El Arzobispo William E. Lori de Baltimore, presidente del Comité de Actividades Pro-Vida de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos, ha salido al paso de la orden ejecutiva para proteger el acceso al aborto firmada por Biden.
“En respuesta a la decisión Dobbs , hice un llamado a la curación de las heridas y la reparación de las divisiones sociales, a la reflexión razonada y al diálogo civil, y a unirnos para construir una sociedad y una economía que apoyen el matrimonio y la familia, y donde cada mujer tenga la apoyo y los recursos que necesita para traer a su hijo a este mundo enamorado», afirma el arzobispo.
William Lori sostiene que «como líderes religiosos, nos comprometimos a continuar nuestro servicio al gran plan de amor de Dios para la persona humana, y a trabajar con nuestros conciudadanos para cumplir la promesa de Estados Unidos de garantizar el derecho a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad para todos».
El arzobispo de Baltimore afirma que “es profundamente inquietante y trágico que el presidente Biden opte por usar su poder como presidente de los Estados Unidos para promover y facilitar el aborto en nuestro país, buscando todas las vías posibles para negar a los niños por nacer su derecho humano y civil más básico, el derecho a la vida. En lugar de utilizar el poder del poder ejecutivo para aumentar el apoyo y la atención a las madres y los bebés, la orden ejecutiva del presidente solo busca facilitar la destrucción de seres humanos indefensos y sin voz».
Por último, el responsable de los asuntos provida en la Conferencia episcopal estadounidense, implora al presidente que «abandone este camino que conduce a la muerte y la destrucción y elija la vida. Como siempre, la Iglesia Católica está lista para trabajar con esta Administración y todos los funcionarios electos para proteger el derecho a la vida de todos los seres humanos y para garantizar que las madres embarazadas y con hijos reciban pleno apoyo en el cuidado de sus hijos antes y después del nacimiento».
Queda por ver si tras este nuevo ataque del «católico» Biden a la vida de los no nacidos, los obispos estadounidenses vuelven a abrir la puerta a la excomunión del presidente de Estados Unidos, quien sigue comulgando cada domingo sin cargo de conciencia.
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El arzobispo de Baltimore es valiente en sus palabras. Francisco debería aprender de él.
Dà escalofrìos pensar en la (para èl) no muy lejana escena del juicio final, cuando el Sr. Biden comparezca ante el Juez eterno, y deba responder a su pregunta sobre còmo empleò los inmensos talentos recibidos de educaciòn catòlica y presidencia de la naciòn màs poderosa de la tierra…Los ejèrcitos de niños impedidos de nacer, clamaràn entonces en su contra…, y ya no tendrà allì nadie que oculte la verdad ni la disfrace de conveniencia polìtica…!
Biden dice ser católico y promueve el aborto.
Francisco dice ser católico y promueve la comunión de Biden.
¿Queda al católico fuera de los que, espantados, no entendemos nada?