La polémica en torno a Benedicto XVI no amaina. Después de que el Papa Emérito pidiera perdón por los abusos mientras fue arzobispo de Munich, el arzobispo de Praga, cardenal Dominik Duka, salta en su defensa y contra el actual ordinario de Munich, el poderoso cardenal Reinhard Marx.
Duka ha publicado una carta abierta acusando a Marx de haber «difamado al anciano pontífice y enfangado su reputación», ya que «en el informe, que ha costado probablemente cientos de miles de euros, Benedicto XVI ha sido injustamente calumniado y herido».
Duka no es un prelado cualquiera. Tiene un enorme prestigio en su país, por haber sido perseguido y encarcelado durante el régimen comunista por ejercer su ministerio y trabar una estrecha amistad con el primer presidente postcomunista del país, el autor Vaclac Havel. Para Duka, los abogados de Múnich «han elaborado un informe de tal modo que no pudiera ser interpretado a su favor, ni se le ha ofrecido la posibilidad de aclarar los hechos. ¿Qué puede significar todo esto?», se pregunta el primado de la República Checa.
Ayuda a Infovaticana a seguir informando
Hace muy bien, pero Ratzinger no es la solución a los problemas actuales de la Iglesia. Ni los resolvió cuando podía y debía ni está en condiciones de hacerlo actualmente.
Según el gran teólogo católico Antonio Livi, «Todos los papas desde el Concilio Vaticano Segundo han tenido una actitud de estima con respecto al neo-modernismo herético, incluyendo a Benedicto XVI que confesó que básicamente estaba de acuerdo con el teólogo herético Karl Rahner. Como Papa, Benedicto incluso recibió al teólogo anticatólicoi, Hans Küng. Ratzinger no es solución a los problemas actuales».
A la pregunta de si la teología de Joseph Ratzinger podría conducir a la salida de la crisis actual, Monseñor Livi responde: «absolutamente no». Livi explica que, como teólogo, Ratzinger está bajo influencia neo-protestante y se opone a la vieja teología escolástica, que tiene un enfoque racional más que sentimental para la comprensión de la fe.»
Papa Benedicto. Que Dios le ayude, que pueda llegar a la meta sin caer, como quieren los criados del templo. La santidad no se la quitan y las mentiras se enrollan cual serpientes, en aquel que las dice. Que la Virgen María, Madre de Dios y Madre nuestra, lo conforte en estas horas de dolor.
Monaeñor Duka tiene razón. Actualmente hay una campaña de difamación contra la Iglesia, que se ceba en los buenos pastores como Su Santidad el Papa Benedicto XVI. Y lo peor es que la misma jerarquía eclesiástica se hace partícipe de los ataques, como se ve en el caso de Marx, que ha promocionado un equipo de abogados inícuo y tendencioso. Le tenían rabia a su paisano y ahora se aprovechan. Y no olvidemos que Marx ostenta un cargo de confianza en el G9 de Francisco, quien por cierto no ha defendido públicamente a su homólogo.