El cardenal Re, nuevo decano del Colegio cardenalicio, le envía una carta al cardenal chino.
(Ricardo Cascioli/Brújula Cotidiana)- Una explosiva carta firmada por el decano del Colegio Cardenalicio, el cardenal Giovanni Battista Re – y a la que ha tenido acceso la Nuova Bussola Quotidiana -, ataca duramente al arzobispo emérito de Hong Kong, el cardenal Zen, culpable de criticar el acuerdo secreto entre China y la Santa Sede, cuyo resultado es el aumento de las persecuciones de los católicos en ese país. En la carta se mezclan juicios que inducen a la confusión – afirmando una inexistente continuidad entre la línea de este pontificado y la de los dos precedentes – y declaraciones de una enorme gravedad: se atribuye a Benedicto XVI la paternidad de dicho acuerdo y se afirma un cambio doctrinal respecto a la posibilidad de que haya Iglesias independientes.
El cardenal Joseph Zen es un obstáculo para la Iglesia en China, y a partir de ahora la Iglesia católica podrá estar formada también por Iglesias independientes. Este es el núcleo de la explosiva e increíble carta que el 26 de febrero, el decano del Sacro Colegio, el cardenal Giovanni Battista Re, ha enviado a todos los cardenales, y a la que ha tenido acceso en exclusiva la Nuova Bussola Quotidiana. Se trata de un duro e inaudito ataque frontal al arzobispo emérito de Hong Kong, de 88 años, firme opositor al acuerdo secreto entre China y la Santa Sede firmado en Pekín el 22 de septiembre de 2018.
Es un gesto que no tiene precedentes, y que el hecho de que se trate del primer acto oficial (el número de protocolo es 1/2020) del nuevo decano del Sacro Colegio hace aún más significativo. El cardenal Re fue nombrado el pasado 18 de enero, como resultado del Motu proprio con el que el papa Francisco, sin preaviso, determinó que dicho cargo tuviera una fecha límite, destituyendo así al cardenal Angelo Sodano.
La carta pretende ser una respuesta a la que elpropio cardenal Zen envió a sus hermanos el pasado 27 de septiembre. Pero no solo. El cardenal Re hace una referencia explícita a otras intervenciones del cardenal Zen que, como es bien sabido, es muy activo en transmitir el grito de los católicos chinos llamados «clandestinos», que consideran que han sido humillados y condenados por este acuerdo que sigue siendo secreto.
En la carta, el primer punto atañe a la presunta continuidad entre el papa Francisco y sus predecesores sobre los posibles acuerdos con China: «En el enfoque que se da a la situación de la Iglesia católica en China, hay una profunda sintonía de pensamiento y de acción de los últimos tres pontífices, los cuales, en el respeto a la verdad, han favorecido el diálogo entre las dos partes, y no el desacuerdo». Se atribuye, por tanto, a san Juan Pablo II «la idea de llegar a un acuerdo formal con las autoridades gubernamentales respecto al nombramiento de los obispos», recordando que fue él quien «favoreció la vuelta a la plena comunión de los obispos consagrados ilícitamente a lo largos de los años a partir de 1958».
A continuación, el cardenal Re pasa a atacar directamente al cardenal Zen, culpable de haber afirmado en diversas ocasiones que «habría sido mejor ningún acuerdo que un «mal acuerdo»». «Los tres últimos pontífices – continúa Re -, no han compartido esta postura y han sostenido y acompañado la redacción del acuerdo que, por el momento, parece el único posible».

Estas afirmaciones del cardenal Re constituyen una distorsión grave de la realidad porque es más que evidente, en cambio, la diversidad de enfoque de san Juan Pablo II y de Benedicto XVI respecto al pontificado actual. Si bien es verdad que había en ellos un gran deseo de dialogar con China, a lo que dedicaron muchos esfuerzos, también lo es que este deseo estaba en función exclusivamente de un único objetivo, a saber: ayudar a la Iglesia china – dividida entre «patriotas» y «clandestinos»- a reconciliarse. Al mismo tiempo, reafirmaban los puntos irrenunciables para un acuerdo, que tenía que respetar la libertad religiosa y la identidad de la Iglesia, incluida la libertad de nombrar obispos. Testimonio de ello son las duras respuestas que san Juan Pablo II dio a las provocaciones chinas en lo que concierne al nombramiento de los obispos; la decisión de proceder a la canonización de los mártires chinos el 1 de octubre de 2000 a pesar de las duras reacciones de Pekín; y la carta del 27 de mayo de 2007 de Benedicto XVI a los católicos chinos, sólo por citar los más epatantes.
