Un documento del Archivo Secreto Vaticano revela el plan masónico para deponer monarcas y destruir la Iglesia

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«El Gran Oriente ha decidido primero deponer a todos los Soberanos para a continuación destruir a (?) la Iglesia, y, por último, establecer sobre las ruinas de la antigua sociedad burguesa una república mundial bajo la dirección del gran capital americano», escribía en 1918 el arzobispo de Colonia, el cardenal Felix von Hartmann.

El historiador alemán Michael Hesemann, en una entrevista publicada en Inside the Vatican, explica el interés de la masonería a principios del siglo XX por forzar la abdicación de los monarcas europeos y actuar contra la Iglesia católica:

«La ideología masónica, no sólo está basada en el deísmo, sino también en la herejía gnóstica de la autosalvación y la «iluminación», y tiene una agenda decididamente anticatólica. En 1917, Maximiliano Kolbe fue testigo de una procesión masónica en Roma, en la que se portaban pancartas con el lema ‘Satanás debe reinar en el Vaticano’. 

Un año más tarde, el emperador alemán Guillermo II fue advertido de que el Gran Oriente planeaba obligar a abdicar a todos los monarcas soberanos en Europa – lo que de hecho sucedió en 1918 – y destruir la Iglesia Católica (…), según un documento que encontré en el Archivo Secreto Vaticano.

El bolchevismo sería el instrumento de la masonería para alcanzar este objetivo. De hecho, 1917 fue el año de la revolución rusa [bolchevique] que terminó en una persecución masiva de la Iglesia.»

En marzo de 2017, Hesseman publicó un artículo sobre un documento histórico hallado en el Archivo Secreto Vaticano. Se trata de una carta escrita a mano el 8 de noviembre de 1918 por el arzobispo de Colonia, el cardenal Felix von Hartmann, y dirigida al Nuncio Apostólico en Alemania, monseñor Eugenio Pacelli, que más tarde se convertiría en el Papa Pío XII:

A continuación, algunos fragmentos de esta histórica carta recogidos por el portal OnePeterFive:

Su excelencia,

Su Majestad, el emperador acaba de hacerme saber «que el Gran Oriente ha decidido primero deponer a todos los Soberanos – en primer lugar a él, el emperador – para a continuación destruir a (?) la Iglesia, para encarcelar al papa, etc., y, por último, establecer sobre las ruinas de la antigua sociedad burguesa una república mundial bajo la dirección del gran capital americano. Los masones alemanes son, supuestamente, leales al emperador [alemán] (…) y le informaron al respecto. También Inglaterra quiere preservar el orden burgués actual. Francia y América, sin embargo, se dice que están bajo la plena influencia del Gran Oriente. Se dice que el bolchevismo es la herramienta para establecer las condiciones deseadas. Ante tan grave peligro que amenaza, además de a la Monarquía, a la Iglesia Católica, es importante que el episcopado alemán sea informado y que también el Papa sea advertido.» Hasta aquí el mensaje de Su Majestad. Me he creído en el deber de transmitirlo a su Excelencia, y tengo que dejar a su juicio si desea transmitir este mensaje a Roma.»

(Fuente: A.S.V., Arch. Nunz. Monaco d.B. 342, fasc. 13, p. 95-96)

Según señala OnePeterFive, tan sólo un día después de que fuera redactada esta carta, el emperador alemán Guillermo II se vio obligado a abdicar. Los temores se habían hecho realidad.

Cien años después, el Dr. Hesemann se pregunta si estamos hoy lejos de la anunciada y recomendada ‘república mundial bajo el liderazgo del gran capital americano’. «En este sentido, el documento del año 1918 parece casi profético», añade.

«¿Era un plan masónico del Gran Oriente también el proyecto para la historia europea del siglo XX y principios del siglo XXI? Eso sería sin duda una simplificación, al igual que cualquier teoría de la conspiración. Sin embargo, no se puede negar que la masonería planeó, hace casi cien años, lo que después se ha hecho realidad, y de una manera casi misteriosa», señala el historiador.

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