El Papa Francisco ha concedido una entrevista al diario italiano Corriere della Sera.
Como viene siendo habitual en las últimas intervenciones públicas del Pontífice, ha vuelto a hacer referencia al dolor que padece en la rodilla. «Disculpe si no puedo levantarme a saludaros», dijo el Papa a los periodistas. En referencia a su rodilla, el Papa desveló que hoy será sometido a una pequeña intervención, una infiltración, para superar las molestias en la rodilla. Un hecho, que Francisco ha vuelto a catalogar de «humillante» para él.
El tema central de la entrevista es la guerra en Ucrania. El Papa Francisco afirma «estar listo para ir a Moscú», aunque reconoce que no ha vuelto a tener una conversación con el mandatario ruso desde el pasado mes de diciembre.
Francisco asegura que le pidió al cardenal Parolin, después de veinte días de guerra, que le enviara a Putin el mensaje de que» estaba dispuesto a ir a Moscú». «Por supuesto, era necesario que el líder del Kremlin permitiera algunas ventanas. Todavía no hemos recibido respuesta y seguimos insistiendo, aunque me temo que Putin no puede y no quiere tener esta reunión ahora mismo. Pero tanta brutalidad ¿cómo no detenerla? Hace veinticinco años vivimos lo mismo con Ruanda», sentencia el Papa.
Envío de armas a Ucrania
En numerosas ocasiones Francisco se ha mostrado contrario al aumento de gasto de los países en armamento. En este caso, a la pregunta de si es partidario del envío de armas de terceros países a Ucrania, Francisco responde «no puedo responder, estoy demasiado lejos, a la pregunta de si es correcto abastecer a los ucranianos».
El Santo Padre afirmó que «las guerras se libran para probar las armas que hemos producido. Este fue el caso de la Guerra Civil Española antes de la Segunda Guerra Mundial. El comercio de armas es un escándalo, pocos se oponen».
Sobre un posible viaje de Francisco a Kiev, el Papa sentencia que por ahora no irá. Ve prioritario ir antes a Moscú y mantener un encuentro con Vladimir Putin.
Relación con los ortodoxos
Francisco ha hecho referencia al encuentro que mantuvo por zoom con el Patriarca Kirill. El Papa le dijo al Patriarca ortodoxo que «no somos clérigos de Estado, no podemos usar el lenguaje de la política, sino el de Jesús, somos pastores del mismo pueblo santo de Dios, por eso debemos buscar caminos de paz, para poner fin a los disparos de armas. El Patriarca no puede transformarse en monaguillo de Putin», agregó el Pontífice.
Ambos tenían agendada una reunión para el 14 de junio en Jerusalén pero finalmente la han suspendido de mutuo acuerdo.
Fin de la guerra
“Para la paz no hay voluntad suficiente Por eso quise publicar un libro con Solferino que tiene como subtítulo El coraje para construir la paz», subrayó Francisco con tono pesimista.
Por último, el Santo Padre confesó que en su último encuentro con el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, «me dijo que los rusos tienen un plan, que el 9 de mayo todo habrá terminado. Espero que así sea, así entenderíamos también la velocidad de la escalada de estos días. Porque ahora no es solo el Donbass, es Crimea, es Odessa, le está quitando el puerto del Mar Negro a Ucrania, eso es todo. Soy pesimista, pero debemos hacer todos los gestos posibles para detener la guerra», sentenció el Papa.