El arzobispo de Berlín pide perdón por homofobia en iglesia

Koch arzobispo Berlín
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Heiner Koch, arzobispo de Berlín, condenó la “ominosa historia” de tradición homofóbica en la Iglesia en el Día Internacional contra la Homofobia, en el curso de un servicio ecuménico celebrado en la Iglesia de los Doce Apóstoles de Schöneberg.

Koch pidió perdón por la discriminación contra las personas por su orientación sexual por parte de la Iglesia, en una de esas disculpas que no comprometen en absoluto a quien las pide sino que, por el contrario, les sirven para distanciarse de ‘pecados’ pasados. El arzobispo berlinés, además, anunció que su archidiócesis nombraría responsables en cada parroquia que se ocuparían de luchar contra dicha discriminación, además de asegurarse de que ningún empleado LGTBI del arzobispado vería peligrar su puesto de trabajo por razón de su orientación sexual.

Representantes del monasterio ecuménico Rogate en Sankt Michael, la iniciativa #OutInChurch – por una iglesia sin miedo, el grupo de trabajo ecuménico sobre homosexuales y la iglesia, y la asociación de lesbianas y gays de Berlín-Brandeburgo hablaron en el servicio sobre experiencias de discriminación en las iglesias, reconociendo que se había avanzado mucho en este asunto en los últimos años.

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Comentarios
29 comentarios en “El arzobispo de Berlín pide perdón por homofobia en iglesia
    1. Ya nada asombra, dadas las circunstancias que vivimos.
      En algún momento, pondrán a Dios en el banquillo de los acusados, por haber destruido la Pentápolis, a causa del pecado contra natura; Porque en el Levítico se prohiba acostarse con la madre, el padre, la hermana, el hermano o con los animales.

  1. Este obispo no sabe de qué habla. En la Iglesia nunca ha habido «homofobia.»
    Koch debe pedir perdón a Dios por su traición, antes de presentarse ante el tribunal de Dios, pues entonces ya no tendrá tiempo de hacerlo.

    1. Cada vez lo ponen peor. Ni siquiera conocen la historia de la iglesia Católica y se arrodillan ante los que la quieren destruir. Quizá sea eso lo que pretenden para crear su propia Iglesia Cismática Alemana. ¿No hay nadie que les pare los pies? Me temo que esta es una pregunta retórica…

    2. Creo que cuando Jesús gritaba sepulcros blanqueados estaba leyendo los comentarios de Infovaticana, hay que ser falso, hipócrita y cínico para negar lo que es una evidencia que casi cualquiera de más de treinta años ha visto con sus propios ojos

  2. (Algún católico concreto lo habrá sido pero) «la Iglesia católica» nunca ha sido homófoba ni ha discriminado a personas por su orientación sexual. Le hace mucho daño a la Iglesia decir eso que injustamente ha dicho el arzobispo Koch.

    Puestos a pedir perdón, pidámoselo a los que se sintiéndose atraídos por el Evangelio (y por los muchos logros de la Iglesia y testimonios de católicos) les gustaría formar parte de la Iglesia pero no acaban de dar el paso al ver a tanto obispo, arzobispo,… infiel y mundano… pidámosles perdón, digo, por no haber encontrado los católicos la forma de apartar a dichos arzobispos de la vida pública de la Iglesia.

  3. ¿Cómo que no ha habido homofobía? Pero que gente más cínica!!!!, si cada día están atacando a los gays!!!!. No hay ni un articulo sobre otros pecados, pero cada día se ceban con este, tienen una obsesión enfermiza con este tema y encima cuando hacen un chistecito o insulta o calumnia en esta misma página ninguno dice nada y pretenden que nos creamos que no son homófobos

    1. Bueno José, Blandean su espada gay porque no los quieren. Pues claro que no se quieren. ¿ A qué el miedo de decirlo? Sólo falta decir que dónde no se quieren es en las órdenes religiosas, en las escuelas; ahí donde hay una enseñanza, ahí no debe haber gays, ¿ qué tiene de raro?
      Que ya les quepa que AHI, no son bien aceptados. Si andan en la calle desnudos allá ustedes, pero en seminarios NO, en escuelas NO
      Qué manía de creerse los indispensables y omnipresentes.

    1. Que pidan perdón por suplantar la verdadera fe católica por el engendro de la Nueva Teología Modernista que hace apostatar a las naciones y las sociedades.

  4. «El Espíritu Santo abandonará quizá este cuerpo social histórico, llamado Cristiandad, arrebatando consigo a la soledad más total a los suyos, dándoles dos alas de águila para volar al desierto. Y entonces la estructura temporal de la Iglesia existente será presa del Anticristo, fornicará con los reyes de la tierra -al menos una parte ostensible de ella, como pasó ya en su historia-, y la abominación de la desolación entrará en el lugar santo. “Cuando veáis la desolación abominable entrar adonde no debe, entonces ya es.”» P. Leonardo Castellani SJ Argentina. 1899 – 1981

  5. Aterra ver el nivel teológico y moral de muchos de los comentarios que aquí aparecen. Cuestiones tan delicadas, opiniones tan comprometidas y responsables no merecen los insultos y calificativos que figuran en estos comentarios. Se sabe que algunas de las actitudes más rigoristas en contra de los LGTB esconden alguna deficiencia en aquello mismo que critican. Estamos hablando de hijos de Dios, de bautizados en el nombre de la Trinidad, de miembros de la Iglesia. ¿Cómo podemos ofender a quien trata de defenderlos como miembros de nuestra Iglesia? Recuerdo la actitud empecinada del cardenal López Trujillo contra la homosexualidad que ocultaba una desviación personal deplorable.

    1. Usted no es nadie para juzgar el nivel moral de otros, a los que ni siquiera conoce y cuyo interior no puede ver; y de nivel teológico ya ha demostrado de sobra que el suyo es pésimo. Hasta le he corregido una auténtica herejía hace un par de días. ¿Qué deficiencia es la que tienen los modernistas rigoristas pro-homosexuales? Ande, díganos. Y a ver si se entera: los apóstatas no forman parte de la Iglesia, porque se han marchado voluntariamente. ¿O les va usted a obligar a permanecer donde no quieren? Eso no lo hace ni Dios, que respeta la libertad humana incluso aunque se equivoquen. Seguramente usted se crea más sabio y bueno que Dios mismo, claro. En vez de exponer pecados ajenos, cuídese de los suyos propios y arrepiéntase si no quiere perecer, en lugar de dar el tostón. De Dios nadie se ríe.

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