La mayoría de los fieles irlandeses piden el fin del celibato y la ordenación femenina

catedral Irlanda Catedral de san Pedro en Belfast, Irlanda
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Los católicos que quedan en Irlanda, antaño la Isla de los Santos y hoy el único país que ha elegido en referéndum la legalización del aborto, favorecen en su mayoría los cambios más radicales en la Iglesia en el proceso de ‘escucha’ previo al sínodo.

La gran mayoría de los católicos irlandeses practicantes están a favor de la ordenación de mujeres, el matrimonio para los sacerdotes que lo deseen, una mayor presencia de personas divorciadas vueltas a casar y más respeto por las personas LGBTQI+, asegura The Irish Times.

También quieren sermones más cortos y mejor preparados y la eliminación de las lecturas ‘sanguinarias’ del Antiguo Testamento de las Misas y otras liturgias. según una encuesta de decenas de miles de creyentes en las 26 diócesis de la iglesia en la isla.

Encuestas similares a la irlandesa, que será considerada por una asamblea nacional de 160 personas en Athlone, Co Westmeath el sábado, están en marcha en todo el mundo católico en preparación para un sínodo en Roma el próximo año.

La ‘escucha sinodal’ se abrió el pasado octubre en Irlanda, cada diócesis preparando su propio informe. Cada uno de los informes, junto con algunas presentaciones independientes, se cotejarán y editarán antes de enviarse a Roma en agosto.

Será la contribución de los católicos irlandeses al Sínodo mundial sobre la Sinodalidad convocado por el Papa Francisco para el Vaticano en octubre de 2023.

Una encuesta de los 26 informes diocesanos irlandeses encontró que el 96 por ciento de las personas consultadas estaban a favor de la ordenación de mujeres, ya sea como diáconos o sacerdotes. En lo que respecta a las personas LGBTI+, el 85 % expresó su preocupación por la exclusión, las actitudes y el lenguaje de la iglesia, mientras que casi el 70 % quería una mayor participación de los laicos en la toma de decisiones de la iglesia.

Es curioso, porque todas esas cosas, todas, las tienen, junto a la denominación de ‘cristianos’, en la Iglesia de Irlanda.

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Comentarios
22 comentarios en “La mayoría de los fieles irlandeses piden el fin del celibato y la ordenación femenina
  1. Aquí ya parece que se hacen las mismas preguntas de Abraham:
    ¿ Y si sólo hay veinte?
    Quiera Dios que por ésas veinte no les vaya igual a todos,,porque Irlanda si era de verdad
    ‘Catoliquísima’ y no han pasado centenas de años como para decir que el tiempo sepultó el amor por Cristo.
    ¿Qué les ocurrió?
    Qué tristes noticias.

    1. En serio crees que el papa Francisco tenga tanto poder de convencimiento? Le estaría faltando un poco en otras partes del mundo dónde los cristianos se mantienen fieles.

      1. «En serio crees que el papa Francisco tenga tanto poder de convencimiento?»

        Entre los cuatro perroflautas que fingen ser católicos y que son los únicos que piden esas aberraciones, sí (si no porque Francisco las apoya, al menos porque no condena sus desvaríos, como es su obligación).

        «Le estaría faltando un poco en otras partes del mundo dónde los cristianos se mantienen fieles»

        No sólo en otras partes del mundo: en Irlanda también. Es que los que profesan la religión católica de forma íntegra no se prestan a hacer el juego a la pantomima del sínodo sinodal sinodalisticoespialidoso, que ya tenía escritas las conclusiones incluso antes de presentar los capciosos formularios a esos «fieles» que piden sacerdotas.

      1. En este caso es incierto: ningún Papa antes de Francisco ha allanado ningún camino al fomento de las «sacerdotas», ni se les puede acusar de haber guardado silencio o de haber sido poco contundentes al respecto, sino todo lo contrario. Ni siquiera Pablo VI o Juan Pablo II, quien finalmente declaró solemnemente que el juicio de la Iglesia con respecto a la imposibilidad de ordenar «sacerdotas» es definitivo.

        1. Pues desgraciadamente NO tiene Vd razón. Este caos general del que es una parte el «sacerdocio femenino» precede al menos varias décadas a Bergoglio. Ahí está el Papa que empezó con la confusión de Asís que no era Francisco y que además fue responsable de que Bergoglio esté donde está ya que le firmó 2 nombramientos de obispo y de cardenal. Después de semejantes escándalos pontificios no queda títere con cabeza.

          1. Naturalmente que tengo razón: me he referido exclusivamente al tema de la ordenación de mujeres, que, como he dicho, tanto Pablo VI como Juan Pablo II rechazaron, de acuerdo a la doctrina y la Tradición de la Iglesia, y dieron el motivo exacto: la Iglesia, ni nadie en ella, tiene potestad para hacer tal cosa. El resto de cuestiones y meteduras de pata papales, o si se fumaban un puro con respecto a otros temas doctrinales o concernientes a la Tradición, no son el tema del que hablábamos, ni yo he dicho nada al respecto, por lo cual no puedo «no tener razón» sobre algo de lo que no he hablado.

        2. Allanar el camino se puede hacer de muchas formas. Por ejemplo, argumentar que JPII dijo algo definitivo cuando a JPII le importó poco que otros papas antes que él también declarasen que otros asuntos igualmente eran definitivos, es darle la razón a los progres, porque te argumentan que si JPII hizo caso omiso con aquello, ellos también pueden hacer caso omiso de esto otro.

