto. Pirueta inverosímil del padre Martín para no reconocer la verdad que es que el papa calla porque ese sínodo no le molesta en absoluto, a fin de cuentas¿Quién le dio el poder de las llaves a él?¿No fueron acaso los modernistas?.

  12. «La certeza es que no habrá cisma formal de la Iglesia alemana, al menos a corto plazo, por la razón de que un cisma solo existe cuando es sancionado canónicamente por Roma.»

    La certeza es que todo cisma implica herejía.

    La herejía es automática, implica excomunión latae sententiae non declarata con sede impedida absoluta prorsus impedita, o relativa: absoluta, pierde la condición de catolico; relativa, no puede innovar y cada acto requiere justa causa (c. 335-1335 CDC).

    Ahora hay cisma, herejía y excomunión de los obispos alemanes, y su sede impedida es o absoluta (fuera de la Iglesia) o relativa (no pueden innovar y cada acto necesita de justa causa).

    Obviamente, ni los obispos alemanes ni el Papa van a hacer un cisma formal, es decir mediante declaración pública y oficial, eso jamás. El Papa va a omitir culpablemente sus obligaciones de excomunión y la situación empeorará.

  13. Esto es pura biología.
    Si mezclas burros y yeguas, del cruce salen mulas.
    Si mezclas cabras y ovejas, del cruce salen cabrejas.
    Si mezclas protestantes y católicos, del cruce salen católicos sinodales.
    La característica común de todos ellos: son estériles.

  14. Alemania, vacia de Fe y de ideas, repite cinco siglos despues el viejo camino de Luther.

    En Roma, al menos hay originalidad.

    Begother, en silla de ruedas intenta seguir a los Cismaticos.

    Opera bufa, si las hay.

  15. No deberían escribir «la Iglesia alemana» o «la Iglesia española» ya que son entidades que no existen. Si acaso «la Iglesia en Alemania» o «la Iglesia en España».

    1. Siempre se ha escrito así. Como también se decía la Iglesia de Laodicea o la Iglesia de Éfeso (y está en la Palabra de Dios). Iglesia sólo hay una, pero está perfectamente utilizada la preposición «de».

  16. Hemos venido aceptando oficialmente durante décadas movimientos con praxis y doctrina no católicas, dejándoles llamarse católicos, y ahora nos rasgamos las vestiduras de que sea la estructura central la que hace de su capa un sayo con la moral, pero como se siguen llamando católicos pues no se les ha misericordiado ni nada. Hace años alguien tuvo un sueño que explicaba lo que iba a ocurrir: la plaza del vaticano había sido invadida por un ejército de mujeres soldado alemanas vestidas como en la primera guerra mundial, que atacaba a bayoneta a los sacerdotes que deambulaban por all´í. Pues esto es lo que ha pasado, triunfo de la ideología de género personificada en tanta lideresa eclesial, cuya victoria principal está siendo acabar con el sacerdocio católico.

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