El cardenal Re pretende, además, desmentir una afirmación del cardenal Zen, según el cual el acuerdo firmado en septiembre de 2018 podía ser «el mismo que el papa Benedicto XVI se había negado a firmar con anterioridad». El decano asegura que ha verificado en el Archivo de la Secretaría de Estado y afirma con contundencia: «El papa Benedicto XVI había aprobado el proyecto de acuerdo sobre el nombramiento de los obispos en China, y que sólo ha sido posible firmar en 2018».
Por tanto, según el cardenal Re, el acuerdo secreto también llevaría la firma de Benedicto XVI, una revelación clamorosa que, llegados a este punto, exige que se demuestre con una prueba: que se hagan públicos los documentos de la Secretaría de Estado citados por el cardenal Re y el acuerdo secreto de 2018, con el fin de demostrar dichas afirmaciones. Si esto fuera verdad, la única deducción posible sería que el papa Benedicto XVI habría renegado de todo lo que ha escrito públicamente, como por ejemplo, la famosa y ya citada Carta a los católicos chinos de mayo de 2007, cuya radical diferencia con el enfoque explicado por Re mostramos en otro artículo. Además, Re no explica por qué, si Benedicto dio su aprobación al acuerdo, este no se firmó diez años antes.
De hecho, el pasaje que más consecuencias tiene para la Iglesia universal puede leerse inmediatamente después: «El acuerdo prevé la intervención de la autoridad del papa en el proceso de nombramiento de los obispos en China. También a partir de este dato cierto, la expresión Iglesia independiente ya no puede ser interpretada de manera absoluta, como «separación» del papa, tal como sucedía en el pasado». Afirmaciones que dejan pasmado: se puede ser «Iglesias independientes» y, al mismo tiempo, en comunión con el papa, una declaración que va más allá de los límites de la Iglesia china y que propone una nueva eclesiología. Pero, refiriéndose a China, es exactamente lo que el papa Benedicto XVI negaba en su Carta a los católicos chinos, en la que definía «inconciliables con la doctrina católica» los estatutos de la Asociación patriótica que, en cambio, el acuerdo secreto – en la medida en que podemos saber – legitima.
Está claro que el cardenal Re es consciente del alcance de estas afirmaciones, puesto que inmediatamente después explica que estamos delante de un «cambio de época», lo que implicará consecuencias «tanto a nivel doctrinal como práctico». Se habla, por tanto, de manera explícita de cambios doctrinales con tal de llegar al acuerdo con el gobierno chino, afirmación de enorme gravedad como se puede intuir fácilmente: es el enfoque exactamente opuesto al que manifestaron públicamente san Juan Pablo II y Benedicto XVI.
El resto de la carta cita las críticas más duras que el cardenal Zen ha dirigido al acuerdo, que se consideran una «impugnación» a la «misma guía pastoral del Santo Padre, también respecto a los católicos «clandestinos»», y se hace referencia al hecho de que el papa, en más de una ocasión, ha escuchado las razones del cardenal Zen y ha leído «sus numerosas misivas». El cardenal Zen se convierte, así, en el chivo expiatorio del prolongarse de las «tensiones y situaciones dolorosas» que dividen a la Iglesia china a pesar del esfuerzo del papa y sus colaboradores.
En otras palabras: el llamamiento del cardenal Re – el cual, claro está, no lo ha escrito por propia iniciativa – tiene como objetivo instar a sus hermanos a aislar al cardenal Zen, lo que lleva a pensar que la eliminación del arzobispo emérito de Hong Kong forma parte del acuerdo secreto. Sin embargo, el cardenal Re debería explicarnos por qué después del acuerdo las persecuciones contra los católicos en China se han intensificado, con el silencio absoluto por parte de la Santa Sede. Y debería explicar también cómo es posible que la Asociación patriótica, ahora reconocida por la Santa Sede, nunca haya manifestado ni una sola vez el deseo de comunión con Roma.
Publicado por Ricardo Cascioli en la Brújula Cotidiana.
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MARÍA AUXILIADORA declarará la guerra al Vaticano marxistizadi y traidor.
El Cardenal Zen, digno sucesor de los Apóstoles e Hijo fiel de Don Bosco tendrá la Corona de lis Santos, los otros pérfidos, la confusión de los felones.
