Stephan Oster, obispo de Passau, la diócesis natal de Joseph Ratzinger, ha salido en defensa de la inocencia de Benedicto XVI contra la campaña de difamación que se abate sobre el Papa Emérito. Este es su testimonio.
Me parece muy curioso observar cómo el debate en torno a la investigación encargada por la Archidiócesis de Munich-Frisinga se ha centrado sobre el Papa Benedicto XVI. Cuando, en 2014, fui consagrado como obispo de Passau, me convertí en «obispo del hogar de Benedicto» al mismo tiempo […]
Y ahora sale esta historia, que los medios han exagerado hablando de las supuestas mentiras de un hombre de 94 años. Me puse a revisar la biografía de Peter Seewald «Benedicto XVI – Una vida», de 2020, y me sorprendió encontrar en la página 938 cómo el propio protagonista recordaba haber estado presente en la sesión decisiva de 1980, cuando se trataba de establecer si el abusador H. podía trasladarse de la diócesis de Essen a la de Munich. Y el arzobispo estuvo de acuerdo en que H. podría someterse a terapia en Munich. La investigación de Seewald ya había revelado la presencia y participación de Ratzinger. Esto significa que la participación de Benedicto XVI en este fatal asunto ha sido documentada públicamente durante mucho tiempo, es decir, desde antes de que el Dr. Ulrich Wastl la presentara a la opinión pública como una novedad. De la misma manera se sabía que en esta sesión no se trataba de devolver a H. a las labores sacerdotales, sino solo a que se sometiera a terapia en Munich.
En las 82 páginas de Memorias Autógrafas adjuntas al Informe, que llevan la firma de Benedicto XVI y que tienen más de disculpa jurídica que de texto ratzingeriano, leemos en cambio que no estuvo presente en la sesión antes mencionada. Un error fatal, con el que los autores del informe pretendían arrinconar a Benedicto como autor de una supuesta falsedad.
La corrección que Benedicto XVI emitió al respecto, con referencia a un «olvido» en el curso del «proceso editorial», deja claro que el Papa emérito de 94 años se fió de colaboradores que han cometido un error capital en un punto decisivo. Desde mi punto de vista, la intención obvia de este enfoque era hacer que el Papa Emérito (y su oficina) aparecieran –por todos los medios jurídicos posibles y contra cualquier posible acusación– lo más irreprochable posible. Desafortunadamente, sin embargo, tal intento hoy no puede salir bien. […]
Los otros tres casos en los que el experto del despacho de abogados encontró a Joseph Ratzinger culpable de una acción incorrecta muestran, de hecho, según mi evaluación, una actitud una vez habitual, con estos casos y con las personas involucradas, donde «habitual» no significa que hoy pueda considerarse buena. El cardenal Marx dijo en su declaración pública después de la publicación del Informe que no podía admitir en Benedicto voluntad de encubrir. Yo tampoco puedo. […] De hecho, fue uno de los primeros en reconocer todo este problema en Roma – y como cardenal superior en la Curia ayudó a muchos a verlo mejor – a través de medidas concretas y efectivas, así como mediante reuniones y diálogo con las personas involucradas y mediante la severa condena de los culpables. Y todo esto frente a una oposición en absoluto despreciable dentro del propio Vaticano. […]
Ahora, el escándalo en torno a la supuesta «mentira» en los medios de comunicación pretende desacreditar la labor de toda una vida de este hombre de 94 años. A este respecto, me gustaría decir lo siguiente: estoy muy agradecido de haber podido conocer personalmente a Benedicto XVI en los últimos años, ya que antes de ser obispo pude leer, siempre con gran alegría y provecho, sus escritos teológicos y espirituales durante tantos años. Es un hombre magnánimo con una fe infantil. Un hombre de gran profundidad y claridad espiritual, rico en humor y la capacidad de escuchar de verdad. […]
En cualquier caso, me gustaría decir, en lo que a mí respecta, que veo el error (o errores), veo al anciano y veo su conducta (incluso en la lucha intraeclesial contra el abuso sexual), y en todo esto mi valoración personal, objetivamente fundada, permanece inalterada. Personalmente lo amo incluso en este clima: atesoro las reuniones con él incluso ahora y en retrospectiva. A mis ojos sigue siendo, incluso para la Iglesia de Passau, uno de sus más grandes hijos.
