En declaraciones a LifeSiteNews, la esposa de Houck, Ryan-Marie, dijo que alrededor de 25 a 30 agentes del FBI armados hasta los dientes irrumpieron en su propiedad el viernes por la mañana temprano, apuntando con sus rifles mientras los niños gritaban horrorizados.
“Empezaron a golpear la puerta y a gritarnos que abriéramos”, dijo Ryan-Marie sobre la redada. Antes de abrir la puerta, supuestamente Mark trató de razonar con los agentes para calmarlos por el bien de sus hijos. “Por favor, voy a abrir la puerta, pero, por favor, mis hijos están en el hogar. Tengo siete niños en la casa”, supuestamente dijo Houck a los agentes.
Los agentes del FBI “seguían golpeando y gritando”, según Ryan-Marie. “Tenían rifles enormes con los que nos apuntaban a Mark y me apuntaban a mí y por toda la casa”, dijo Ryan-Marie sobre el momento en que su esposo abrió la puerta para los agentes. “Todos los niños gritaban. Fue muy aterrador y traumático”, añadió.
Ryan-Marie luego exigió que los agentes presentaran una orden de arresto antes de llevarse a su esposo, pero supuestamente dijeron que “se lo llevarían, tuvieran una orden judicial o no”, aunque posteriormente sacaron la orden del vehículo.
Según Ryan-Marie, los cargos respondían a un incidente en el que Houck empujó a un activista proaborto que había estado acosando a su hijo de 12 años frente a un abortorio. Según los informes, los cargos fueron «desestimados por el Tribunal de Distrito de Filadelfia» a principios de este año para luego ser admitidos a trámite por el Departamento de Justicia de Merrick Garland.
En varias ocasiones, cuando Mark asistía a sesiones de asesoramiento callejero frente a las clínicas abortistas llevaba a su hijo mayor, entonces de 12 años. Durante «semanas y semanas», en palabras de Ryan-Marie, un «manifestante abortista» se dirigió al niño diciéndole «cosas groseras, inapropiadas y repugnantes», como «tu padre es un marica» y otras declaraciones obscenas”.
Mark le indicó en repetidas ocasiones al hombre que se abstuviera de dirigirse a su hijo, a lo que el hombre hizo caso omiso. En un momento dado, el hombre se acercó peligrosamente al niño, “Mark le empujó lejos de su hijo y el tipo cayó hacia atrás”.
Como no presentaba lesión alguna, aunque trató de demandar a Houck, el caso fue desestimado a principios del verano. Sin embargo, la información de la parte contraria cuenta una historia diferente, habla de dos empujones y de que el hombre requirió atención médica.
La Ley FACE convierte en delito federal intimidar, herir o interferir en cualquier persona que intente acceder a una clínica abortista. Houck podría enfrentarse a una pena máxima de once años de prisión y multas de hasta $350,000 si es declarado culpable.
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Los EEUU del «católico» Biden practican la persecución contra los buenos.
Para eso trampearon las elecciones que había ganado Trump, para poner a este pervertido.
Jajajajajaja que ridícula, qué afirmaciones y sin ningún escrúpulo.
Usted hablando de escrúpulos, jajajajaja. Qué troll tan cómico.
ENCOFRADOR
Tu hablando de escrúpulos y de ridículo eres un oximoron.
Hemos vuelto a los tiempos de la Roma pagana, y el César ha decretado la persecución a los cristianos, porque no adoramos a la diosa pagana de la muerte, el hedonismo y la pachamama climática.
Es que es así. Que suena muy grandilocuente y exagerado, pero es la pura verdad escueta.
¡Dios mío! Y nos pilla sin preparación, no sé cómo decir, en catequesis sólo hemos oído hablar de «justicia social etc» pero no tenemos – la inmensa mayoría de cristianos- una formación, unos hábitos, un sentido de comunidad fuerte que nos sustente…
Espero que cuando multen a este padre de familia pueda comenzar a recaudar fondos, para que podamos donar dinero y ayudarlo. Ésa sí será una forma de apoyar y mandar un mensaje.
¡Ánimo!
¿Cuántos agentes armados necesitarán en ese país para detener a un terrorista…? Si ese incidente hubiese ocurrido con alguna de las mujeres que acuden a abortar, habría alguna base legal, pero tratándose de un adversario ideológico que acosaba a su hijo de doce años, esto parece una burda operación de intimidación y escarmiento propia de un régimen totalitario.
Los amigotes de bergoglio apoyan esto. Todo dicho
Se comportaron como la Gestapo.