“Yo Joseph Zen Se-Kiun, cardenal de la Santa Romana Iglesia, prometo y juro ser fiel desde ahora y para siempre mientras viva a Cristo y a su Evangelio.” Con estas palabras, el Salesiano Joseph Zen, obispo de Hong-Kong, ha prometido fidelidad al Evangelio y al Papa en la ceremonia de creación de 15 nuevos cardenales que Benedicto XVI ha presidido esta mañana en el Vaticano.
Durante el consistorio público, primero de su pontificado, el Papa ha impuesto el birrete cardenalicio a Mons. Zen y le ha otorgado el título de Santa María Madre del Redentor de Tor Bella Monaca, una parroquia de Roma.
Mons. Joseph Zen, había afirmado recientemente “sentirse feliz por haber sido nombrado cardenal en el primer grupo que el Papa Benedicto XVI designa”, y que su nombramiento demuestra que el Santo Padre está preocupado por lo que ocurre con la Iglesia en China, -“un signo de especial benevolencia del Santo Padre para con el pueblo chino”-, señaló. Francisco le ha traicionado.
Y por qué no criticas el descarado rompimiento del sagrado juramento de fidelidad al Papa que impunemente hace el señor Cardenal? Si no le gusta el Papa que tire la birreta y deje el ministerio sacerdotal, así de sencillo.
Cuál Papá? Quien se hace a un cargo mediante componendas, como cabildeo, mafia San Gallo, etc,( leer Dezinger Bergoglio) ?
Dios bendiga al PAPA BENEDICTO XVI. » El de Jesús»
Seguir al Papa (¿?) Gog-lio. NO. Seguir a Jesús . El Cardenal Zen la tiene bien clara: La iglesia Patriótica del estado comunista chino y Gog-lio es una burda farsa.
Eres Belzunegui? Seguramente sí, manejas varias cuentas para defenderte y autoapoyarte. Das pena etarra, vomitando tu odio al Santo Padre Francisco lo único que lograrás es tu condenación eterna.
Es tremendo lo que está pasando… Y muy doloroso, en especial cuando constato que se sigue poniendo de ejemplo en parroquias de España todo cuanto Don Jor ge dice y hace. Me resulta tan difícil de comprender, tanto más cuanto veo a buenos sacerdotes pedir por las intenciones del Papa en cada santa Misa dominical….¡Espíritu Santo, ilumínanos y danos fortaleza para no secundar lo que surge en tu Iglesia de la influencia ó acción malignas!
Comparto tu dolor. Muy pocos obispos y sacerdotes están dispuestos al martirio. El cardenal Zen sí está dispuesto. Está padeciendo un martirio en vida, prolongado, pero purificador y santificante. Gracias cardenal Zen. Gracias san Bosco. Gracias Neila.
«veo a buenos sacerdotes pedir por las intenciones del Papa»
Bueno, el obispo emérito de Kazajistán se niega a nombrar a Francisco en el Canon, lo considera el anticristo y sólo reconoce a Benedicto XVI. Vive actualmente en Polonia y le han tapado la boca. No es un friki, es uno de los firmantes de la Declaración de Verdades de 2019
Yo si rezo por el Papa.Benedicto XVI claro está.El otro es un usurpador con demostración fácil y evidente.
Rezar por las intenciones del Papa no es rezar por las intenciones de Bergoglio. No me acuerdo muy bien, pero creo que el canal Conoce, ama y vive tu fe, que es de Sana Doctrina, lo explica. Son tres intenciones y todas ellas santas. Por eso yo acepté rezar por las intenciones del Papa en el Santo Rosario que rezo los miércoles en la parroquia. Infórmate, de verdad, es cierto lo que digo, no tengáis miedo de rezar por las intenciones del Papa, es como rezar por las intenciones de todos los Sucesores de Pedro, no por las de Bergoglio en concreto. No tengáis miedo de hacerlo.
El Papa es Francisco, Sucesor de Pedro y Vicario de Cristo en la tierra, le duela a quien le duela. Quien rompe la comunión con el Papa, rompe la comunión con la Iglesia, así de sencillo.
Cagüen re
El Vaticano le declara la guerra al cardenal Zen. ¿ Y porqué le declara la guerra ? Por decir la Verdad, con mayúscula. Vaticanito francisquita y Verdad se excluyen mutuamente. La persecución francisquita a los católicos es notoria en todo el mundo; a los católicos chinos es exacerbada. Tiene verdadera obsesión. Utiliza a los comunistas para acabar con ellos. En Occidente utiliza al pensamiento único genderista. No soporta el Catolicismo. Soporta cualquier cosa, menos el catolicismo.