Ayuda a Infovaticana a seguir informando
Es evidente que Su Santidad Benedicto XVI es inocente de las acusaciones que le hacen, y que es un pontífice íntegro.
La campaña de difamación contra él, forma parte del contubernio anticatólico del NOM.
Y es significativo destacar que Francisco todavía no ha salido en su defensa. ¿Por qué será?
Estoy de acuerdo con Vd. A mí siempre me ha parecido una gran figura por su sencillez y su capacidad intelectual. Nunca debió de renunciar a papado, aunque debió tener razones muy sólidas para hacerlo.
Todavía seguimos sin saber el por qué Benedicto XIV marc´hó y por qué se permitió que la mafia de San Galo tuviera el ascendiente que se dice que tuvo en la elección de Francisco. Hay mucha intrahistoria eclesial que todavía, en el 2022, no sabemos, y que sin duda que con el tiempo, sabremos la verdad de cosas que hoy son absolutamente y totalmente incomprensibles e injustificables: eso nunca se hubiera dado en la Iglesia Católica sana, docta y normal (Amoris laetitia, Lutero, Pachamama, Pacto secreto con China, Camino Sinodal Alemán, Traditionis custodes, no prohibición de la comunión al abortista Biden). Y la verdad nos hará libres, si no ahora, sí en el futuro. Esperemos que, ya de una vez por todas, nos digan la verdad para ser libres, pero eso es responsabilidad de los 5.300 obispos y 229 cardenales, que nada hacen por ahora.
Seguramente que sí.
Pero a mí se me hace que está prisionero y vigilado.
Antes de conocerse su renuncia, cayó un rayo.
La gente cree que eso debió haber sido una casualidad, pero no pudo ser casualidad porque esos fenómenos son insólitos. Creo que ese día no llovió.
El principio de inocencia, más una vida acreditadamente dedicada en exclusiva y de manera martirial a la ortodoxia y ortopraxis, configuran la inocencia y la vida ejemplar y de santidad de toda la vida de Ratzinger y Benedicto XIV. En mi opinión, todo será una simple molesta acción de guerra cognitiva basada en desinformación e información falsa para desprestigiarlo y desacreditarlo por razones anticatólicas y satánicas.
El problema está en que los redactores de informes sobre abusos, cometen abusos en la redacción de dichos informes, juzgando temas que están fuera de su plena competencia, o dando cifras o datos inexactos. Los informes, por lo tanto, deben de pasar una comisión técnica que eliminen todas las proposiciones, premisas y conclusiones que se extralimiten de su competencia: juzgar sobre moral, doctrina, inocencia, culpabilidad, números falsos en los abusados…
El mayor número de casos de pederastia se da en las mismas familias desestructuradas y en los centros de menores donde las venden y prostituyen . De eso no hablan. Sólo quieren manipular las mentes de los ignorantes que les votan y presentar a la opinión pública todo un clero católico poco menos que violador de niños y niñas en la mayoría de instituciones de la iglesia . Y a los que creemos en Dios y en Jesucristo en unos desalmados, cuando en realidad los que no tienen escrúpulos de mentir y manipular como bellacos son los mismos políticos aferrados al poder.
Bien dicho
El autor de urdir tal infamia contra SS. Benedicto XVI de 94 años, demuestra la bajeza moral e inhumana que tiene. Delegitimar a un sabio anciano como venganza, solo conseguirán que que el mal les retorne como un bumerán a quienes lo han tejido. Querido y añorado Papa, SS. Benedicto XVI le llevamos en el corazón y en nuestra oración.
Aquellas cláusulas que eximen la responsabilidad a las farmacéuticas y gobiernos generan la idea de que las vacunas experimentales no son seguras porque sino no serían necesarios esas cláusulas.
