Los sacerdotes no deben ser «superhombres» sino personas humildes, advierte Francisco

Papa Francisco envidia sacerdotes El Papa Francisco en el simposio sobre el sacerdocio (Vatican Media).
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En el discurso, no pronunciado pero sí entregado, a los participantes en el curso para rectores y formadores de los seminarios latinoamericanos, Francisco subrayó que las auténticas motivaciones vocacionales son «el seguimiento del Señor y la instauración del Reino de Dios».

Uno de los retos más importantes en la formación sacerdotal, según el discurso entregado, es construir «verdaderas comunidades cristianas» que no sólo promuevan «un proyecto formativo coherente», sino también «una experiencia verdaderamente comunitaria en todas las dimensiones de la formación».

El Papa pide a los seminaristas que se propongan “renunciar a la inercia y al protagonismo y empezar a soñar juntos, sin lamentar el pasado, no solos, sino unidos y abiertos a lo que el Señor desea hoy como formación para las próximas generaciones de sacerdotes inspirados en las orientaciones actuales de la Iglesia».”

Otro reto es formar «condiscípulos de los demás fieles cristianos, que comparten «las mismas necesidades humanas y espirituales» y están sujetos a «las mismas fragilidades, limitaciones y errores». “Hay que tener cuidado, pues su misión no es formar «superhombres», que pretendan conocer y controlar todo y ser autosuficientes; al contrario, es formar hombres que con humildad sigan el proceso elegido por el Hijo de Dios, que es el camino de la encarnación.”

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Comentarios
13 comentarios en “Los sacerdotes no deben ser «superhombres» sino personas humildes, advierte Francisco
  1. El Papa se equivoca al decir: » lo que el Señor desea hoy como formación …inspirados en las orientaciones actuales de la Iglesia.» Eso es muy pretencioso, pues es querer validar las erráticas orientaciones de Framcisco, como si fueran voluntad directa de Dios, cuando no puede haber contradicción en Dios, y como el Papa contradice definiciones de sus predecesores que fueron asistidos ppr el Espíritu Ssnto, se demuestra que Dios no quiere las orientaciones actuales de la «Iglesia de Francisco».

    1. Una más de las imbecilidades del argentino que no oculta su carencia de lógica, de carisma y de deseo de derrumbar lo que significa la figura del Pontífice de Cristo sobre la Tierra. Algo que es discutible en su persona desde el inicio de los cambios que lo enfocaron y el silencio (oh dolor) del Santo Padre Benedicto XVI.

  2. Hoy con el sanbenito de Dios quiere o Dios lo quiere, pretenden hacer pasar por deseos de Dios o inspiraciones del Espíritu Santo toda una serie ideas equivocadas que no precisamente parten del Señor, sino de sus erradas mentes y perversas ensoñaciones. No son profetas de Dios como pretenden, sino de su padre el maligno, que era mentiroso y homicida desde el principio.

    1. Carmen, eso mismo es lo que ha venido haciendo la iglesia desde siempre. ¿Cómo saber lo que Dios quiere de mí?. Para eso están los directores espirituales que ponderan los indicios.

      1. Hipolitina, estoy de acuerdo contigo en eso. Mi mensaje es un comentario a lo escrito por sacerdote mariano, pero que no salió debajo del suyo, donde dice: «El Papa se equivoca al decir: » lo que el Señor desea hoy como formación …inspirados en las orientaciones actuales de la Iglesia.»
        Me refería a esas supuestas inspiraciones que muchas veces van acompañadas con el sanbenito de Dios lo quiere, y que no pretenden más que trastocar, desfigurar o diluir la doctrina milenaria de la Iglesia. Tal vez no me expliqué bien, y mi mensaje haya inducido a error y haya dado la impresión de que está fuera de lugar.

  3. No sé qué quiere decir con la instauración del Reino de Dios, porque que sea en la tierra es lo que creen los herejes.
    Traducción, no conviertan a nadie, al contrario, y trabajen por la agenda masónica. Humilde significa mentecato.

  4. El fin del pecado original fue imponerse a Dios en el paraíso y decirle que a partir de entonces el hombre iba a hacer lo que le saliera de sus santos bemoles. Claro está que el hombre se equivocó y Dios nos sometió a la tribulación del mundo y nos condenó a la muerte definitiva. Después se apiadó de nosotros y envió a su Unigénito para la redención del mundo por medio de su sangre y abrió las puertas del cielo para los justos. Pasados los siglos, el hombre de nuevo se rebeló ante Dios en la Revolución Francesa y liberal, e impuso a la diosa razón. Pasaron mas siglos y la iglesia también se rebeló contra Dios Padre y Dios Hijo y Dios Espíritu Santo, en el concilio jacobino, cometiendo el segundo pecado original de la libertad de cultos, con las consecuencias terribles que estamos comprobando. Ya solo nos queda ver el castigo definitivo de Dios.

  5. Espero que los sacerdotes nuevos no sean de esa pasta progre anti-cristiana pro-Bergogliana, al estilo de adaptar la doctrina al gusto del consumidor (gay, ecolojeta, pachamámico, etc.). Porque como vayan en esta deriva perdida y llena de aberraciones ¿quiénes van a ser los pastores?

  6. Y el primer gesto de humildad es no anteponer el yo a la voluntad de Dios, de modo que si uno no tiene la madera necesaria para los votos sacerdotales, mejor que no se empeñe en ese camino, y que busque otro camino para su santificación.

    Quizás no haga falta que sean superhombres… pero desde luego es absolutamente necesario que sean hombres (sin confusiones al respecto), sin desviaciones físicas ni apetitos desordenados, y con vocación acreditada de pobreza, obediencia y celibato.

    En resumen, no son superhombres… pero no todo hombre vale para el orden sacerdotal.

    Hay que decirlo todo, contar sólo una parte, la que suena mejor, a más «buen rollo» es peligroso en estos tiempos, puede atraer al sacerdocio a hombres con tendencias objetivamente desordenadas.

  7. Yo siempre he creído que la dignidad del sacerdote es superior a la de un laico… Ahora según Bergoglio, los curas han de ser hombres corrientes y dejarse llevar por el mundo y sus modas… En ese caso no sirven para nada. O peor, desviarnos de la fe auténtica.

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