La Iglesia reconoce que su influencia moral en la sociedad se ha debilitado

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La Conferencia Episcopal ha admitido que la Iglesia ha visto debilitada su presencia y su ‘legítima influencia moral’ en la sociedad y en las personas debido a un ‘proceso de secularización generalizado’. La CEE lo ha reconocido en el Plan Pastoral para los próximos cinco años, presentada hoy miércoles, e inspirada en la exhortación apostólica del papa Francisco “Evangelii Gaudium”, y que lleva por título «Iglesia en misión al servicio de nuestro pueblo». En este documento, la Conferencia Episcopal observa un predominio de la cultura secular unido a la «poca valoración social de la Iglesia» y admite que, en ausencia de suficientes referencias religiosas, la cultura dominante es cada vez más secular. «En este proceso, la Iglesia ve debilitada su presencia y su legítima influencia moral en la sociedad y en las personas«, reconocen los obispos que opinan que muchos prescinden de ella como de una institución «anticuada e inútil, cuando no falsa y perjudicial». De esta forma señalan que los problemas de convivencia que implican «graves cuestiones morales», como las que plantean la natalidad, el aborto, la educación o el paro, y la inserción laboral de los jóvenes, se discuten y encauzan «sin tener en cuenta la moral natural ni la doctrina social de la Iglesia». Denuncian que «no pocos cristianos se van apartando de las enseñanzas de la Iglesia y se dejan guiar por las opiniones del laicismo» y que la doctrina católica no es tenida en cuenta por ellos «como un referente social para las leyes ni para las costumbres». «En la esfera de lo público apenas hay nadie que se atreva a haceruna referencia cristiana o simplemente religiosa«, lamentan, aunque, no obstante, afirman que también aparecen muchas iniciativas justas que buscan el bien de las personas, pero en ellas «predomina el pragmatismo, los intereses económicos y los consensos oportunistas, sin tener en cuenta las referencias morales». Así, en este contexto, «es normal que la religión y la Iglesia aparezcan como realidades inútiles y sin sentido», opinan los obispos que califican de «innegable» la «debilidad social de la Iglesia». La CEE destaca que se ha difundido en la sociedad la idea de que la religión no tiene fundamento racional ni científico, por lo que las creencias religiosas son vistas como «opciones subjetivas», que no pueden ser universalizadas «ni deben influir en el ordenamiento de la vida pública y colectiva». «En el mundo laicista, la religión puede ser respetada como una práctica personal o como un bien cultural, mientras se mantenga estrictamente en el ámbito de las prácticas privadas», apunta. En este sentido, denuncia que las instituciones públicas y políticas prescinden de cualquier referencia religiosa y lamenta que «no pocos entienden la no confesionalidad del Estado como una secularización global de toda la sociedad». «En la vida pública, el silencio sobre Dios se ha impuesto como una norma indiscutible«, critica. La CEE pide una reflexión para analizar cómo los propios obispos, sacerdotes, religiosos y fieles cristianos han contribuido al alejamiento de algunos cristianos. De esta manera, señala que un examen «humilde y sincero» obliga a reconocer «el empobrecimiento religioso» que se ve reflejado en la disminución del número de practicantes y en el «deterioro profundo» de la institución familiar y la defensa de la vida, así como de la educación religiosa de niños y jóvenes. «Ante este panorama no podemos quedarnos indiferentes«, sino revisar la manera de actuar y modificar «lo que haga falta» para superar los obstáculos de la fe. Los obispos no perciben todavía síntomas de vuelta a la valoración de la vida cristiana, pero creen que «hay motivos para pensar que la regeneración democrática de la que se habla, termine despertando el deseo de una regeneración moral». En su Plan Pastoral, la CEE contempla dedicar 2016 a la reflexión sobre las exigencias de la evangelización, en 2017 se centrarán en la comunión y corresponsabilidad de los agentes pastorales, en 2018 al anuncio de la Palabra de Dios, en 2019 a la celebración del misterio cristiano y en2020 al ejercicio de la caridad.

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Comentarios
0 comentarios en “La Iglesia reconoce que su influencia moral en la sociedad se ha debilitado
  1. Tal como van su influencia sera nula,los ejemplos que tenemos de algunos obispos y prelados no son nada evangelicos que digamos, Sistach respaldado a su chorizo,el de Mallorca regalando anillos a una mujer casada….y el de Logroño despedido en plan peñero carrascal,carrascal….joer que tropa

  2. Tanto empeño en «abrirse» al mundo, en «parecerse» al mundo no puede sino dar estos frutos. Una Iglesia igual que la sociedad no puede aspirar a ser referente de nada, y menos moral.
    Estamos recogiendo lo que durante tantos años se ha sembrado. Como dicen los anglosajones: «primero pateamos la tierra y luego nos quejamos de que hay polvo».

  3. Influencia nula por dos motivos principalmente: 1º enfrente tiene a la masonería y la izquierda que van a por ella y la atacan día y noche por tv, prensa y cine primordialmente . 2º Su pusilanimidad y connivencia con estos enemigos renunciando a defender el catolicismo. El principal aliado de aquellos dos es la propia CE que tiene al pueblo de Dios como narcotizado y sin reacción. La CE es el opio del pueblo (de Dios).

  4. Mis hijos van a un colegio concertado católico jesuíta en Huelva, donde los alumnos partidarios del aborto y el divorcio son aplastante mayoría.

  5. Nadie quiere estar en el equipo de los que se dejan pegar y ni siquiera se defienden. Hablar de la Iglesia a muchos hoy es hablar de unos peleles reprimidos conscientes de lo trasnochado de sus ideas. Menos mal que existen estos blogs de internet.

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