En verdad estás bien pendejo. Lo tuyo ya es patológico.
Además de una declaración de guerra contra el Cardenal Zen, esta carta del Cardenal Re empieza a desnudar la trama oscura del acuerdo con China y de la nueva política de «iglesias independientes» que, si bien no explica con precisión de qué se trata, deja en claro que es algo completamente distinto a las iglesias católicas locales que siempre dependieron de Roma, algo de una gravedad inusitada, sin duda.
En cuanto al Cardenal Zen, en su valiente actitud al denunciar este acuerdo desastroso para la Iglesia siempre acusó al Cardenal Parolín, no sólo de firmar el acuerdo, sino también de engañar al Papa Francisco.
Ante este injusto ataque del Decano del Colegio Cardenalicio parece que ha llegado la hora de que el Cardenal Zen haga un replanteo de las cosas y reconozca que el padre del acuerdo con China no fue el Cardenal Parolin, sino el Papa Francisco.
Si hay una declaración de guerra hay que pelear por la verdad, no hay otro remedio.
Otro sinverguenza, luciendo capelo cardenalicio, y creyendose dueño de la Iglesia Catolica, para hacer y deshacer según sus caprichos.
Juan Pablo II y Benedicto XVI, lo hubieran destituido al instante, por tales majaderías. ¿Qua hará Francisco? permitirá una vez más que los lobos destrocen el rebaño? Quien calla otorga.
la noticia más relevante de hoy es la explosiva carta firmada por el decano del Colegio de Cardenales, cardenal Giovanni Battista Re, enviada a todos los cardenales el día 26, en que ataca duramente al arzobispo emérito de Hong Kong, el cardenal Zen. La carta combina juicios engañosos, afirmando una continuidad inexistente entre la línea de este pontificado y la de los pontífices anteriores, con declaraciones muy serias: a Benedicto XVI se le atribuye la autoría del Acuerdo actual y se afirma un cambio doctrinal con respecto a la posibilidad de iglesias independientes . El cardenal Joseph Zen es un obstáculo para la Iglesia en China, y a partir de ahora la Iglesia católica también puede ser formada por Iglesias independientes.
¿Y a quién no? Eso sí, lo hacen MISERICORDIOSAMENTE….
El Cardenal Re es claramente consciente del alcance de estas declaraciones, tanto es así que inmediatamente después explica que nos enfrentamos a un «cambio de época» del cual surgen consecuencias «tanto a nivel doctrinal como práctico». El cardenal Re invita a los demás cardenales a aislar al cardenal Zen y nos hace entender que esto es parte de del acuerdo secreto. Sin embargo, el Cardenal Re debería explicarnos por qué después del Acuerdo la persecución de los católicos en China se intensificó, con el silencio total de la Santa Sede; y por qué la Asociación Patriótica, ahora reconocida por la Santa Sede, nunca ha expresado el deseo de comunión con Roma. Todo indica que el reinado de Re, que siempre ha estado, se hace más notorio.
El cambio de Re x Sodano indica claramente que el relevado no hubiera escrito lo mismo.
De hecho la aparición de Re nuevamente jugando entre los titulares del equipo del cambio de época con consecuencias doctrinales y prácticas es una designación dirigida al próximo Cónclave más que a otra cosa, es el peso pesado que tiene el equipo, no les queda otro con el conocimiento de Roma, los contactos, etc.
Aún con todos los ataques y las falsedades no logran desvirtuar la realidad de la imposición ideológica sobre la Teológica, cuyas raíces son contrarias al régimen de la Asociación Patriótica.
Tienen que asegurarse que el «próximo» no revoque el acuerdo secreto ni lo de a conocer.
¿Un cambio doctrinal respecto a la posibilidad de que haya Iglesias independientes? Será independientes de Jesucristo, cabeza de la Iglesia. Estos revolucionarios deben pensar que si se puede llegar a acuerdos con los luteranos, también se puede con el Partido Comunista Chino, pues, aunque sea ateo, nos dice una autoridad pontificia que es quien mejor aplica la doctrina social de la Iglesia; lo cual incluye la supresión del primer mandamiento de la Ley de Dios, el aborto forzado o la prohibición de que los menores asistan a misa…. Lo que igual se les ha pasado por alto es que en China se aplica la pena de muerte, declarada inadmisible por Francisco pese a que Dios mismo mandó que se aplicara en algunos casos; entre los cuales, conviene aclarar en estos tiempos, no está el de ser cristianos fieles, como los comunistas y algunos otros suelen pensar.