Sería bueno que los que apoyan la vacuna experimental asuman de manera pública ante la población la responsabilidad por las consecuencias no deseadas de la vacuna.
Pueden hacerlo por medio de la publicidad y por la ley afirmando que aseguran la misma con sus bienes y su persona.
Esperamos que el obispo castrense, Bergoglio y otros ciudadanos se sumen a esta propuesta.
Esa publicidad lo haría responsable frente a terceros y demostraría que no hablan sin fundamentos.
Viva el Papa Benedicto XVI.
La cuestión no es si mintió o no mintió, pues todos gozamos de la presunción de inocencia mientras no se demuestre lo contrario. La cuestión es que ni JPII ni BXVI resolvieron la cuestión homosexual clerical, siendo así que el 80% de los abusos está vinculado con la homosexualidad, y que Bergoglio está fomentando la homosexualidad, que nunca ha condenado, de manera increíble, para demoler el sacerdocio católico y vendernos los viri probati, que no serán viri y menos probati.
Tosatti nos ofrece la larga entrevista a Müller en Kath.net, muy recomendable en su totalidad. Las preguntas las formula Lothar Rilinger, especialista en derecho laboral, y miembro adjunto jubilado del Tribunal del Estado de Baja Sajonia. “Es absolutamente grotesco querer presentar al mundo a un hombre como el Papa Emérito Benedicto XVI / J. Ratzinger como un mentiroso al atribuir un solo evento 42 años después a una sola reunión entre muchos cientos en la que pudo haber pensado asistir o no». «Acusarlo de una actitud tan moralmente baja no solo muestra una total falta de respeto por una persona y un cristiano altamente merecedor de la Iglesia y la sociedad, sino que también es una revelación de las propias intenciones, que se realizaron en la campaña de «asesinato del personaje». Specola.
Mientras a nuestro alrededor caen nuestros principios y valores que dieron sentido a nuestra existencia y a la de nuestros antepasados, sin pegar un tiro para defenderlas, la violencia no, la excusa de los cobardes, siguen cayendo los monumentos de piedra uno tras otros, sin que nadie lo impida, el otro día cayó otra cruz, en cualquier sitio de España, antes de ayer, el humilde monumento al requeté de Montserrat, hoy ha caído el monumento espectacular al General Varela, laureado de África, miembro de la Comunión Tradicionalista y autor de la Ordenanza del Requeté, en su natal San Fernando, ante las narices de la marina española. Mientras, se escuchan las carcajadas sardónicas de los jerarcas de la CEE en su caverna de Añastro 1, disfrutando del triunfo de los Sin Dios y de los AntiEspaña, y sobre todo de la pasta gansa acumulada por la traición.
Tarancón estaria orgulloso de vosotros.
Yo entiendo que aquí todo el mundo es fan-boy de ratzinger. Pero francamente no entiendo ni la noticia ni el aplauso: Lo que se dice en la noticia es que en el remoto pasado Ratzinger había hablado ya de que participo en esa Reunión sobre el pedófilo para admitirlo en la diócesis. Y Ratzinger ahora ha negado esa participación en su respuesta de 60 páginas a los autores del Informe… Luego como el mismo Rattzinger ha confirmado SÍ se había «equivocado», y ahora Passau lo que hace es CONFIRMAR EL «ERROR»… ¿o me estoy perdiendo algo?
Es una desvergüenza manifiesta el ataque del que está siendo objeto el gran Benedicto XVI y no sólo por parte de los enemigos de la Iglesia, sino lo más triste por quienes se dicen ser católicos y pastores del Evangelio. Masones y comunistas están bien infiltrados en los estamentos eclesiásticos.
Los clérigos que bla bla bla sobre esto, incluso los que también «entran al trapo»…. están locos de atar. ¿No hay un código de Derecho canónico en la Iglesia? Veremos muy pronto a Benedicto XIV en los altares. Los que niegan a Dios tendrán que afirmar a Dios, al ver la absoluta miseria de lo que está ocurriendo. Para mi todo lo que ocurre hoy dentro del alto clero, como el ataque a Benedicto XVI, es una de las grandes pruebas de la existencia de Dios.