          1. Su forma de razonar es ilógica, permítame que se lo diga, porque una cosa no implica la otra: decir o hacer una cosa mala o falsa no implica que por tal motivo todo lo que diga o haga la misma persona sea malo o falso. Y en el tema del que hablábamos, que es el imposible sacerdocio femenino, tanto Pablo VI como Juan Pablo II se ajustaban a la verdad. Yo no he hablado de ningún otro aspecto. ¿Qué a usted le parece erróneo lo que hizo Pablo VI con la Liturgia, por ejemplo? Y a mí. Y a mucha gente. Pero eso no varía que acertara en el tema que tratamos o que no siguiera la Tradición en este punto. Si en otras ocasiones no lo hizo, le podrá reprochar incoherencia u otras cosas, pero seguiría sin variar su acierto en lo de la imposibilidd de la ordenación de mujeres.

  2. Es el resultado de decenios de modernismo y descristianizacion llevada a cabo por el mismo clero.
    Es la Iglesia protestantizada, según el «espíritu del concilio», que nos han impuesto desde arriba.

    1. Es que yo no me creo los resultados. No es mucha casualidad que siempre salgan los mismos temas y a todo si? Porque, aquí en España, no creo que sea un clamor ni el fin del celibato ni el sacerdocio femenino ni nada de esto… Tampoco lo creo entre los fieles (los de verdad) de Irlanda Claro, que si estos son los resultados de verdad, entiendo lo que ha pasado.

  3. El titular es poco claro, pues no especifica de qué religión son fieles esa minoritaria «mayoría» que piden ‘sacerdotas’, siendo esta estraflaria petición imposible en la religión católica por Derecho Divino, además de estar prohibido solemnemente incluso plantearlo:

    «Si bien la doctrina sobre la ordenación sacerdotal, reservada sólo a los hombres, sea conservada por la Tradición constante y universal de la Iglesia, y sea enseñada firmemente por el Magisterio en los documentos más recientes, no obstante, en nuestro tiempo y en diversos lugares se la considera discutible, o incluso se atribuye un valor meramente disciplinar a la decisión de la Iglesia de no admitir a las mujeres a tal ordenación. (SIGUE)

  4. Por tanto, con el fin de alejar toda duda sobre una cuestión de gran importancia, que atañe a la misma CONSTITUCIÓN DIVINA DE LA IGLESIA, en virtud de mi ministerio de confirmar en la fe a los hermanos (cf. Lc 22,32), declaro que LA IGLESIA NO TIENE EN MODO ALGUNO LA FACULTAD DE CONFERIR LA ORDENACIÓN SACERDOTAL A LAS MUJERES, y que este dictamen debe ser considerado como DEFINITVO por todos los fieles de la Iglesia».

    (Carta Apostólica «Ordinatio Sacerdotalis» de Juan Pablo II, 22 de mayo de 1994).

  5. Nos están preparando para lo que van a hacer.
    ¿De verdad que alguien todavía se cree que no lo van a hacer?
    Y los neocon se volverán a callar como se callaron con Pablo VI cuando abolió la Sagrada Tradición. Hablaron un poquito y luego se escondieron.
    ¿Pero quién es peor, el que va avisando de lo que quiere hacer o el que se calla porque no es ni tradi ni progre?
    Pues Jesucristo lo tenía muy claro.

    1. ¿De verdad que alguien se cree que les importa lo que dijese Juan Pablo II sobre la ordenación, si a él mismo le importaba bien poco lo que dijeron otros papas sobre otros asuntos?
      Las pretensiones del clero progre son las lógicas y razonables, dentro del contexto conciliar de la mentira que los neocon han aceptado.

  6. Un católico no podría tener un sacerdote que no sea varón, como no podría haber un hombre embarazado.
    Hay cosas creadas solo para hombres y otras solo para mujeres.
    Los apóstatas que quieren el mamarracho de una diacona o sacerdotisa adoran las aberraciones y hacen culto al demonio.

  7. Con este cruadro de situación, y como vinieron cambiando cosas y despreciando y pisoteando gustosos la Tradición, es plausible que aprueben esta inversión del orden divino y natural, como advierte Uno en su comentario. Slvo oposición desconocida, lo aprueban según.la historia.

  8. Como cuando las turbas pedían invitadas por los fariseos l crucifixión de Cristo y eligieron a Barrabas, AHORA 2000 años después pasa lo mismo con los fariseos católicos versión 2.0 s Xxi..Traicionando todo lo enseñado , se repite la historia y ahora la arenga se extiende como la peste…

  9. ¿Y qué esperábamos? “Por donde salta la cabra salta la chiva o un poquito más arriba”. ¿Qué les enseñan? Hace años, comentando las palabras de San Pablo sobre la mujer en la Iglesia, una comentarista me dio en los morros con un escrito de Munilla (se supone que se libra un poco), en el que afirmaba que eran las costumbres del momento; lo de «Si alguien se cree profeta o inspirado por el Espíritu, reconozca en lo que os escribo un mandato del Señor (I Corintios 14:37), no cuenta. Empezaron haciendo las lecturas, fuera del presbiterio, y han acabado como en una Misa de Nuestra Señora de la Salud, en Barbatona, con el obispo presente, que abandoné hace unos años tras sacar los colores a varios curas que estaban cruzados de brazos mientras que unas monjitas repartían la comunión como si fueran dulces “tetillas de monja”. ¡Es lo que hay!

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