Ya lo dijo Nuestra Señora en Fátima: «…obispos contra obispos y cardenales contra cardenales»
Alucino con las cosas de este pontificado. Una jerarquía que trabaja por la destrucción de la Iglesia.
En tal caso, están haciendo una excelente faena.
El cardenal Zen ganará esa guerra tenga a quien tenga enfrente. El mayor triunfo será cuando Jesús le diga: «Ven aquí bendito de mi Padre»
Entonces todo quedará atrás y todo habrá merecido la pena.
Pido por el cardenal Zen y por todos los que están dando ejemplo de martirio en vida.
Lettera di mons. Viganò al Cardinale Zen
29 Febbraio 2020 – 15:09
Eminenza Carissima,
Sono l’arcivescovo Carlo Maria Viganò, già Nunzio Apostolico negli Stati Uniti d’America.
Ho seguito con profonda partecipazione, condividendo la Sua sofferenza nella preghiera, i Suoi numerosi accorati Appelli a papa Bergoglio, per la drammatica situazione della Chiesa Martire in Cina, che lui stesso ha colpevolmente aggravato con il proditorio e sciagurato Accordo segreto firmato dalla Santa Sede con il Governo Comunista Cinese.
I Suoi accorati Appelli, Caro Fratello in Cristo, sono rimasti sistematicamente inascoltati e persino derisi in modo ipocrita e perverso. Quanto al Cardinale Parolin, ha agito da mero sconsiderato esecutore di un malvagio ordine superiore.
Ho letto stamane la ignominiosa e vergognosa Lettera che il Card. Giovanni Battista Re ha indirizzato a tutti i cardinali contro di Lei. Ne sono profondamente rattristato e indignato, e desidero esprimerLe tutto il mio affetto, la mia preghiera e la mia solidarietà fraterna nell’episcopato.
Lei è un coraggioso Confessore della Fede a cui va tutta la mia venerazione e ammirazione!
Purtroppo la menzogna in Vaticano è eretta a sistema, la verità è totalmente stravolta, l’inganno più perverso è spudoratamente praticato anche dai più insospettabili, che ora si prestano ad agire da strumenti complici dell’Avversario. Si è giunti addirittura ad affermare che “papa Benedetto XVI aveva approvato il progetto di Accordo” firmato nel 2018, quando invece tutti sappiamo della sua strenua resistenza e della sua reiterata riprovazione delle condizioni poste da un Regime persecutorio e sanguinario.
Il Vaticano ha fatto di tutto e di più per consegnare nelle mani del Nemico la Chiesa Martire Cinese: lo ha fatto siglando il Patto segreto; lo ha fatto legittimando “vescovi” scomunicati, agenti del regime; lo ha fatto con la deposizione di Vescovi legittimi; lo ha fatto imponendo ai Sacerdoti fedeli di registrarsi presso la chiesa succube della dittatura comunista; lo fa quotidianamente tacendo sulla furia persecutoria che proprio a partire da quell’infausto Accordo è andata inasprendosi in un inaudito crescendo. Lo sta facendo ora con questa ignobile missiva a tutti i cardinali, volta ad accusarLa, a denigrarLa e ad isolarLa.
Nostro Signore ci assicura che niente e nessuno potrà mai strappare dalla Sua mano coloro che resistono al nemico infernale e ai suoi accoliti, trionfando su di loro “per mezzo del Sangue dell’Agnello e grazie alla testimonianza del loro martirio” (Ap. 12, 11).
Il Vostro esempio, Caro Cardinale, e il prezzo altissimo che state pagando per difendere la Causa di Dio e della sua Chiesa, provochi in noi un salutare scossone, ci strappi dall’inerzia e dall’assuefazione con le quali assistiamo supini alla resa della Chiesa Cattolica nei suoi più alti vertici e nella sua gerarchia, all’eresia e all’apostasia, per essersi messa a seguire il Principe di questo mondo, menzognero e omicida sin da principio.
Parce, Domine, parce populo tuo,
quem redemisti, Christe, sanguine tuo,
ne in aeternum irascaris nobis.
+ Carlo Maria Viganò
Arcivescovo tit. di Ulpiana
Nunzio Apostolico
Zen risponde a Re: “In che cosa avrei sbagliato?”
