Las extrañas ventas de una fundación en la que participa la diócesis de Madrid

Colegio Santamarca, propiedad de Fusara
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Una fundación ligada a la diócesis de Madrid vende 14 inmuebles de viviendas en el centro de la ciudad.

(El País/InfoVaticana)- Los 14 bloques de viviendas pertenecían a Fusara, una fundación tutelada por la archidiócesis de Madrid que contaba con esos inmuebles en propiedad gracias a la herencia de dos familias adineradas. Con las mensualidades que pagaban los inquilinos de dichos bloques se mantenían los centros educativos con los que cuenta la fundación.

Fusara es la Fundación civil de Santamarca y de San Ramón y San Antonio y pertenece a la Delegación Episcopal de Fundaciones, de la Archidiócesis de Madrid. Su objeto es educar a menores de edad carentes de medios económicos con enseñanza católica, siendo una fusión de dos fundaciones que contaban con numerosos inmuebles, de cuya administración proveían fondos para orfanatos, colegios concertados y residencias.

El patronato que gestiona Fusara lo forman seis miembros: el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro; el alcalde, José Luis Martínez-Almeida; la delegada del Gobierno, Paz García Vera; el decano del Tribunal de la Rota, Carlos Manuel Morán, y dos sacerdotes de la capital.

“Esto es una fundación civil aunque esté el Arzobispo”, cuenta a El País un portavoz del Arzobispado. Sin embargo, en el patronato también están dos párrocos de iglesias cercanas a los dos colegios que gestiona Fusara. Fuentes del Ayuntamiento han afirmado al citado periódico que no tienen constancia de esta operación. La delegada del Gobierno no estuvo presente el día que se aprobó la venta y tampoco delegó su voto, según fuentes de la Delegación.

Uno de los miembros del patronato, que prefiere permanecer en el anonimato, ha relatado a El País que la venta del patrimonio se empezó a gestar en mayo y que se dijo que fuera al mejor postor. “Se dijo que había un banco interesado. Nos reuníamos cada seis meses para observar que todo estuviera correcto. Quien tomaba las decisiones era David López Royo”, dice la misma fuente. David López Royo es un abogado que representa al arzobispo de Madrid en el patronato. Osoro le nombró Delegado Episcopal de Fundaciones en marzo de 2016.

El 30 de julio se vendieron los 14 inmuebles, pero Fusara no explica, según relata El País, los detalles de la operación, la cuantía de la venta y tampoco confirma si el dinero irá en parte para crear un gran proyecto de educación concertada en Madrid.

Hace un par de semanas, los inquilinos de estos inmuebles recibieron un burofax: “Venimos a informarles de que el pasado 30 de julio se formalizó la escritura pública de compraventa a favor de Alprozan Premium S.L del inmueble/local arrendada por usted”. La misma carta se envió a los vecinos de los otros 13 inmuebles que poseía Fusara, con una diferencia: el nombre de la empresa. Cada bloque de pisos ha sido adquirido por una sociedad diferente: Neoxata Trade S.L, Prozarmo Partners S.L, Pirosca Market S.L…

Las 14 empresas que compraron los 14 inmuebles de Fusara se crearon entre el 2 de abril y el 13 de junio de este año con un capital de 3.010 euros cada una. Todas tenían en principio la misma administradora: María Elena García Pastrana, que vive en Badalona y que cuenta con 1.012 empresas vinculadas a su nombre por toda España, según el registro mercantil.

Las 14 sociedades cambiaron de administrador días más tarde. La propietaria de este armazón empresarial de 14 empresas es otra sociedad limitada: Tapiamar Partners S.L.. El nuevo propietario del entramado es Roberto de Juan González que cuenta con 31 sociedades situadas en un domicilio social cercano al Paseo de La Habana.

Estas ventas se sumarían a la de San Jorge, que otra fundación -Fundación Santísima Virgen y San Celedonio- también ligada a la diócesis de Madrid estaría tratando de vender a Residencias Nebrija, causando una gran polémica entre sus feligreses.