Aldo Maria Valli
Cari amici di Duc in altum, in seguito alla diffusione della lettera del cardinale Giovanni Battista Re ai confratelli del Sacro collegio a proposito del cardinale Zen, lo stesso vescovo emerito di Hong Kong si è rivolto al cardinale Re con una lettera che qui propongo.
A S.E. Rev. ma Sig. Card. G.B. Re
Decano del Collegio Cardinalizio
Sig. Cardinale,
mi sia permesso di usare il mezzo di una lettera aperta per una comunicazione più tempestiva.
Per via indiretta ho preso visione della sua lettera del 26 febbraio la quale (Prot. N. 1/2020) ha anche l’onore di aver così inaugurato il suo alto ufficio di Decano del Collegio Cardinalizio.
Ammiro il suo coraggio nell’avventurarsi in questioni che Ella pure riconosce essere “complesse”, mettendo a rischio il prestigio del suo appena inaugurato onorevole ufficio. Ma si sa che oggi c’è un vicepapa che riesce a mettere coraggio a tutti i servitori nella Santa Sede.
Veniamo alla lettera.
Per chiarire la visione di Giovanni Paolo II e di Benedetto XVI riguardo al comunismo mi basta ora rimandarLa a pag. 161-162 del libro Ultime conversazioni (Papa Benedetto mi fece avere una copia con la dedica “in comunione di preghiera e di pensiero”).
La domanda del giornalista Peter Seewald:
“Ha condiviso e sostenuto attivamente la Ostpolitik del papa (Giov. Paolo II)?”
Benedetto rispose: “Ne parlavamo. Era chiaro che la politica di Casaroli, per quanto attuata con le migliori intenzioni, era fallita. La nuova linea perseguita da Giovanni Paolo II era frutto della sua esperienza personale, del contatto con quei poteri. Naturalmente allora non si poteva sperare che quel regime crollasse presto, ma era evidente che, invece di essere concilianti e accettare compromessi, bisognava opporsi con forza. Questa era la visione di fondo di Giovanni Paolo II, che io condividevo.”
Y Re acusa a Benedicto de cambiar su actitud cosa que cualquiera que lo conoce sabe es no haría nunca. Re se ha convertido en agente del deomonio.
Impresionante la carta de Viganó.
«La verdad os hará libres»
Per provare che l’accordo firmato era già stato approvato da Benedetto XVI basta mostrarmi il testo firmato, che fino ad oggi non mi è stato concesso di vedere, e l’evidenza dell’archivio, che Ella ha potuto verificare. Rimarrebbe solo ancora da spiegare perché allora non è stato firmato.
Il cambiamento “epocale” del significato della parola “indipendenza” temo che esista solo nella testa dell’eminentissimo Segretario di Stato, indotto magari da una errata traduzione dal cinese fatta dal giovane minutante della Congregazione dell’Evangelizzazione dei Popoli, ormai monoculus rex in regno caecorum, il quale fu corresponsabile anche degli almeno dieci errori nella traduzione della lettera di Papa Benedetto del 2007.
Data però l’intelligenza dell’Eminentissimo mi è difficile credere che sia stato ingannato, è più probabile che abbia voluto “lasciarsi ingannare”.
Non capisco l’ultima parte della sua lettera, quantomeno confusa. I fatti sono lì. Ho evidenza che Parolin manipola il Santo Padre, il quale mi manifesta sempre tanto affetto, ma non risponde alle mie domande. Davanti a prese di posizione della Santa Sede che non riesco a capire, a tutti i fratelli desolati che si rivolgono a me dico di non criticare chi segue quelle disposizioni. Siccome, però, nelle disposizioni si lascia ancora la libertà a chi ha una obiezione di coscienza, incoraggio questi a ritirarsi allo stato delle catacombe, senza opporsi a qualunque ingiustizia, altrimenti finirebbero per rimetterci di più.
In che ho sbagliato?
Sono al cento per cento d’accordo con l’invito a pregare.
Ricordo che recentemente la Santa Sede pure ha raccomandato l’invocazione alla Madonna “Sub tuum praesidium” e quella all’Arcangelo San Michele.
Ovviamente c’è l “Oremus pro Pontifice” che conclude con “et non tradat eum in animam inimicorum ejus”.
Le auguro momenti più felici nel suo lungo servizio come Decano del Collegio Cardinalizio.
Obblig. mo
Card. Zen